13 - Ira Incontrolable

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Después de disfrutar de la música por unos minutos, decidimos hacer algo para pasarla bien y relajar el ambiente. Por lo pronto, nos tomamos una foto y etiquetamos a todos en el grupo. Tanto Rihanna como el enamorado de Ari comentaron, pero Liam aún no lo había hecho. Era extraño.

En ese momento, mi celular vibró con una notificación de mi novio.

Chico Misterioso:
—¿Dónde estás, Alejandra?

Veo venir una tormenta... y una peligrosa.

Yo:
—En un parque cerca de mi casa con los chicos.

Chico Misterioso:
—¿"Los chicos"? Qué curioso, ¿Alisson también está ahí? —me respondió al instante, y pude notar la tensión entre ambos.

Madre santa, qué celoso es este chico. Por esta razón no quería decirle.

Yo:
—Sí, también está Alisson. No te enojes, por favor, por eso decidí no mencionarlo antes.

Chico Misterioso:
—Como digas, Alejandra. Luego hablamos, tranquila. —Y desapareció.

No me convencieron sus palabras ni el tono de sus letras.

Yo:
—Vale, cuídate.

Sin responder, se desconectó automáticamente. Esto sí era preocupante.

—Ale, ¿está todo bien? —preguntó Ari, entrelazando su brazo con el mío.

—Sí, todo bien —sonreí, intentando parecer despreocupada.

Mentirosa, mentirosa y mil veces mentirosa. Decidí no comentar nada para no arruinar el momento y fingí una sonrisa falsa para calmar el ambiente.

—Luego vamos a hablar, no creas que me lo he creído —susurró Ari en mi oído.

—Está bien —admití, porque ella me conoce demasiado bien.

Los chicos no se dieron cuenta de nuestra charla, pues estaban hablando sobre fútbol.

—¿Qué hacemos ahora? —les pregunté, inquieta.

—No sé, podemos grabar un video en vivo, montar alguna que otra atracción, recordar nuestra infancia —Leo guiñó un ojo.

—No es mala idea —le respondí con una sonrisa.

Estuvimos un rato disfrutando de varios juegos y, la verdad, recordé a mi "yo" pequeña. Quizá ella se sentiría orgullosa de la persona en la que me he convertido.

Nos tomamos una última foto, y ya era muy tarde, así que fuimos a casa. Ari y yo seguimos el camino, quedando solas.

—¿Me quieres decir qué te sucede? Has estado distante desde que Liam vio la historia —me miró fijamente mi mejor amiga.

—Se ha molestado por Alisson —le solté.

—¿Por qué?

—En el campamento, vio cuando él me robó un beso...

—Se complicó el caso, Alejandra —chasqueó Ari los dedos.

—Pues sí, ya te imaginas. Está furioso y muy celoso.

—Lo entiendo. Ya verás cómo todo se resuelve. Nos vemos mañana en la escuela —me dio un beso en la mejilla y un abrazo de despedida.

Fui directa a mi habitación, me tiré en la cama y revisé el perfil de Liam.

Yo:
—Hola, ¿aún despierto?

No recibía señales de él.

Yo:
—Hey, ¿estás ahí?

Mi Mejor Accidente [Providencia I]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora