Amarte, Es De Valientes.

Capítulo 11.

Él Señor Callum, la señora Elah acompañados de Laurel llegaron a al sala de espera, se veían preocupados.

- ¿Qué sucedió?- Leo se acercó a ellos y le explicó todo, no dejo escapar un detalle, le hablo de la condición que habían encontrado a Cloe. La señorar Elah ahogó un grito ante lo dicho. Se sintió muy mal ante la situación, no imagina que fuera algo tan grave.

Manson por su parte se mantenía al margen.

-¡¿ Oh Dios, quién puedo hacer algo tan terrible?- Exclamó la señora Elah.

- Su padre.- Respondió Manson.

....

Cole abrió los ojos, sentía muy cansada apenas podía abrir los ojos, no sabía dónde estaba, su cabeza daba vueltas.

Al estar más tranquila, se fijó en en el lugar donde estaba, era la habitación de un hospital.

No tenía recuerdos de como había llegado a este lugar. Se sentía un poco asustada. Intento levantarse para salir del lugar, no tenía dinero para pagar, ese lugar se notaba un poco costoso.

un quejido de dolor salió de su labios, el dolor provenía de su costillas.

- Tranquila, vuelve a la cama.- Se asustó al escuchar ese voz femenina. Pero al fijarse bien, la señorar Elah le había hablando.

- Señora....¿Qué..¿Que hace aquí?- Apenas por podía hablar, el dolor era insoportable.

- Pues estamos aquí por qué nos preocupas pequeña.-   La señora se acercó y le acaricio el cabello. Cosa que le agrado mucho a a Cloe, se sentía como un gesto maternal.

- ¿Cómo llegué aquí?, Lo que recuerdo es que la puerta donde... Donde, estaba encerrada fue abierta, después de eso solo recuerdo oscuridad.-

- Verás...

- Estás despierta.- Una feliz Laurel entro a  la habitación, corrió hacia ella y la abrazo.

- Con cuidado.- Elah la regañó.

- Lo lamentó, es que me hace muy feliz verte despierta, aunque no lo crea te he tomado mucho cariño Cloe.- La chica sonrió ante lo dicho por la rubia.

- Yo también.- Susurro un poco apenada.

- Me alargar que mi primo te haya encontrado. -

- Es pera... ¡¿Que?!, Tu primo... Él señor Manson, ¿él fue quien?-

- Si, mi hijo fue quien te saco de ese lugar y te trajo aquí.- Ella se sorprendió mucho ante la respuesta de la señora. Aunque no entienda por qué él señor Manson estaba en su casa.

- Veo que ya despertó.- Miraron hacia la puerta, había un joven doctor parado en la entrada de la habitación.

- Oh Daniels, que gusto volver a verte.-  El chico sonrió y se acercó a la señora Elah y la abrazó.

Cloe miró hacia Laurel está se veía un poco incómoda ente la presencia del chico.

- Es un gusto volver a verla otra vez a usted. Laurel es un gusto verte a ti también.- Ella se limitó a asentir. El camino hacia una mesita donde se encontraba el informe médico de Cloe, lo reviso detenidamente.- Muy bien, me presento mi nombre es Daniels Oconell, voy hacer tú doctor. -

- Muchos gustó, soy Cloe Davis.- Ella sonrió.

- Ahora te voy a revisar, según tu historial, tiene dos costillas rotas de tú lado izquierdo.  Voy a querer que no te muevas mucho.- Ella asintió.

...

- Él estado de la chica es muy delicado...

- Mamá.- Manson Llegó al hospital, su padre
Le había pedido que fuera por su madre, ya que el tenía que ir a la comisaría a poner la denuncia sobre lo que le había sucedido a Cloe.

- Manson, amigo.- Estrecharon las manos en forma de saludo.- Le comentaba a tu madre, que la salud de la chica es muy delicada,  aparte de los golpes, tiene anemia por deficiencia de folato (ácido fólico) y por deficiencia de hierro. -

-¡Oh por Dios!- La Señora Elah está soprendida.

- Si, ya se lo había comentado a Manson...

- ¿Cómo así?-

- Hace unos día, la Señorita Davis tuvo un pequeño desmayó y Daniels también se encargó de atenderla.-  Este respondió, pero recibió una mirada regañadientes de parte de su madre.

-¿ Por qué no nos dijiste?- Pregunto.

- No lo creí importante.- Respondió.

- Estará en el hospital por unos días, Manson nos vemos más tarde.- Este asintió.

- Pobre chica.- Susurro.

- Mamá,  no es para tanto, ella puede manejar  sus propios problemas.- Manson ya quería irse del lugar.

- Niño, esa no en la que te eduqué. Cloe no tiene a nadie y si nosotros la podemos ayudar eso haremos. - 

- Mamá, viene a buscarte.- Trato de evadir la conversación.

- Iré a despedirme de Cloe y tú prima.-  Ella camino de regreso a la habitación, Manson suspiró y camino atrás de ella.

Enteraron a la recamara, Manson al verla los recuerdo del día anterior volvieron a su cabeza, de como la había encontrado se instaló en su cabeza, esa misma imagen que no lo había dejado descansar durante la noche.

Sangre corría por el rostro de la chica, apenas podía podía respirar, cuando ella cayó entre sus brazos, sintió una prisión en su pecho.

Ese mismo sentimiento se apoderó de el a verla en la camilla.

- Se quedó dormida.- Escuchó a su madre comentale a su prima.

- Sí, sentía mucho dolor y una enfermera vino, le administró un calmante.- Ella sonrió.

- Yo ya me voy, me marcas a mi celular, cualquier cosa.- Laurel asintió.

- Hijo ya nos vamos.- La señora le hablo más este no reaccionó,  mantenía su mirada fija en Cloe. Por alguna razón sentía ese deseo de protegerla, suspiró un poco molesto, no era algo que le incumbe.- Hijo ya...

- Si, es hora de irnos.- Se dio la vuelta y salió del lugar.

- ¿ Y a este qué le pasa?- Laurel solo se encogió de hombros ante la pregunta de su tía. Elah depósito un pequeño beso en la frente de su sobrina y se acercó a Cloe y también beso su frente.

...

- La inflamación está bajando y eso es algo muy bueno.- Dijo Daniels mientras retiraba los guantes de sus manos.

- Creo que es una buena noticia.- Susurro Cloe, se sentía un poco agotada, hace unas horas vino la policía y le hizo algunas preguntas sobre lo sucedido. Se siente un poco mal por hacerle esto a su padre.

Pero sabe muy bien que tiene que ponerle un stop a lo que está sucediendo con su vida. Si que tiene un poco de miedo, puede no sabe lo que va a suceder de ahora en adelante.

-¿ Ya ella puede comer?- Le pregunto Laurel.

-Si,  enviaré a una enfermera.- Salió de la habitación.

Un rato después, una enfermera regreso con una bandeja, la dejo frente a Cloe.

Era una sopa de pollo con una rebanada de pan, también había jugo y de postre gelatina.

-  Ese idiota no pudo enviar algo mejor.- Laurel suspiró.

- No está tan mal.- Comentó Cloe mientras probaba un poco de su sopa.- De echo, eh notado que entre tú y el doctor guapo existe una tensión.-

- Es un idiota.-

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Hola mis amores, aquí les dejo un capítulo más, espero que lo disfruten.

Lamento no haber publicado durante días. He estado muy ocupada pero estaré de publicar mucho en esta semana.

Momento de pregunta y respuesta:

¿ Qué creen que le pasa a Manson?
¿ Le gusta la historia?
¿ Que pasara entre Laurel y Daniels?

Los amo y gracias por su apoyo.💗