Sempiterno [Atsumu Miya] Haikyuu

Capítulo 4

Después de un rato mis manos se habían hecho expertas sobre la lana. Esperar a los chicos siempre era algo tedioso, pero algo había mejorado.

13 de 40 cuadrados ya estaban hechos, algo había que agradecer a estos dedos.

Los chicos estaban en un partido de entrenamiento. Una escuela con la que ellos suelen competir había venido ¿Qué significaba? Muchas chicas locas en el gimnasio.

Aunque Atsumu insistió que lo fuera a ver, tener la mirada de desagrado de las chicas cada vez que celebró un punto de los gemelos no es agradable.

Estar sentada sobre un árbol es 100% más agradable, y más si solo tengo que tejer acompañada de la brisa y mis audífonos.

Tarareando paramore soy interrumpida por un toque en el brazo —¿Ya terminó el partido? —Preguntó sin mirar, ya iba a terminar el cuadrado 14

Me deshago de un audífono al no escuchar a ninguno de los gemelos, y los miró.

— Ah, disculpa te confundí, Murata-san — Digo con una sonrisa — Es que estoy esperando a los chicos.

Frente a mi estaba el secretario de la clase, Suoh Murata, algo sonrojado —Lo sé— Responde para luego aclararse la garganta, inclinó mi cabeza curiosa. Entonces...¿Qué haces aquí?

— ¿Me podrías ayudar, por favor? —Pregunta sin mirarme, y lo miró sin saber — Es que mi camiseta está en lo alto del árbol.

Levantó la cabeza de inmediato, entre medio de las hojas apenas visible, se podía ver un arrugado pedazo de tela ¿Eso estuvo encima de mi cabeza todo el tiempo?

Era bastante alto

— ¿Hace cuanto está ahí?

El chico me mira algo avergonzado, y hace una mueca — Lo acaban de tirar, lo siento.

Miró de nuevo la camiseta, y luego a él —Yo lo siento...no llego tan alto —Me disculpo algo culpable.

Él se ve como un chico delicado desde mi punto de vista, viendo esto.....quizás lo están acosando o algo.

— Oh no no — Dice negando con sus brazos— Yo la alcanzaré, solo no quiero molestarte.

Jeje que tonta....

- Claro - Respondo poniendo todo en el bolsa de lana lo más rápido que puedo. No se por que, pero su mirada me pone nerviosa.

Me bajo lo mejor que puedo del árbol para no parecer torpe frente a él - No tardaré más de un segundo - Me dice con una sonrisa amable antes de empezar a trepar el árbol.

Mierda....eso cierra la oportunidad de irse.

Le doy una sonrisa de cortesía, y solo quiero huir para que no se produzca un momento incómodo. Lo veo subir ágilmente el árbol ¿Acaso dije que era débil? Desde aquí abajo se ve gigante e incluso algo guapo....se ve bastante guapo.

El uniforme le sienta bien al secretario, e incluso lo lleva ordenado. ¿Él era tan alto? Solo le tomó estirarse sobre la rama en que estaba sentada para alcanzar su camiseta.

Baaaaam......¡Salto perfecto! Le doy un 10

-Whooa- Digo inconscientemente al verlo. Era como si se arreglara en cámara lenta y cada movimiento fuera perfecto ¿Acaso esto era un Dorama?

-G-Gran salto - Añado de inmediato cuando voltea a mirarme. Me sonríe por cortesía y hace un ademán con la camiseta en su mano.

Okey....si si. Momento de irme

- Bueno, adiós

Levantó la mano en forma de despedida para luego darme vuelta...parece que él no habla mucho. Lastima, es muy guapo

- ¡Hey Mo..!

Me volteo casi por inercia, pero mi apellido se queda a la mitad - No nada, solo gracias - Dice sacudiendo la camiseta en su mano.

-Claro - Respondo inclinando un poco la cabeza. Me fijo por un segundo en su camiseta ¿Es del club de basquetbol?

¿Cómo es que nunca lo he visto? ¿Será por las gafas?

Llegando al gimnasio se pueden escuchar los sonidos del partido. Un suspiro se me escapa al ver que aún no ha terminado...quizás debería haberme quedado hablando con ese chico un poco más.

(...)

Atsumu parecía estar pegado en su celular por enésima vez en el día ¿Que podía tenerlo tan concentrado? Intente seguir con mi tejido mientras la clase avanzaba, pero el ver así a Atsumu me estaba empezando a molestar.

-¿Nueva novia? - Preguntó curiosa acercándome - O quizás victima

Atsumu me da un gesto burlón, para luego negarlo con sarcasmo - Si, unas 20.

-Salúdame a la quinta - Comentó volviendo a mi tejido. Me guiña un ojo y vuelve a concentrarse en la clase

-En tu nombre, y le voy a pedir las notas de todas las clases que te has perdido por tejer esos estupidos cuadrados.

Su forma sutil de regañarme no era tan efectiva para hacerme sentir culpable, ya que, hacer cuadrados se estaba volviendo agradable.

-Ojalá tenga bonita letra.

-Hmm....¿Cuando dejarás de hacer eso? - Pregunta pegando su cabeza en mi hombro

Hago una mueca al tenerlo tan cerca. A los 7 años, te creo el gesto de ponerse sobre mi hombro, pero ahora tiene 16 y tiene un tamaño gigante que me intimida demasiado.

-Miya....

Atsumu da un suspiro dramático -Ha sido un día largo

Agarro su cabeza suavemente y la coloco sobre su mesa con un inminente puchero de labios de Atsumu

- Que sea largo en tu mesa Tsumu

Sigo moviendo mis manos a medida que la rabieta de Atsumu empieza a bajar, ignoro sus constantes reclamos y rezo por no terminar como Samu, clavándole un cornete en la cara.

-Ya estas bien grande para eso, además ¿Qué pasa si causa un malentendido? Alejarás a todos los chicos de mi así

Una pequeña risa sale de él –¿No habías dicho que tenías suficiente con los chicos? -Pregunta levantando una ceja.

-No para siempre- Le guiño un ojo con complicidad, y le doy un golpe juguetón- Nuestros hijos en el futuro tienen que ser mejores amigos ¿No?

Claramente lo agarro de sorpresa, porque su cara quedó en blanco totalmente –E-eh...to-pe-yo...yo...yo ...

– ¿Que pasa, Miya? No me digas que no quieres que tus hijos sean amigos de mis hijos

Un aliviado Atsumu pone la mano en su cara haciéndome fruncir el ceño - Jaja..soy un tonto. Claro, claro que quiero que sean amigos.

Lo miró extrañada, tiene las mejillas sonrojadas y de un momento a otro a clavado su vista al frente. Este Miya definitivamente es el más raro.

Se callo por el resto de la clase, y aunque fue raro pude terminar otro cuadrado ¡Esa manta va a quedar sensacional!