I Knew You Were Trouble. [Terminada]

Encerrados.

Jueves...Jueves...

En resumidas cuentas el martes no hice muchas cosas, el miércoles Zayn no fue a clase ni a tutorías, me dijo que debía "solucionar algunas cosas"... 

Casi todo el tiempo estuve con Luisa, pues Niall y Jo estaban muy melosos, y la verdad es que me volcaban el estómago; es decir, me encantaba que estuviesen juntos, simplemente me recordaban que en algún momento yo estuve así con Liam, entonces me ponía emocional, y la verdad no me gustaba estar triste, amargada o estresada. No era mi estilo.

Un nuevo día, habían pronosticado una tormenta de nieve; estaba algo asustada, aunque estar atrapada en casa  era bueno. Podría tener tiempo para mí, para pensar y para practicar para la audición de la beca.

Salí de casa bastante abrigada: guantes, bufanda, gorro de lana, botas, jeans oscuros, una camisa negra y un gabán hasta las rodillas del mismo color. Fui caminando pues esperaba volver a casa directo de la escuela, pues cuando había pronóstico de tormenta el Señor Sheeran no abría y las clases extracurriculares se cancelaban.

Llegué a la escuela, saludé desde lejos a mis amigos que iban en camino a sus clases; entré a mi clase de inglés, el Señor McQueen era un buen maestro, aunque a veces se tornaba aburrido. Ese día era uno de esos...

Cuando todas mis aburridas y frías clases terminaron sonó la campana para irme finalmente a casa. Quedé con Luisa para ir al cinema el Domingo, así estaría más relajada para algunos exámenes y para la primera ronda de la audición.

Iba pasando por la esquina de la escuela, cuando: –¡Marie! ¡Marie! –era la voz de Zayn. Me giré para verlo amablemente. Estábamos llevándonos “mejor" con el paso de los días. –Hola –me dio un beso en la mejilla, sus labios se sintieron tibios sobre mi mejilla casi congelada por el clima. –¿A dónde vas?

–A casa, no trabajo hoy...

–Ah. Podemos adelantar la tutoría si quieres, tal vez más tarde empiece a nevar... –sugirió mirando al cielo nublado.

Asentí. –Sí, mejor vamos ya, así te vas temprano a casa...

Nos pusimos en camino hacía mi hogar.

Abrí la puerta, Zayn me siguió hasta mi habitación y de inmediato empezamos a estudiar; como ya había entendido el tema más complicado sólo repasamos algunos temas que se le hicieron más fáciles.

Lo has logrado, Marie. Me felicité mentalmente.

De un momento a otro estaba titiritando del frío, así que bajé y le subí a la calefacción. El día se oscureció y con ello llegó el hambre típica de la noche. Puse a cocinar unas pastas y subí nuevamente a mi habitación. Zayn estaba mirando hacia abajo por la ventana.

–¿Qué sucede?

–Mira esto... –me acerqué a la ventana y pude ver como toda la calle estaba cubierta de nieve. De inmediato bajé a la puerta principal y no la pude abrir, ¡Estábamos encerrados por la nieve! 

–¡ZAYN! –le grité desesperada haciendo que bajara al segundo bajó.

–¿Qué? –preguntó bajando rápido por las escaleras.

–¡Estamos encerrados aquí!

–No juegues, ¿en serio? –bajó los escalones más rápido.

–¿Tengo cara de chiste? –le respondí groseramente.

Comprobó que realmente la puerta no cedía. –Tengo que llamar a casa. ¿Dónde está el teléfono? –preguntó preocupado.

–En la sala de estar... –caminó hacia el teléfono mientras yo iba hacia la cocina a checar  la comida, suministros y si aún teníamos los servicios básicos.