Epílogo

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     2 años habían pasado y en este momento Jimin y Jungkook estaban eligiendo muebles para lo que sería su nuevo departamento como pareja, al fin el pelinegro había encontrado el motivo para irse de casa de sus padres.

   Jimin se graduó como bailarín clásico y estaba montando su propia academia,; su madre se casó nuevamente y era muy feliz con el doctor Shen.

- ¿Qué opinas de éste? - el menor señaló un mueble color beige.

- Me gustaría que fuesen blancos.

- Pero yo quiero beige... Mmhg - gimió bajito.

-¿Qué tal si los llevamos blancos y los cojines beige? Se vería lindo — sonrió burlón.

- Está bien, tú ganas - puso los ojos en blanco - pero deja de hacer eso, maldita sea, no sé en que momento me dejé meter en esto.

- Corrección, te dejaste meter eso - se rió - y tu gemido reciente me hizo pensar lo contrario, así que no me hagas darle al botón de máximo.

- Hijo de... - sus palabras se vieron acortadas por una fuerte vibración en su culo, a causa de un juguete que Jungkook le había hecho llevar.

   Trás elegir todo lo necesario pidieron que fuese enviado a su dirección.

   Habían comprado un departamento bastante lindo de dos habitaciones y un amplio espacio.

    Mañana sería su aniversario, Jimin quería sorprender a su novio con algo pero no sabía muy bien que hacer, por el momento llegaría y ordenaría lo que pudiese del departamento, Aprovecharía que Jungkook debía ir la tienda de arte corporal.
Al llegar lo primero que hizo fué sacarse la cosa que ocupaba su ano, se dió una ducha masturbándose en el proceso, no se había podido correr en todo el día, su novio sí que disfrutaba burlarse de él, pero ahora era su turno.

   Después de un rato estaba listo, eran casi las 9, el pelinegro llegaría en cualquier momento y Jimin le tenía un sorpresa; primero una cena deliciosa y después...

Un delicioso postre.

   Jungkook cruzó la puerta masajeando su cuello, estaba exhausto, solo necesitaba relajarse un rato, sus ojos se abrieron de sorpresa al ver la mesa lista, Jimin siempre le sorprendía de manera grata.

- Buenas noches, bebé - besó sus labios, el menor llevaba una camisa suelta de seda y unos pantalones de igual forma sueltos en color negro.

- Buenas noches, cariño, ponte cómodo - le quitó el saco dejándole un beso en el cuello - disfruta esta noche, preparé todo para ti - susurró en su oído poniéndole la piel de gallina al contrario.

   Se sentaron y comenzaron a comer, exquisito como siempre, carne termino medio con salsa BBQ un tanto agridulce, patatas al horno y un risotto - está delicioso todo, bebé, muchas gracias, ¿puedo saber a qué se debe?

    Jimin lo miró con el ceño fruncido pero recordó que el aniversario era mañana, solo que él quería darle su regalo a las 12 en punto - nada ¿No puedo consentir a mi novio?

- Te conozco y algo tramas, pero haré cómo que no sospecho nada.

    Jungkook se duchó después de comer y tomaron unos tragos sentados en la terraza. El pequeño miró el reloj y faltaban 3 minutos para la media noche - sígueme - le ofreció su mano al mayor y este la tomó caminando detrás de él.

   Al llegar a la habitación le pidió que se sentase en la cama - ponte en la orilla por favor - el más alto lo miró extrañado pero hizo caso - bien - Jimin buscó una bolsa y la puso sobre la mesita, sacó una tela fina color borgoña y se acercó a su novio - cierra tus ojos, vamos a jugar un juego.

GIVE IN TO ME - Kookmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora