Cuando crees que las cosas van mal, podrían ponerse peor, gracias a tragedias transcurridas en tu vida decides mudarte a Inglaterra para encontrar un nuevo y mejor futuro, sin embargo, te darás cuenta que tu objetivo ha sido pisoteado por un secreto...
Eran aproximadamente las 3:30 pm cuando termine de preparar la comida, ya que por la interrupción de Katie me demore un poco.
En fin, preparé pollo rostizado junto a una ensalada y vino, ese plantillo recuerdo que lo probé en un restaurante... fue una de las sensaciones más satisfactorias que sentí al probarlo, y en su totalidad es más exquisito.
Hay algo que me gustaría resaltar, durante la comida fue lo mismo que los últimos dos días, miradas y miradas... que irritante.
Cuando terminamos de comer cada uno se fue por su lado.
Sin embargo, unas horas después mientras iba subiendo las escaleras Katie las iba bajando.
Me pregunto sobre el enorme retrato de esos dos ancianos y el niño que parecía forzado a tomarse esa foto.
Los Heelshire, en pocas palabras.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
- esta foto me trasmite muchas cosas, es inevitable no mirarla. —-dijo Katie—-
- ¿ah sí? ¿qué te trasmite?—-pregunté—-
- es una sensación extraña, no puedo describirla... pero sin duda esa familia no estaba bien.
- ellos son los Heelshire y su hijo Brahms, de lo que hablábamos hace un rato.—-señale a cada uno con el dedo—-
- recuerdo que hace dos días que llegue aquí me pregunté ¿quienes son ellos?
- bueno, al menos ya lo sabes.
Katie levantó las cejas y me pidió permiso para seguir bajando, le cedí el paso y continué con mi camino.
La verdad buscar a Brahms ya no tenía mucho sentido, este tiempo me sentí algo desconectada, desconectada con él.
No era lo mismo, desde que llegó Katie el ha estado más distante.
Para lo único que subí fue para cepillarme los dientes, hay demasiados baños en esta mansión pero hay uno en específico que me gusta mucho, aparte ahí tenía mis cosas para higiene personal.
