Capítulo XXIII

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MARATON Capítulo 1 de 3. Espero que los disfruten

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First siguió con el plan, la noche que había pasado al lado de Ja había sido fabulosa pero aunque lo acordado con San y la policía era acercarse al Juez para grabar su confesión sobre su violación, el chico estaba dispuesto a llevar su venganza a otro nivel. Llevaba meses alimentando su odio y su resentimiento hacia ese hombre, se acostó con decenas de asquerosos funcionarios sólo para poder ganarse la confianza de su empleador, asegurarse que su familia estuviera segura en otro país y llegar a estar a solas en la misma habitación con el desgraciado que le arruinó la vida. Ahora sólo debía esperar a que los hombres de Máx lo recogieran y partiría a la famosa Hacienda Chanthara.

Mew estaba todo el tiempo con San, haciendo seguimiento a los chicos que literalmente estaban en la boca del lobo, recopilando toda la información necesaria para que la operación fuera un éxito y no le costara la cabeza a ellos y a su amigo, y asegurándose que Gulf se mantuviera al márgen lo que le había costado el mayor trabajo.

- Todo esto es mi culpa, si les pasa algo será mi culpa, no me he podido comunicar con First en todo el día, Tul está incomunicado en casa del Diablo y Up se fue de la ciudad por exigencia de Kao, voy a enloquecer Mew - La angustia en la voz de Gulf estremeció el corazón del policía.

- Vámonos, escapemos de todo ésto, al menos por el día de hoy- Lo que para Gulf era una propuesta, para Mew era una orden, tomó del brazo al jóven castaño que lo miraba con sorpresa, lo sentó en la cama y le pidió que tomara una muda de ropa y la empacara en el morral donde habitualmente lleva los lentes y flashes para su cámara.

- A dónde vamos? ¿Es prudente hacer esto ahora? - Las preguntas de Gulf tenían mucho sentido pero Mew no las quería escuchar, necesitaba estar en sus cinco sentidos para la operación del día siguiente y no lo estaría si seguía pensando en el jovencito.

- No sólo tu necesitas ésto mi niño, te necesito- Mew colocó su mano sobre el mentón del chico y éste automáticamente encajó su rostro dentro de la mano grande y gruesa de su mayor.

Salieron del pequeño apartamento de Gulf, se subieron al auto y condujeron por un buen rato, ninguno de los dos dijo nada pero el silencio no era incómodo, el joven fotógrafo sentía la calma que sólo la presencia de Mew le regalaba y para el policía no era diferente, sólo el perfume de Gulf que llenó el auto al momento que se subieron en él fue suficiente para apaciguar la ansiedad de su corazón.

Gulf pudo ver por la ventana cómo iban dejando atrás el tráfico de la capital y se internaban en una zona a la que él nunca había ido. Unas montañas se podían observar en el horizonte y empezaron a entrar a una pequeña aldea, al final de la calle principal Mew giró a la derecha y siguió un camino un poco más rústico hasta llegar a una gran casa de campo, que aunque se veía lujosa y bien cuidada no contrastaba mucho con los alrededores.

Mew se estacionó en un gran garaje en el que se encontraban además 2 automóviles audi de modelos recientes, uno rojo y uno negro aún más llamativo para Gulf por su elegancia. El chico seguía observando todo a su alrededor sin hacer preguntas, Mew se paseaba por la mansión como si la conociera muy bien, entraron por la puerta que del garaje daba paso a la cocina y dos mujeres que se encontraban allí dieron un pequeño salto cuando los vieron entrar.

- Joven Suppasit - ambas hicieron una reverencia y ésto hizo que Mew tensara su mandíbula pero les devolvió el saludo de forma elegante y sincera. Gulf estaba a punto de preguntar todo lo que se le estaba atragantando en la boca cuando una señora mucho mayor a las que vieron en la cocina se asomó por el corredor usando un elegante bastón para sostenerse.

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