Capítulo 6

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Sasuke tomaba el sol cerca del pequeño lago que se encontraba en el jardín de la casa de los Uchiha.
Desde pequeño le encantó ese lugar, era el único sitio donde encontraba paz y tranquilidad en aquellos agitados días en los que solo existía la desesperación y el rechazo por parte de todo el mundo ¿el hijo menor?
Si, ese siempre fue el problema ¿y ahora qué? Él era soltero, poderoso y asquerosamente rico ¿gracias a quién? Pues sí, gracias a una mujer que siempre lo trató como basura, una mujer que lo odiaba, lo despreciaba y que jamás puso sus ojos sobre él. ¿Cómo pudo ser tan estúpido? Bueno después de todo se lo debía todo a ambos. Gracias a ese Hatake y a su señora esposa Sakura Haruno ahora su vida era suya y no tendría que sentirse amarrado a su hermano mayor, él era independiente y no necesitaba de nadie.

El chico era consciente de lo que su madre quería hacer con él y, lamentablemente debido a sus veinticuatro años de edad, por una vez en su vida sabía que lo más recomendable era que se casara con una mujer que le pudiera dar hijos. Ahora no tendría problema para encontrar esposa.

Itachi tuvo suerte a la hora de encontrar esposa. Al parecer él se enamoró de la hija única de un hombre adinerado que la consentía en todos sus caprichos, en resumen, su hermano viviría de la gran herencia de su esposa y no tendría que trabajar para Shisui, si lo mirabas bien los tres habían tenido una gran suerte aunque no todo fue especialmente fácil para él.

Hace tiempo habló con Ino -una gran amiga que realmente apreciaba- sobre toda su historia, todo lo que ocurrió y la razón por la que no se conformó con su deber de hermano menor, no obstante fue incapaz de decir toda la verdad. ¿Cómo decir así como así todas las horribles cosas que hizo tan solo para conseguir dinero? Secretos oscuros que le atormentaban y por los que odiaba venir a la ciudad. El chico cerró los ojos y recordó esa noche, la noche en la que ella le vio, en la que le pilló in fraganti con la señora Takahasi ¿su amante?, ¿podría describirse eso como una aventura amorosa? Por desgracia no, no obstante prefería que Sakura pensara que tuvo una aventura con la señora Takahasi antes de que se enterara de que daba placer a esa mujer tan solo para conseguir dinero. Bueno a esa mujer y a unas cuantas más de la ciudad ¿sería verdad que Ino creyó que lo consiguió por las apuestas solo? Ella solía ser bastante perspicaz para descubrir este tipo de cosas.

Como fuera, él no se sentía orgulloso de su pasado precisamente y si Mikoto llegase a enterarse de todo jamás se lo perdonaría porque ¿qué madre estaría orgullosa de un hijo que con quince años se acuesta con mujeres de treinta o incluso más años que no se sienten satisfechas, sexualmente hablando? Todas las espinas de esas rosas le atormentaban y se clavaban en su corazón. Solo había una rosa sin espinas que había deseado y para su desgracia jamás la había conseguido y ahora seis años después no pretendía para nada hacer algo para mantener una estrecha relación con ella.

Hace tres años él recibió una carta de la hermana de Sakura -es decir su cuñada Tayuya- diciendo que Kakashi Hatake había sido asesinado en el viaje de regreso a su casa. Al parecer unos criminales asaltaron el barco en el que navegaba y apenas si quedaron supervivientes. La noticia no es que le entristeciera, ya que ese hombre era en parte el responsable de su infelicidad junto a su arrogante señora, a la que amaba y odiaba con toda su alma.


El chico suspiró y tapó sus ojos con el antebrazo derecho ¿por qué se ponía a pensar en esas cosas en estos instantes?, ¿tal vez por qué la había visto de nuevo?, el siempre solía llegar tarde a los cumpleaños de sus sobrinos para evitar encontrarse con el matrimonio. Siempre huyó como un cobarde, no afrontó la situación y lo peor de todo es que su corazón no quería dar una pequeña oportunidad a ninguna mujer. Ni a ella, ni a nadie.

Sasuke sintió unos pasos y retiró el brazo de sus ojos para ver quién era ¿su cuñada?, ¿qué querría ahora Tayuya? El chico se colocó en la misma posición de antes y sintió un fuerte resoplido por parte de la mujer que se sentó a su lado.

El hermano menorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora