•Dulce Tentación•

Capitulo 37

Lauren pov

Desperté por el sonido insistente de mi celular, con suma pereza cogí el celular. Era una llamada de mi irritante hermano.

-Si?- Dije con voz adormilada.

-Te estoy esperando.- Fui lo único que dijo, de fondo se escuchaba una fuerte música.

Por un momento pensé que ya había amanecido, dormí tan profundo que se sintió que fueron por muchas horas.

-Nunca dije que iría Christopher- Dije con simpleza sentándome en la cama.

-Claro que dijiste que si! Pero obviemos eso. Entonces te perderás esto?- Preguntó esta vez alejándose del ruido tan fuerte que se escuchaba.

-Perderme qué?- Pregunté.

-Una buena noche Lauren.- Dijo con seguridad.

Al final no haría nada esta noche solo estar en mi cama pensando, y eso es lo que no quiero, estar pensando demasiado.

-Voy a ir, no tengo nada mejor que hacer- Le dije y sin esperar respuesta colgué la llamada.

Ya me imagino dónde él está.

______

Dos horas después me encontraba en el club favorito de Christopher.

Entré a aquel club buscando a Christopher con la mirada, la música era alta, el ambiente se miraba prometedor, muchas personas bebiendo y bailando, típico de todos los club.

Sentí una mirada sobre mi pero no le di importancia, ya que a cada lugar donde voy suelo robar muchas miradas.

Caminando y caminando no logré localizar a Christopher, no me quedó de otra que acercarme a la barra. Ahí me senté y pedí un Whisky.

Luego de darle un trago a mi vaso, saqué mi celular del bolsillo para enviarle un mensaje a Christopher. En espera de la respuesta alguien se para al lado de mi. Subí la mirada para ve quien es.

Es la misma chica que ví en Starbucks, Rosalía.

Ella tomó mi vaso en su mano y sin dejar de mirarme bebió de la bebida que contenía el vaso.

Yo la miré expectante.

Ella dejó el vaso otra vez en su lugar y se acercó a mí, a la altura de mi oído.

-Qué casualidad.- Murmuró en mi oído.

Antes de que pudiera decir algo Christopher se apareció interrumpiendo el momento.

Ella miró a Christopher y luego a mi, y me sonrió.

Y sin decir nada se marchó.

-Y ella quién es?- Preguntó Christopher sin dejarla de mirar, yo tampoco dejaba de mirarla. Hasta que se perdió entre las personas.

-No sé mucho de ella, la encontré en un Starbucks y su nombre es Rosalía.- Le dije tomando de nuevo mi vaso.

No lo negaré, esa mujer es atractiva y despierta algo dentro de mi.

-Vamos Lauren- Christopher me agarró de la mano.

Caminé con él hasta la mesa donde él estaba con unos amigos ya conocidos para mí.

Después de una hora y media, entre beber, conversar y seguir bebiendo, ya estaba empezando a sentir el alcohol en mi cabeza y como mi cuerpo flotaba.

Miraba a mi alrededor con atención buscando a aquella chica, pero probablemente ya se ha ido.

Al no encontrar resultado me rendí y seguí bebiendo.

-Demonios Lauren, aquella chica se mueve muy bien- Dijo Christopher y me señaló directo al centro donde había una mujer bailando.