PAZ
Por un momento, Jimin pensó que había escuchado mal.
Seguramente su hermano no podría decir lo que él pensaba que estaba diciendo.
—¿Qué? —Él dijo.
Wooyoung se sonrojó, irradiando culpa.
—Voy a volver al Alto Fever —dijo—. Seré el aprendiz del Maestro de nuevo.
Jimin entrecerró los ojos.
—Aprendiz —dijo con escepticismo.
Wooyoung se sonrojó aún más y miró a Choi.
—Bueno... Sí, aprendiz.
Choi dio un paso adelante y puso una mano sobre el hombro de Wooyoung.
Jimin no pudo evitar notar lo posesivo que era ese gesto. Se erizó, pero Wooyoung pareció inclinarse al tacto, su presencia telepática se volvió más cálida y ligera.
Jimin lo miró y se dio cuenta de que nunca antes había visto feliz a su hermano. Realmente, realmente feliz.
La idea era desgarradora, pero Jimin no podía estar molesto por tanta felicidad. Respiró hondo y dejó escapar el aire.
Calma. Él podría estar tranquilo. La felicidad de su hermano era más importante que su propia decepción.
Miró a Choi a los ojos y dijo:
—Te encargarás de él, oíste. Si alguna vez lo lastimas...
—No lo haré —dijo Choi simplemente—. No permitiré que ningún daño llegue a mi aprendiz.
Aprendiz. Claro.
—¿Y cuándo ya no sea tu aprendiz? — Jimin dijo. En su visión periférica, vio a Wooyoung mirando a Choi, también, esperando su respuesta.
—Él siempre será mío —dijo Choi, apretando su mano sobre el hombro de Wooyoung —. Ya sea que tenga veinte, cincuenta o cien años —Los ojos de Choi estaban muy serios. Jimin lo sondeó mentalmente y, por más que lo intentó, no pudo sentir nada más que sinceridad.
Jimin suspiró y se pasó una mano por la cara y el cabello.
— Wooyoung, ¿podrías dejarnos por un momento? Solo por un momento.
Wooyoung dudó, mirando entre ellos, luego asintió y se fue.
Una vez que estuvieron solos, Jimin miró a Choi con gravedad.
—¿Cómo se supone que debo estar bien con mi hermano, un Príncipe y mi único heredero, siendo tu chico juguete?
La mandíbula de Choi se apretó, algo oscuro y peligroso apareció en su presencia telepática.
—He tenido muchos 'chicos juguete'. Wooyoung no es uno de ellos.
—Entonces, ¿qué es él para ti? — Jimin espetó—. ¿Estás diciendo que le darás una familia? ¿Que le darás hijos? ¿Se les permite siquiera a los Adeptos Mentales de la Orden tener hijos?
Algo parpadeó en los ojos de Choi. Jimin tuvo la extraña sensación de que era la primera vez que se le ocurría la idea.
Choi guardó silencio por un momento, con una mirada contemplativa en su rostro.
—No sabes nada de la Orden —dijo al fin—. Tenemos linajes que funcionan de la misma manera que las familias tradicionales funcionan para vosotros. Puede que no estemos relacionados por la sangre, pero nos ocupamos de los nuestros—Él se encogió de hombros—. Sin embargo, hay Maestros que tienen familias e hijos tradicionales. No soy muy aficionado a los niños, pero si Wooyoung quiere tener alguno... —Algo melancólico apareció en su expresión—. No estoy completamente en contra. En cualquier caso, eso es algo entre Wooyoung y yo —Miró a Jimin a los ojos—. Entiendo que eres su hermano y que te preocupas por él. Pero no tienes nada de qué preocuparte. Ya no es el niño que me confiaste hace diecinueve años. Es capaz de pensar por sí mismo y sabe qué tipo de hombre soy. Francamente, tu preocupación es ridícula. Wooyoung tiene una gran cantidad de poder sobre mí, porque haré cualquier cosa para mantenerlo a salvo y satisfecho. Él es mi mayor debilidad —La expresión de Choi se volvió tensa, como si las palabras fueran físicamente dolorosas para él.
Jimin suspiró. Podía sentir la sinceridad en las palabras de Choi. No estaba mintiendo por una vez.
Miró a Choi, y Choi lo miró también, su mirada firme y tranquila.
A Jimin no le gustaba mucho este hombre. Pero si podía hacer que su hermano se viera tan feliz, Jimin tendría que aprender a quererlo.
—Está bien —dijo, y después de un momento de vacilación, rozó su presencia telepática contra la de Choi. ¿Paz?
El toque de respuesta de la presencia telepática de Choi fue bastante cauteloso, pero no del todo hostil.
Jimin asintió y se dio la vuelta.
—Entonces, ¿cómo vamos a manejar a la prensa?
