Ascenso (Mafia turca)

XXI

Beyhan Aksoy.
6 años atrás.

La música de la fiesta es demasiado alta, al principio no le había tomado importancia pues tenía a mi hermano y mis amigas conmigo, pero ahora Hamza estaba en algún lugar de la fiesta devorando a Bellinay y Hasret se perdió en su búsqueda de un trago.

Ya no importaba la música cuando sólo había venido por una razón, buscar al idiota que aún era mi novio y terminar con él. Oliver Kiliç, de todos los chicos que tenía para escoger elegí a ese idiota.

Tuve que haber terminado con él desde que meses después de iniciar nuestra relación, quería controlar mi interacción con Ali, no le gustaba que salía de fiesta con Has y Belli o la forma en que muchas veces me trataba.

Retrasé esto por tonta, no había otra razón. A mi padre no le agradaba mi relación con Oliver, contrario a la felicidad de los Kiliç que estaban contentos con que su hijo hubiera cautivado a una Aksoy.

Su familia era una de las familias turcas más influyentes en Inglaterra así que cuando empezamos a salir fue felicidad pura para algunos; sabía que al contrario de nosotros, ellos aun eran extremadamente conservadores, teniendo la religión musulmana la cuál mal interpretaban en diversas ocasiones, nos consideraban a mi hermano y a mí pecadores porque no seguíamos la religión como ellos.

Pero sólo importaba que era una Aksoy y sería la próxima en heredar las empresas de mi padre, ese era el trato, Hamza se queda al frente de la mafia y yo me encargo de las empresas. La mafia no es mi objetivo y sé que mi hermano se ha preparado toda una vida para ser el líder.

Volver a Turquía representó muchas cosas para nosotros, para los Aksoy y sus acompañantes fue regresar a nuestros orígenes, para personas como ellos, una oportunidad para hacer lo que quisieran sin que la ley tuviera consecuencias sobre ellos.

Y aquí estoy, buscando a Oliver hasta que lo encuentro jugando beer pong, no entendía realmente la afición por ese juego de origen estadounidense. Me acerco a él -Oliver- Voltea a verme - Güzel- Me toma por la cintura y me lleva con él - Volví a ganar, llegas justo a tiempo para ver como tu hombre gana - "Mi hombre", me parecía repulsivo que se autodenominara así, de hombre no tenía mucho más que la testosterona y el aparato reproductor.

-Oliver, tenemos que hablar- Le digo nuevamente separándome de él -Otra ronda más y hablamos Bey - Ruedo los ojos -Dije que tenemos que hablar - Me presta atención y no ignoro la mirada que le da a mi cuerpo -Estás muy tensa, toma un trago - Uno de sus amigos me da un vaso y lo tomo de golpe, necesito fuerzas para no golpear a este idiota y espero que el licor me lo brinde.

Abrazo su cuello, me acerco a su oído y hablo tranquila - Dije que vamos a hablar, negarte o retrasar esto no es una opción - Le digo y pongo una sonrisa que cualquiera pensaría que estamos en un momento cariñoso -De acuerdo -.

Busco una habitación libre y en cuanto encuentro una, le digo que entre - ¿Qué pasa Beyhan? - Me pregunta - Hasta aquí llegamos, ya no quiero ninguna relación, estoy rompiendo contigo - Su rostro se deforma, no le presto atención y doy la vuelta, me jala del brazo -No estás rompiendo conmigo Beyhan - Aprieta con mayor fuerza mi brazo.

-Ya lo hice, ya no me interesa lo que tengas que decir porque ya acabó - Me agarra del otro brazo y empiezo a forcejear con él - No te vas de aquí hasta que yo lo decida - Sigo tratando de zafar mi brazo de él, cuando me doy cuenta de que no puedo, le doy un rodillazo en la zona de los genitales y una patada en el estómago una vez cae - No me vuelvas a tocar en tu puta vida -.

Camino hasta la puerta y la abro, pero soy empujada de regreso por sus dos amigos, John y George. Oliver se levanta con ayuda de George y John me tiene sujeta por detrás.