IV. ERROR

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(Los textos escritos con esta letra son pensamientos y también escritos que algunos personajes desarrollan durante este capítulo).


Habían pasado dos días desde la cita de Brooke y Alexander, para desgracia de Elara, ella tuvo que volver a su casa para ayudar en la librería. Ahora la casa Potter se sentía sola, pues James se encontraba en el ministerio y Harry se había ido el día anterior a casa de los Weasley.

Eran las cuatro de la tarde y Brooke se encontraba en la oficina de su padre intentando encontrar las palabras para escribir la carta al profesor Dumbledore, lo había evitado lo más que pudo, pues sus inseguridades la carcomían, pero ya no lo podía hacer más, lo que le dijo Alexander ayudó a que se decidiera a hacerlo.

Llevaba alrededor de trece borradores y ninguno la convencía- Querido profesor Dumbledore... no, parece carta de amor -De nuevo un papel cayó en el basurero- Solicito el trabajo de maestra de herbolo... Muy directo, amm.

Después de varios intentos fallidos al fin pudo escribir la carta.

Profesor Albus Dumbledore,

Después de mi graduación de Hogwarts tomé el tiempo de conocer y experimentar con diferentes especies de plantas, durante mis estudios logré concluir mis ÉXTASIS con excelencia en Herbología, sé que hay una vacante para profesor de Herbología, me encantaría ser una candidata para el puesto.

La profesora Sprout fue increíble durante sus años de enseñanza en Hogwarts y su retiro es una gran pena, pero mucho de lo que sé se lo debo a ella y si se me da la oportunidad planeo seguir enseñando con la calidad que solo ella nos dio a todos.

Espero su respuesta,

Brooke L. Potter.

Después de quedar conforme con su carta, Brooke ató la misma a la pata de su lechuza Darcy, una lechuza blanca casi igual a Hedwig, y vio como salió por la ventana para llegar a su destino.

Comenzó a ordenar el estudio, pero un ruido en el piso de abajo hizo que se quedara inmóvil, sabía que no era su padre, pues llegaría a las 7 de la noche y también sabía que no era su hermano, pues llegaba el día después.

Tomó su varita y salió silenciosamente del estudio, quien estuviera en su casa no se preocupaba por ser silencioso, así que Brook intentaba no hacerse notar, siguió caminando hasta la cocina, donde se originaba el ruido y levantó su varita, esperaba lo peor, un ladrón, un fantasma, lo que sea menos lo que encontró.

Vio la puerta de la nevera abierta, y dentro estaba un cuerpo asaltando la comida. La persona sintió la presencia de la Potter así que levantó el rostro, y en ese momento Brooke se topó con el apuesto rostro de Sirius Black.

-¡Por Merlín Sirius! Pensé que eras un ladrón -La chica pudo volver a respirar, en ese momento le puso más atención al Black, tenía rastros de crema batida y chocolate en la comisura del labio y en las manos tenía pastel-. Espera ¿Qué haces en mi casa?

-Me ofende tal acusación, prácticamente vivo en esta casa y lo sabes -Sirius se tomó el tiempo de observarla, se veía realmente linda-, vine porque James y yo saldremos.

-Solo no lo regreses muy tarde por favor, tiene trabajo mañana -Brooke se sentó en una silla de la barra de la cocina- ¿Cómo va todo en la galería?

-Todo va bien, hemos tenido muchas ventas por el momento -Le encantaba poder hablar de su trabajo, era algo que lo apasionaba demasiado-. Deberías de venir un día, estamos haciendo presentaciones cada cierto tiempo para vender más obras.

Sinners | Sirius Black | +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora