VIII. EN BÚSQUEDA DE LA FELICIDAD

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La fiesta seguía en la parte trasera del hogar Potter, James platicaba animadamente con Remus sobre algunos antiguos conocidos de sus años en Hogwarts, mientras reían por dichas historias, Harry se acercó a la mesa donde se encontraba su padre luciendo confundido.

-Papá -James prestó atención a su hijo- ¿No has visto a Brooke? Charlie la ha estado buscando por 20 minutos, pero no la encuentra.

-Ehh, no –se rascó la nuca-. Pensé que estaba con él.

-Nop -remarcó la p-, ya me está empezando a preocupar, ¿nos podrías ayudar a buscarla?

El hombre no lo pensó dos veces y se levantó junto a Remus para buscar a la chica, James desde hace ya unas semanas atrás había notado que algo no estaba bien con Brooke, pero no quería presionarla para que le contara lo que le pasaba.

James se dedicó a buscar a su hija entre las personas que se encontraban dentro del hogar pues para él era raro que su hija desapareciera de la nada.

Remus por otro lado decidió buscar a Brooke dentro del hogar esperando encontrarla dormida.

Sirius y Brooke se encontraban en la habitación de la chica, parecía bestias encadenadas sin alimento por meses que al momento de soltarlas corrieron sobre su alimento. Pues al momento de llegar a la habitación de la chica, Sirius la llevó a su cama mientras besaba cada centímetro de su cuerpo con delicadeza, detallando cada parte de ella, besándola con ferocidad, pero sobre todo con amor.

Las prendas de ambos les comenzaron a estorbar, pues cuando acordaron Brooke solamente se encontraba en ropa interior mientras Sirius aún portaba su pantalón sin nada en la parte de su torso.

-Eres tan hermosa –le repetía Sirius mientras besaba su pecho-. Te amo tanto...

Brooke sujetaba el cabello del hombre sobre ella mientras suspiraba entrecortadamente, esto era mejor que cualquier otro estímulo que había recibido en su vida, sus palabras hacían que pequeños escalofríos recorrieran su espalda.

Sirius comenzó a descender lentamente llegando a su monte de venus, comenzó a besar y lamer la zona íntima de la chica sobre su ropa íntima. Le robaba gemidos desesperados mientras escuchaba su nombre salir de los labios de Brooke.

Detuvo su labor y regresó a devorar la boca de la chica mientras frotaba su miembro sobre la ahora empapada braga de la chica.

Estaba a punto de quitarse el pantalón cuando la puerta se abrió apresuradamente haciéndolos saltar a ambos lejos del otro. Al voltear Brooke pudo sentir su estómago voltearse provocándole nauseas instantáneas. Sirius apresuradamente se levantó de la cama mientras Brooke se tapaba con su sabana.

-A-amigo, y-yo –Sirius intentó hablar.

-No... -Remus finalmente habló-, Brooke no...

La mencionada volteó a ver a Remus con vergüenza reflejada en el rostro- tío Rem, yo...

-¿Cómo pudiste Sirius? -su sorpresa se volvió enojo de inmediato, volteó a ver a Sirius con odio puro- ¡¿Qué pensabas?! ¡Es la hija de tu mejor amigo! ¡La viste nacer por amor a Merlín!

-Remus, por favor cálmate -Sirius se intentó acercar al hombre pero este solo se apartó-, vas a hacer que alguien nos escuche.

Remus se rio sin ganas- ¿En verdad es lo que te interesa? ¿Qué alguien nos escuche? No lo puedo creer, sabía que eras un imbécil pero no pensé que llegaras a este nivel.

Sirius agachó el rostro, las lágrimas amenazaban con escapar de sus ojos pues sentía como perdía a uno de sus mejores amigos ¿Tan malo era amar a alguien?, era lo único que podía pensar.

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⏰ Última actualización: Jun 22, 2023 ⏰

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