Loca por ti

XI

Hoy iba a ser un gran día. Iríamos Clara y yo a entrar al equipo de baloncesto.

Me puse algo cómodo y me fui al instituto.

Me apetecía andar asique le dije a mi padre que no hacia falta que me llevara.

Cuando llegué Clara me estaba esperando.

-Corre, vamos, quiero entrar lo antes posible- dijo muy ilusionada, casi gritando. De ahí las poker faces que nos ponían todos.

-¿A dónde vais tan corriendo?- dijo Angel.

Lo que faltaba. No me apetecía verle asique seguí mi camino.

Cuando llegamos a las canchas, eran todos chicos.

-Hola, ¿el entrenador?- dijo Clara.

-Allí esta, es el de blanco- dijo un chico que me resultaba familiar.

Nos fuimos hacia allí y nos presentamos al entrenador. Le dijimos que nos gustaría jugar con ellos y como era de esperar, el entrenador se negó rotundamente.

-Si te demostramos que somos lo suficientemente buenas para entrar, ¿nos dejarías entrar?- dije.

- Sí, pero sé que no lo vais a conseguir asique no tengo problema-

Nos pusimos a jugar y se sorprendieron de cómo jugabamos.

Cuando terminó el partido, los chicos vinieron a felicitarnos y el entrenador nos dejó jugar con ellos.

Nos dijo que necesitabamos mucho entrenamiento y que vinieramos los martes y jueves.

Estaba hablando con Clara cuando se acercan dos chicos.

Uno era el que nos había dicho dónde estaba el entrenador y el otro no se quien era.

-Hola, soy Tyler, pero vosotras me podeis llamar Ty-

-Yo soy Clara-

-Y yo soy Patricia-

-Me resultas familiar, ¿te conozco?- dijo el chico.

-Tío, pero di tu nombre- dijo Ty.

- Ahh, soy Rubén-

-Espera, ya se de que te conozco. Tu estabas en el aeropuerto. El chico que me acompañó a aquella tienda- dije.

- Joder, ya se quien eres- dijo Rubén.

Desde ese momento nos juntamos con ellos y nos fuimos a comer todos juntos.

El grupo de mi hermana nos miraba.

-¿Por qué nos miran tanto esos?- dijo Rubén.

-Porque, Ruben ....- me interrumpió él.

-Por favor, llamame Ru-

-Vale pues Ru, esa chica es mi hermana como habrás podido comprobar- dije.

-¿Sois gemelas?- dijo Ty.

- No es evidente- dijo Clara.

Y entre risas y más risas pasó la comida.

Pero había una cosa que no acababa de entender.

¿Por qué me miraba así Angel?