Fiesta de cumpleaños

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¡Perth! debemos...debe... me... yo... — las embestidas de Perth hicieron que Saint no pudiera completar sus oraciones, Perth fue aumentando sus movimientos mientras se acercaba a los labios de su esposo para volverlo a besar. Saint se había despertado temprano para comenzar con los preparativos del día, ya que era la fiesta de su hijo pequeño y no quería que faltara nada. Una vez que despertó a su esposo para que se levantara y que ambos comenzaran con los preparativos a Perth se le ocurrió una mejor idea, tener un encuentro con su marido, pues había pasado varios días sin haber tenido relaciones.

Ambos llegaron al orgasmo al mismo tiempo Perth cayo cuidadosamente sobre el cuerpo de su esposo después de recuperar la respiración comenzó a darle besos en su cuello — Perth, puedes detenerte. Ya es tarde tenemos que levantarnos. — uno más. — dijo mientras seguía besando y mordiendo — ¡Perth no! ¡Tenemos que levantarnos! Recuerda que es la fiesta de tu hijo. — Esta bien, pero ya que es tarde tenemos que bañarnos juntos. — Menciono con una sonrisa pícara mientras se acercaba para besarlo otra vez, sin embargo, fue detenido.

— Tienes razón ya es tarde asi que me bañare en el cuarto de huéspedes y tú puedes bañarte aquí — dicho esto quito a su esposo de encima se puso su albornoz y salió del cuarto sin mirar atrás. Sabía que si fuera por Perth no saldrían del cuarto durante todo el día, pero eso no se podía pasar, era el cumpleaños de Cheng sin mencionar que estaban en la casa con sus hijos presentes. Ya iba a ver tiempo para eso, pues ya casi se acercaba su aniversario.

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Saint

Una vez que termine bañarme me di cuenta lo tarde que era, la fiesta empezaba a las 1pm y eran las 8am tenía poco tiempo para tener todo listo. Mi pequeño cumplía 4 años y la fiesta tenía que salir perfecta baje rápido a la cocina para preparar el desayuno, al entrar Fluke se encontraba haciendo unos hotcakes junto con Yim y Cheng — lo siento, cariño no pude levantarme a tiempo. — descuida papá, me desperté gracias a esta pequeña que se quedó conmigo.

— buenos días a todos. — Hola papá ¿Y papá Perth? — sigue bañándose, ¿de dónde vienen ustedes dos? — no pude evitar preguntar al ver como Boun y Phuwin venían del patio — vimos que se quedaron dormidos por lo que salimos acomodar las mesas para la fiesta — Gracias chicos el despertador no sonó y hemos trabajado mucho estos días. Necesitábamos ese descanso — la voz de Perth se escuchó una vez que entro a la cocina — ¿o no cariño? — se acercó para darme un pequeño beso en la mejilla

No podía creer que seguía usando las mismas mentiras que usaba de joven, palabras que siempre le decía a su papá para que no supiera porque a veces no bajábamos a tiempo para desayunar. Solo me miro para darme su sonrisa triunfal para luego darle un abrazo a Cheng — ¡Feliz cumpleaños! Ya eres un niño grande. Mira tu regalo — Osito — el osito regresa a ti, lo compartirás con tu hermana — ¡Si! — comenzó a abrazarlo y hacerle cosquillas. Las risas de la cocina no se hicieron esperar por los dos. Amaba tanto a mi familia ellos eran mi vida. — ¡Papi Saint! ¡Papi Saint! — salí de mis pensamientos cuando Cheng comenzó a gritarme para que lo salvará del tigre — ¡Perth deja a mi pequeño en paz! — el dragón quiere atacar al tigre. Adelante ataca.

Después de decir eso dejo a Cheng y comenzó a hacerme cosquillas, sabía cuáles eran mis puntos débiles por lo que me rendí pronto— ¡Basta! ¡Basta! Tu ganas esta vez — Siempre gano cariño. — dicho esto me dio un beso en la nariz — Vamos es hora de desayunar, ya es tarde. — a penas se dan cuenta. — a veces siento que no existimos entre ustedes. Se olvidan de sus hijos y de la pequeña pulga y eso que hoy es su cumpleaños — nos dijo Boun fingiendo una mirada de tristeza. — siempre pensamos en ustedes pulga mayor — le conteste.

Tome los platos restantes para llevarlos a la mesa — No se tarden en desayunar, que todavía falta mucho por hacer. — No puedo creer que ya tenga cuatro años de que papá Saint nos pidió ir a buscar al señor que vende helado, recuerdo cómo iba persiguiéndolo por toda la calle para que se detuviera — menciono Phuwin tras recordar parte de mi embarazo. — eso no es nada cuando nació Yim, papá Perth estaba en la empresa, tenía como 12 años no sabía que hacer hasta que Fluke llamo al tío Plan.

Familia TanaSupDonde viven las historias. Descúbrelo ahora