Capítulo 18 El discípulo de este maestro era demasiado tonto

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Chu Wanning perdió el conocimiento en el momento en que Mo Ran le sacó la espada del pecho. Tirando de Chu Wanning en sus brazos, Mo Ran lo protegió de la caída y aterrizó con fuerza contra el suelo. "¡¡¡Ugh!!!"

Mo Ran gimió de dolor. Se incorporó con mucho esfuerzo, sosteniendo a Chu Wanning en sus brazos. El miedo se introdujo en el corazón de Mo Ran, convirtiendo su corazón en un bloque de hielo. La cara de Chu Wanning estaba blanca como una hoja de papel, y sus labios estaban azulados.

"¿Wanning?" Mo Ran llamó inconscientemente.

Golpeó la mejilla de Chu Wanning con nerviosismo.

"¿Wanning?"

Chu Wanning permaneció inmóvil. Su parte delantera estaba casi completamente teñida de rojo. Mo Ran levantó una mano temblorosa para tocar la cara de Chu Wanning. Suspiró aliviado cuando sintió un cálido aliento contra sus dedos.

Ver a Chu Wanning en un estado sangriento nunca fue una buena experiencia para Mo Ran. En esta vida, desgraciadamente, Chu Wanning había aparecido ensangrentado delante de él más de una vez, y era extremadamente angustioso para Mo Ran. No es que se preocupara por su Shizun. Mo Ran se decía a sí mismo que simplemente no quería ver a Chu Wanning morir ante él en ese estado. Todo surgía de su corazón bondadoso, por así decirlo. Después de todo, en esta vida, Chu Wanning aún no había cometido el atroz acto de dejar morir a Shi Mei. Sin embargo, cuando llegara ese momento, Mo Ran se aseguraría de ser el que salvara a Shi Mei. Que le den a Chu Wanning.

A su alrededor, Shi Mei y Xue Meng empezaron a agitarse.

Mo Ran dejó a Chu Wanning en el suelo y rápidamente comprobó el estado de Shi Mei.

"¡Shi Mei! Shi Mei, ¿estás bien?"

Shi Mei dejó escapar un suave gemido.

"A-Ran..."

"¿Qué pasa? ¿Estás herido?"

A cierta distancia, Xue Meng abrió los ojos asustado.

"¡¡¡¡¡¡AAAAHHHHHH PERVERTIDOOO NO TE ATREVAS A TOCARME!!!!!"

"..."

"..."

Shi Mei y Mo Ran se quedaron mirando a Xue Meng. Este último se aclaró la garganta y empezó a mirar a su alrededor.

"Oh. Ustedes dos están despiertos. Por cierto, ¿dónde está Shizun? ¡¡¡¡¡SHIZUN!!!!"

Xue Meng se puso en pie de un salto y corrió hacia Chu Wanning, que seguía acostado en el suelo sin moverse.

"¿Por qué Shizun sigue durmiendo? ¿No estaba herido?"

Mo Ran y Shi Mei también se acercaron. Mo Ran se sorprendió realmente al ver que todas las heridas de Chu Wanning se habían curado, sin dejar ni siquiera un rastro de sangre en su ropa. ¿No era todo más que una ilusión?

"¿Por qué no se despierta Shizun?"

Xue Meng miró a Mo Ran cuando hizo la pregunta. Mo Ran se encogió de hombros.

"¿Por qué me lo preguntas a mí? Pregúntale a Gouchen el Exaltado".

La ira brilló en los ojos de Xue Meng.

"¡¡¡Mo Ran, tú!!! Shizun se sacrificó por ti y salió herido en tu lugar. ¿Cómo puedes permanecer indiferente? ¡Sinvergüenza!"

La presión sanguínea de Mo Ran se disparó tras escuchar las palabras de Xue Meng.

"¡Shizun se sacrificó por mí, pero fui yo quien se despertó para salvarle! ¿Y tú, Xue Meng? Estás durmiendo tan profundamente, ¿pensaste tú mismo en Shizun? ¿Cómo te atreves a sermonearme?"

Una Segunda OportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora