VIII

399 32 3
                                    

_.-._.*._.-._✨⭐✨_.-._.*._.-._

.

.

.



Kageyama estaba bastante irritado, aquel hombre era de verdad un dolor de cabeza. Solo lo soportaba por los beneficios y porque fue un amigo de su abuelo, pero si fuera por él no le indicaría ni la hora. Estaba terminando de acomodar los papeles, el hombre se había marchado hacía unos minutos y el ambiente aún se sentía algo incómodo.

El azabache, durante la junta, no pudo evitar notar que el señor miraba tan intenso a Hinata, casi comiéndoselo y esto le ponía tenso porque no solo era una mirada casual o curiosa, era una que se sentía más penetrante y abrumante, poniendo pesado el ambiente que les rodeaba.

Suspiró por decima vez en solo 5 minutos. Se levantó para despertar a Hinata, le movió un poco de forma lenta esperando que se despertara solo con el sutil movimiento, tampoco quería despertarlo de un susto.

-Hinata... -Susurró. El chico solo se removió incómodo pero no despertó. Kageyama lo miró un poco, notando el sonrojo en sus mejillas y su irregular respiración, algo inseguro acercó su mano a su frente -Mierda, Hinata -Volvió a llamar moviéndolo un poco más fuerte.

-Kageyama... -Gruñó bajo mientras se removía incómodo y despertaba poco a poco. Sentía los parpados pesados y un sonido agudo en sus oídos.

-Tu energía esta baja de nuevo, ¿Por qué? -Kageyama le miraba preocupado, era imposible que si energía se mantuviera así pues después de aquella primera vez su contacto íntimo estaba en aumento, no había forma de que bajara tan de repente.

-No se... -Suspiró pesadamente -Tengo que irme así tienes tú junta -Se apresuró a levantarse pero debido a la velocidad en la que lo hizo se mareo y casi se cae. Kageyama le sostuvo de la cintura y lo obligó a sentarse de nuevo.

-La junta ya pasó, te dejé dormir -Respondió mientras mantenía el contacto físico para que por lo menos se recompusiera un poco, lo suficiente para que no se viera así de mal.

-¿Me dejaste aquí adentro mientras tenías la junta? -Se apresuró a preguntar. Kageyama asintió mirándole directo a los ojos y Hinata suspiró -Debemos volver rápido a casa...

-Espera, te atenderé aquí para que puedas recuperarte -Con cuidado comenzó a levantar la camisa de Hinata pero este le detuvo -¿Eh?

-No va a ser suficiente... -El sonrojo se notaba fuerte en sus mejillas y apartaba la mirada de los azules profundos -Perdón... -Se disculpó apenado por la situación, agachó la cabeza tratando de ocultar su bochorno.

-¿Te refieres a que...? -No terminó la pregunta pero Hinata asintió avergonzado -B-Bien, entonces volvamos a casa -Con cuidado cargó a Hinata entre sus brazos, se veía tan débil que dudaba en que pudiera mantenerse de pie.

-E-Espera, aun puedo caminar por mi cuenta -Intentó apartarse pero Kageyam puso más fuerza evitando que se fuera.

-No, te llevaré así hasta el carro.

Hinata suspiró derrotado mientras se acomodaba mejor entre los brazos del más alto. Kageyama sonrió victorioso, se despidieron e informó de la situación y tras varias palabras de animo y mejora con cuidado llegó hasta su carro. Posicionó a Hinata en el asiento copiloto y lo revisó un poco.


_.-._.*._.-._✨⭐✨_.-._.*._.-._


Incubo -Kagehina-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora