XIII

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La mañana siguiente takemichi fue el primero en despertar, tenía hambre y estaba emocionado por decorar la casa, se encaminó hacia el cuarto de taiju y al abrir la puerta lo encontró dormido abrazando aquel peluche que le regalo, no recordaba haberlo visto nunca con el peluche, se agacho a la altura de la cara de taiju y empezó a picar su mejilla para que se despertará, pero no reaccionaba, así que empezó a darle pequeñas cachetadas obteniendo una reacción de taiju.

-maldita sea, deja de joder - habló taiju aún dormido sin notar al pequeño el cual se veía muy sorprendido, ahogó una risa y volvió a darle golpes un poco más fuertes - con un carajo, déjame dormir maldita basura.

-taiju-San, ¿me quieres? - le pregunta takemichi aprovechándose de él estado medio inconsciente de él peliazul.

-umm... Quiero mucho a take-chan - susurra mientras se da la vuelta en la cama, takemichi aprovecho y se subió a la cama sentándose en el pecho de taiju.

-¡despierta taiju-San, takemichi tiene hambre! - le grita mientras le da pequeños golpes en las mejillas, el peliazul, despertó y se le quedó viendo para después sonreír y abrazar al pequeño niño como si fuera un peluche.

-desde que llegaste siempre has tenido mucha energía en las mañanas - le dice con una voz ronca debido a que acaba de despertar.

-tengo hambre, ayer koko-kun solo me dio un par de sándwiches, porque se le olvido que yo tenia que comer - taiju soltó un poco al niño y lo miró con una mirada algo seria y el ceño fruncido, se veía enojado.

-ese idiota - taiju se levantó de la cama con el niño en brazos y camino hacia la habitación donde estaba durmiendo inui y koko, al llegar abrió la puerta de una patada - ¡como carajos es eso de que se te olvidó alimentar a take-chan!.

Grito despertando a los dos chicos los cuales estaban durmiendo muy abrazaditos, koko se quedó viendo a su jefe en silencio mientras Inupi miraba a koko con total Enojo.

-¿realmente se te olvidó darle de comer a takemichi? - le preguntó Inupi, mientras se levanta de la cama y se para al lado de su jefe, koko se puso nervioso al ver esas dos miradas totalmente enojadas, mientras el niño en los brazos de taiju empezaba a reír y a jugar con el cabello azul.

-f-fue un error mío, yo creí que el ya había comido - dice koko sudando un poco buscando un poco de ayuda en takemichi, después de todo el era el único que podía calmar el enojo de todos.

-taiju-San tengo hambre - dice takemichi mientras hace un puchero.

-ya, ya, tranquilo takemichi vamos a buscarte algo para comer - taiju sale de la habitación y al llegar a la sala vio todas esas cajas tal ves se habían pasado un poco, vio el árbol navideño, el cual tocaba el techo si querían ponerle una estrella debían cortarle un pedazo, paso todas esas cajas y llego a la cocina sentó a takemichi y empezó a preparar el desayuno con la ayuda de Inupi.

Koko llegó un par de minutos después con una mirada algo culpable, el cual se sentó al lado de takemichi y le ofreció una disculpa.

-¿me dejas peinarte koko-kun? - le pregunto con una mirada inocente y una linda sonrisa.

-si eso quieres, está bien - koko recostó su cabeza en las piernas del niño y dejó su pelo a su merced.

Después de un rato todos estaban desayunando mientras inui y taiju se reían de él peinado ridículo de koko mientras takemichi comía con una gran sonrisa.

-lindo peinado señorita koko - dice taiju provocando la risa en Inupi.

-te ves ridículo koko - dice Inupi mientras sigue comiendo.

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