Tenjiku

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Advertencia: Contiene smut (+18)

| Slumber Party |

Terminaste de acomodar todas las cosas necesarias en tu mochila, diste la última revisada para finalmente cerrarla. En tu celular sonó un mensaje.

Amor <3
"¿Qué haces?"


"Estoy terminando de arreglar mis cosas para ir a casa de Koko, ya te había dicho que hoy tenia pijamada con los chicos."

Amor <3
"Okay, cuídate. Te amo."


"Igual, te hablo cuando llegue."

Pasaste tu mochila por tus brazos y saliste de casa. Caminaste hasta la casa del antes mencionado, ibas a paso lento contemplando la ciudad y más porque ellos eran muy impacientes, te gustaba torturarlos un poco.

Después de un rato te paraste en la casa del pelinegro tocando la puerta eufóricamente, abrió la puerta y los 7 estaban ahí parados.

—Ya no entras por llegar tarde. —cerraron la entrada de un azote haciendo que te quejaras de su inhospitalidad.

—Hijos de puta, déjenme pasar. —pateaste la puerta con fuerza, después sobaste tu pie un poco lastimado por el impacto.

Estos abrieron de nuevo carcajeándose por tu mueca de dolor. —Me debes la pintura de la puerta. —mencionó el anfitrión serio.

—Tienes dinero para comprarte todo Japón, deja de estar chingando. —pasaste entre ellos empujando sus brazos.

Te arrebataron la mochila que traías colgando, ahogaste un quejido, volteaste enojada viendo cómo ellos esculcaban el contenido.

Las botellas chocaron entre sí cuando Sanzu las sacó sin cuidado, Izana sacó toda la ropa que traías, los hermanos Haitani te vieron juguetonamente al Rindo agarrar tu fina braga con sus largos dedos y Ran una tira del sostén que habías empacado.

—Dejen de estar de chismosos. —te coloraste al ver la acción de los hermanos.

—Aquí está al fin, pensé que no la ibas a traer. —Izana tenia la pijama combinada que en algún momento habían comprado.

—¿Y entonces porque traes esta? —Hanma tenía un tirante de tu playera mientras exhalaba el humo por sus labios.

—Ya dejen mis cosas. —intentaste arrebatarles toda la ropa que tenían entre sus manos con poco éxito.

—Si me das un beso te la doy. —dabas pequeños saltos chocándote contra Rindo para alcanzar la parte inferior de tu ropa interior.

—Por si no lo recuerdas tengo novio, mechudo. —mordiste tu labio inferior viendo tu prenda entre sus dedos con el brazo completamente estirado hacia arriba.

—Ven, yo si te doy tu ropa. —el del mechón rubio te extendió la camisa de tirantes, volteaste deteniendo tus acciones, diste unos pasos para arrebatársela cuando esté la alzo de golpe causando que dieras pasos de más. —De todo lo que nos perdemos, chicos. —azoto tu trasero con su palma dejando un ardor en esa zona.

—Ya devuélvanme mis cosas. —frunciste el ceño hablando severamente.

Un cuerpo se pegó en tu espalda, el mentón del hermano Haitani mayor se recargó en tu hombro. —Encajan perfectamente. —te congelaste al sentir como sus dos manos apretaban tus pechos con precisión sintiéndose tan bien.

Tragaste saliva con dificultad, tus mejillas estaban más rosadas de lo normal.

—Empecemos a tomar. —Koko abrió una de las botellas dándole un largo trago. Agarraste la pijama que hacía juego con la del peliblanco mientras todos tiraban tu ropa para turnarse a beber.

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⏰ Última actualización: Apr 30, 2022 ⏰

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