Capítulo 50

2.9K 294 7
                                    

Lunes por la mañana y eso solo significaba una cosa, volver a la maldita escuela o como los mellizos solían llamar el Tártaro mortal, su mañana fue completamente diferente al de otras en las que solían despertar 30 minutos antes de la hora de entrada en caso de que pudieran dormir algo, se daban un baño rápido, tomaban una manzana roja y subían a su auto.

Esta sin embargo empezó con el grito de Angela despertándolos una hora antes haciéndolos maldecir y que unas tremendas ganas de mandarla al Tártaro creciera en ellos ya que tenia  menos de una hora que habían podido caer dormidos, el primero en levantarse fue Nico para tomar su habitual ducha mientras que una muy malhumorada Adhara bajaba a averiguar porque tanto ruido en el primer piso.

Lo único que pudo hacer fue abrir la boca perpleja al ver a la castaña preparando un muy elaborado desayuno como forma de agradecimiento a los Di Angelo por todo lo que habían y estaban haciendo por ella.

--Di algo lindo- le susurro Elena al pie de la escalera

--No tenías que hacerlo- dijo Adhara con una muy forzada sonrisa

--Ya lo sé pero quería hacerlo, ustedes... simplemente son los mejores- dijo Angela antes de correr a abrazar a la pelinegra, aun se le hacía muy... raro abrazar a otras personas así que solo pudo darle torpes palmadas y sonreír de labios cerrados causando la carcajada de la fantasma

--¿Qué...?- empezó a decir Nico bajando ya cambiado, como siempre su ropa era negra y su chaqueta de aviador no podía faltarle- wow- exclamo al ver la mesa puesta e inhalando el olor, olía bien debía admitir

--¿Te gusta?- pregunto ilusionada Angela

--Iré a bañarme- aprovecho Adhara para separarse de los brazos de la castaña y subir corriendo las escaleras dejando que su hermano siguiera lidiando con la situación

Todo era tan... diferente aunque debía admitir que a una pequeña parte dentro de ella le gustaba al igual que a Nico quien se sentía... radiante, ¿Al fin habían encontrado su hogar? Se preguntaban los mellizos.

Luego de que obligaron a sus estómagos a recibir la, para ellos, gran cantidad de comida que Angela les dio, quien considero fue muy poca y había insistido en servirles más recibiendo un rotundo NO de los mellizos, los tres semidioses y Elena se subieron al hermoso auto de los mellizos para ir hacia la escuela.

Hubo otro cambio allí, los dos acostumbraban a fumar un cigarrillo para soportar las horas de tortura escolar sin embargo la castaña inmediatamente se los quito argumentando demasiado bien por qué los cigarrillos eran tan peligrosos para la salud haciendo que los dos soltaran aire cansados y se abstuvieran de hacerlo, al menos en su presencia.

--Esto será más difícil de lo que pensé- dijo Adhara una vez Angela salió corriendo del auto para saludar a sus amigos mortales quienes inmediatamente, Jessica sobre todo, interrogaron sobre su llegada en el lujoso auto de los Di Angelo

--Ni me lo digas- dijo Nico restregando su rostro

--Yo creo que será divertido- dijo Elena ganándose una mala mirada de ambos pelinegros

--No puedo entrar ahí sin un poco de esto- dijo Adhara volviendo a sacar un cigarrillo y acomodándose de espaldas para que Angela no la viera, Nico prendió su encendedor haciendo que su hermana se acercara a él para poder encender su cigarrillo

--Dame- dijo el pelinegro, Adhara le entrego el cigarro a la vez que soltaba el humo de sus pulmones- mucho mejor- dijo Nico sacando también el humo de sus pulmones

--¿Por qué les gusta?- pregunto Elena viéndolos con el ceño fruncido

--No es tanto que nos guste si no que... nos acostumbramos a la sensación- dijo Adhara encogiéndose de hombros, el sonido de la ventanilla de su lado siendo impactada por unos dedos hizo que moviera sus manos en un intento de desaparecer el humo del cigarro pensando que era Angela, rodo los ojos cuando vio quien era- ay creí que eras Angela- dijo bajando su ventanilla

Sombras de Amor: Adhara y Nico Di Angelo (Edward C, Jasper H y Alice C)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora