Si estuvieras en Super Junior...

Historia #3 pt. 1

Llevamos tres años saliendo y todo era hermoso, tus actividades habían estado subiendo y solo tus padres estaban más orgullosos que yo. Más que nada por tus actividades como embajador de la UNICEF, estabas siempre en muchas cosas.

Mi agenda estaba igual de apretada pero sabemos entendernos el uno al otro, hablamos cuando podemos y las citas por lo general son en casa, por la privacidad y por el tiempo, es más facil una comida elegante y un postre echos antes para no esperar, nadie te interrumpe y lo mejor, hablamos por horas de nuestras vidas sin temor a que haya alguien con la oreja parada en la mesa a tu lado.

Todo era hermoso pero, qué pasó??

Un día habíamos logrado quedar por primera vez en meses pero lo olvidaste, dijiste que te habías quedado dormido luego de llegar a casa pero el propio manager me dijo que habías llegado dos días antes.

Despues, en una reunión para planeación de comeback ni siquiera me viste a la cara, solo mirabas de reojo y saliste de ahí corriendo cuando todos aceptamos comer en un restaurante antes de irnos. A los demás les pareció una manera perfecta de hacer que tu pagaras pero yo solo miré la puerta por la que saliste, con mil cosas pasandome por la cabeza. ¿Es que acaso estaba exagerando? ¿o era real el hecho de que ya no parecías quererme en tu vida?

Decidí hablar pero nunca tuviste el tiempo de hablar conmigo, solo un regalo, un "te amo" que congelaba mi corazón, un beso casi inexistente y corrías lejos de mi.

Y es que lo entiendo, ¿vale? tienes un trabajo enorme y demandante pero yo tambien lo tengo. No te pedí nunca tu atención al cien, solo pedí un abrazo cuando se burlaron de mí por la ropa que usé en una premiación, solo te pedí una llamada para escuchar tu voz diciendo que todo estaría bien cuando los reporteros me tacharon de grosera y mil cosas peores, cuando hicieron preguntas que no quise responder y todo el mundo les dió la razón sobre lo "serpiente" que era. Tal vez un poco de interés al menos.
Pedí que recordaras nuestro aniversario número cuatro y la cita que habiamos hecho con más de medio año de anticipación (que chistoso fue cuando lo planeamos ¿no? en ese momento estuvimos tan seguros de nosotros que lo hicimos todo con tal de tener dos días libres en esa fecha)
Pero nunca llegaste. Esperé una hora, dos, tres, para cuando desperté ya era de día y no había señales de ti. Le llamé a nuestros managers para ver si alguien sabía algo de ti, asustada por la posibilidad de que algo te hubiera pasado pero fue horrible el golpe cuando supe que nisiquiera estabas en el país.
"Tuvo dos días libres y quiso pasarlos turisteando, dijo que quizá te encontraba un regalo para cuando se vieran pero la verdad no compró nada"
Colgé, no sabía si triste, enojada o nada. Llamé a Yesung Hyung que llegó una hora despues con Donghae, ellos pasaron horas intentando calmarme, dando razones por las que quizá olvidaste este día y por las cuales me dejaste así, con una cena enfriandose, un vestido hermoso y un corazón ilusionado pero ninguna era suficiente para hacer que lo que habías roto se uniera de nuevo.

Pasaron dos meses antes de vernos de nuevo, en un trabajo.
No hubo nada en ese tiempo, esperé una llamada, un mensaje disculpandote sin embargo nunca llegó y yo, que había pasado alrededor de un año intentandolo, decidí rendirme.

No sirvió que llegaras con un abrazo fuerte, un beso y un regalo brillante, ya habías perdido mi corazón con tu actitud.

"Feliz cumpleaños"
"Qué?! Mi cumpleaños más reciente pasó hace cinco meses y el que sigue es en siete meses"
"Entonces ¿cuál fue el drama que tienes para incluso llamar a mi manager?"
"No llegaste y me susté creyendo que algo te había pasado, gran imbecil"
"¿Llegar a dónde? Literalmente no he tenido ni un día libre estos días y todo lo que haz hecho es molestar con tu cara de enojada, siempre que te veo estás molesta o triste, no tienes ni una pisca de comprensión por lo atareado que estoy"
Solo aguanté pero creo que incluso los miembros del staff notaron como se rompía todo dentro de mi
"¿Y los dos días que tuviste libres? Esos en los que decidiste turistear. ¿Ni siquiera recuerdas el porque los tuviste libres en medio de un trabajo?"
"No ¿debería?"
"No, para nada, desde hoy no hay nada que recordar. Realmente quise arreglar lo que sea que te pasara, las dudas, el estrés, estaba dispuesta a aguantar si tan solo demostrabas un poco de arrepentimiento o ganas de enmendarlo pero ya he visto que no. Sigamos con el tan apreciado trabajo."