Capítulo 16: Cacería en Qinghe Nie

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Qiren y Ziyuan se encontraban más adelante que la comitiva de Meishan Yu y que el mismo Fengmian. Ziyuan decidió que era buen momento para burlarse un poquitín de su mejor amigo.

- Así que...

- ¿Qué ocurre? -pregunta Qiren con sospecha al escuchar el tono burlón en su amiga.

- Eso debería preguntarlo yo, mi querido amigo Qiren.

- No entiendo.

- Quizá una dama de Yumping te refresque la memoria.

Qiren se queda en silencio con un rostro carente de emociones, pero sus orejas rojas delatan todo.

- La dama de Yumping al parecer tiene un pretendiente de Gusu, el cual le manda cartas a menudo del progreso de su inteligente hijo, dime amigo, ¿no te suena? -pregunta con voz burlona, deleitándose al ver las manos de Qiren temblar.

- Le he mandado cartas a lady Meng para que no se preocupe por su hijo, es todo.

- ¿Seguro? Porque he de decirte que descubrí algo muy interesante de lady Meng... -comenta, alejándose un poco y pasando su vista al frente, deleitándose cuando ve de reojo a su amigo acercarse a ella.

- ¿Qué descubriste? -pregunta rápidamente Qiren-. Pregunto esto porque podría perjudicarle en algo y no quisiera que estuviese mal.

- Bueno, si quieres saber es mejor que se lo preguntes personalmente, solo te diré que avances con ella.

Qiren abre su boca para protestar, pero la cierra porque no tiene nada que decir.

Han llegado al lado femenino de Gusu, pero comienzan a extrañarse cuando escuchan gritos... gritos femeninos y masculinos.

- ¡VAMOS, GANALE!

- ¡NI SE TE OCURRA PERDER, DEBES DEJAR BIEN A LAS MUJERES DE GUSU!

- ¡VAMOS LAN YIN, NO PUEDES PERDER!

- ¡ZHAN-GE NO PUEDE PERDER TAMPOCO!

- ¡LAN ZHAN DEBES DE GANAR!

- ¡A-ZHAN SI GANAS TE PRESTO A XUE YANG TODO UN DÍA!

Toda la comitiva de Meishan se extraña ante los gritos, por lo que se apresuran a entrar y ven algo... totalmente extraño. Una discípula de Gusu está compitiendo contra Lan Wangji en un reto de fuerza.

- Apuesto por el segundo joven maestro Lan.

- Yo por la discípula, dicen que ellas tienen mucha fuerza.

Estos y más susurros comienzan de parte de la comitiva de Meishan Yu, quienes intentan susurrar pero fallan deplorablemente.

- Qiren, apuesto diez monedas de plata por la discípula.

- Está prohibido hacer apuestas -contesta, frunciendo el ceño mientras reza porque su sobrino gane.

Aunque eso no detiene a Qiren de hacer sonar su monedero, aceptando la apuesta.

Todos detienen sus gritos cuando Wangji tiene la mano de la discípula rozando la mesa, pero de un momento a otro, la discípula reacomoda su mano y avanza poco a poco hasta que, de un pestañeo, la mano de Wangji está en la mesa.

- ¡GANE! -salta la discípula en su lugar-. Escribir las reglas parada de manos si que funciona.

- ¡GANO, PAGUEN SUS APUESTAS!

- ¡NO! ¡MI DINERO! -se quejan en un grito los amigos-. Bueno, una apuesta es una apuesta.

Todos comienzan a pagarle a las discípulas y así mismo Qiren le da las monedas a Ziyuan, muy a regañadientes.

El loto en Meishan Yu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora