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El día fue normal. Hasta el momento nadie los había molestado y aquello era bueno, o eso pensó el pelirrojo, hasta que llegaron a la cafetería durante la hora del almuerzo. Llevaba la mochila en su espalda y hablaba con Kibum, intentando distraerlo por si se encontraban con Jonghyun. Taemin no había parado de sonreír en todo el día.

— Nosotros buscamos la comida y ustedes dos cuiden la mesa. — les dijo Jinki guiñandole un ojo a Kibum, se fue con Krystal, dejándolos a ellos dos solos.

— Bueno ¿Sabías que según Krystal, Amber besa con lengua? — preguntó mientras se sentaban en una de las mesas, Kibum lo miró alzando una ceja.

— Ya sé lo que intentas hacer, Tae. — dijo acomodando sus brazos sobre la mesa, Taemin abrió los ojos.

— ¿Ah sí? Porque hablo en serio, es la palabra de la pelirroja contra la nuestra.

— Descuida... yo aún no lo he visto y cuando lo haga... igual lo voy a ignorar. — dijo bajando el rostro y Taemin lo hizo alzarlo, sujetándolo por la barbilla.

— Ambos sabemos que esa es una gran mentira. — dijo viendo como su amigo rodaba los ojos.

— Él es un idiota.

— Sí, es un idiota. — repitió Kibum, sonriendo.

Durante estos meses Kibum le había hablado sobre Jonghyun y habían tomado como terapia decir que era idiota, cada vez que se sintiera mal. 

Hablaron durante un buen rato, hasta que Taemin sintió la voz de Tiffany en su oreja.

— Hola, rarito. — saludó, rodeándole el cuello fuertemente con el brazo, Taemin tosió varias veces. — ¿No te gustaría comer con nosotros?

— No... suéltame. — dijo apretándole el brazo, pero Tiffany no lo soltaba.

— ¡Déjalo idiota! — Kibum le dijo levantándose y queriendo darle una cachetada.

— Vamos, Lee. Todos te esperan. — agregó la chica, levantándose y arrastrando a Taemin con ella, el pelirrojo parecía necesitar respirar con urgencia mientras lo llevaban a la mesa.

— ¡Oye! — le gritó Kibum y los siguió.

— Aquí estamos. — dijo Tiffany sentando a Taemin en la silla, junto a Yoona, aún rodeando el cuello del chico.

— ¡Taemin, qué sorpresa! — dijo Yoona riendo, al ver el rostro púrpura del pelirrojo.

Taemin apenas podía respirar e intentaba soltarse del brazo de Tiffany. Aunque no lo pareciera, la castaña tenía mucha fuerza.

Observó que justo frente a él estaba sentado Minho, que lo observaba con los ojos abiertos y una notable preocupación en ellos.

— Tiffany, déjalo en paz. — dijo mirando con enojo a su novia, ella se rió cínicamente.

— Amor ¿No te das cuenta de qué el rarito es un invitado mío? No le estoy haciendo nada.

Taemin no opinaba lo mismo y cerró los ojos por un momento, ya que se sentía tremendamente mareado.

— ¡Suéltalo, lo estás ahogando! — gritó Minho y Tiffany lo soltó con fastidio, Taemin comenzó a toser.

— ¡Cof, cof, cof! — se sujetaba la garganta mientras observaba de reojo a Minho.

El gran azabache parecía querer acercarse para frotarle la espalda, pero todos estaban mirándolo.

Minho tuvo que resistir la urgencia de tocarlo y apretar las manos sobre su regazo, sin dejar de mirar los ojos miel.

— Kibum... — murmuró Taemin por debajo, pero no veía a su amigo. Logró encontrarlo, al verlo salir por la puerta de la cafetería, seguido de Jonghyun.

Taemin se preocupó e intentó irse, pero Yoona le capturó la mano y lo obligó a sentarse.

— ¿A dónde vas, bonito? — le dijo sosteniendo sus manos entre las suyas mientras el pelirrojo seguía tosiendo.

Minho clavó sus ojos asesinos en Yoona y esta de inmediato soltó la mano de Taemin, sentía un frío recorrerle el cuerpo y podía jurar que eran por los fulminantes ojos chocolates de Minho.

— ¿Ibas con tu novio? — preguntó Tiffany, riéndose al ver la pobre cara de Taemin.

Esté comenzó a negar mirando a Minho a los ojos, quería asegurarle que no tenía novio y al hacerlo, Minho sonrió de forma alegre.

Tiffany se dio cuenta de eso y lo llamó:

— Amor ¿Sabes que te amo? — le dijo poniendo su cabeza en el pecho del azabache. Taemin hizo una mueca, quería irse.

Minho no la miró ni una sola vez y asintió sonriendo.

— Yo también te amo. — dijo mirando fijamente a Taemin a los ojos, el pelirrojo sintió la piel cosquillearle  y el corazón en la garganta ¿Se lo estaba diciendo a él?

Minho, después de haberlo dicho, abrió los ojos y se sonrojó como un loco, agachó el rostro y comenzó a balbucear.

— Yo... supongo... bueno... también... bueno... claro. — terminó con la cara roja, su novia frunció el ceño, mirando como los dos chicos se observaban.

— Bueno, rarito. Me contaron por allí, que estás enamorado. — comentó Tiffany burlona y logrando que todos en la mesa comenzaran a abuchear.

MInho no lo dejó de ver ni un segundo.

— Yo... bueno, no te importa. — dijo con el rostro sonrojado e intentó irse de nuevo, Tiffany lo tumbó por los hombros y lo hizo sentarse.

— ¿Quién es? ¿Kibum? —  preguntó burlona, observando a su novio con atención.

Taemin lo pudo ver, en los ojos chocolates había dolor.

— No y aún si fuera así tampoco te lo diría. — gruñó para luego volver a ver a Minho, el azabache le devolvía la mirada y no escuchaba a nadie más. 

Tiffany ya estaba sintiéndose amenazada por la estúpida cara que hacía su novio al ver a Taemin, no le gustaba la manera en la que se miraban y su orgullo femenino estaba siendo dañado.

— ¿No tienes amigos? Podrías largarte de una vez. — le dijo irritada mientras iba al lado de su novio y se sentaba junto a él, apoyando su cabeza en el hombro del chico más alto. 

— Pero, tú... — comenzó confundido por su actitud y sus ojos miel se volvieron fríos, al ver la cabeza de la chica sobre Minho.

Tiffany sonrió triunfante pero no duró mucho, cuando Minho se revolvió incómodo y se alejó un poco de la castaña. Ella lo miró sorprendido y fue a dirigirle la palabra al causante de todo esto, de una manera muy fea. 

(Taemin: 1 - Tiffany: 0)

— Quita tu asquerosa cara de mi vista, antes de que te la rompa en dos. — amenazó y Taemin explayó los ojos, intentando por todos los medios levantarse.

— ¡Tiffany! — la reprendió Minho, mirándola con reproche y después volteó a ver a Taemin, que ya se había ido, y soltó un suspiro.

Taemin salió corriendo de allí, para volver a su mesa ¿Qué le ocurría a esa idiota?

Que bipolar, fue mucho para el gusto de Taemin, seguía un poco alegre por haber visto a Minho. Lo mejor de todo era que esta vez no le había insultado.

Tal vez, este lograra ser un gran año.

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Disfruten del capítulo <3

Rivales.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora