El lunes siguiente, no se mencionó ninguno de los acontecimientos del viernes. De hecho, no creo que volviera a hablarse del tema. Ese fin de semana había tomado la decisión de esperar a ver a Daniela en persona antes de pensar en el siguiente paso. No conseguía decidirme, aunque me inclinaba más hacia la opción de «ser solo amigos», porque todo era demasiado complicado e inestable, y no sabía si podía gestionarlo.
Era el último año de instituto. Entre las clases, el periódico, tener que decidir en qué universidades solicitar plaza (pista: en cualquiera que me aceptara) y mantener algo parecido a una vida social, mi existencia ya era lo suficientemente ajetreada y tumultuosa.
Además, por supuesto, había buscado el accidente en Google. No había sido fácil encontrar el artículo, porque el nombre de Daniela no se usó en ningún momento, y tampoco sabía el nombre completo de su novio. Cuando lo encontré, no quería leerlo. Era como sacar una mala nota en un trabajo y ver una columna de texto del profesor con todo lo que has hecho mal, pero que ya no puedes cambiar; entonces... ¿de qué sirve?
Pese a todo, le eché un vistazo; me quedé con frases sueltas e intenté leer lo menos posible, porque las palabras se me clavaban como pinchos.
Las clases en el Instituto East River se suspendieron el miércoles después de que un alumno de penúltimo año muriera y otra resultara gravemente herida...
Salté al siguiente párrafo.
La pasajera, cuyo nombre no se ha desvelado, una chica de 17 años, posible novia del conductor, permanecía en estado crítico el viernes, con graves heridas...
Salté al siguiente párrafo.
El coche se salió de la carretera, después de derrapar, y dio varias vueltas de campana antes de impactar contra un árbol...
Salté al siguiente párrafo.
Se cree que el conductor de 17 años, Samuel Sawyer, murió en el acto, mientras que la pasajera tuvo que ser atendida en...
Salté al siguiente párrafo.
El coche está destrozado —dijo el oficial—. No queda nada...
Salté al siguiente párrafo.
En el Instituto East River, los psicólogos de la escuela están preparados para prestar todo su apoyo a los alumnos y...
Salté al siguiente párrafo.
Jeffers ha declarado: «Sawyer era uno de los mejores alumnos que han pasado por mi clase. Era brillante y...» Salté al siguiente párrafo.
Se está preparando un funeral para despedir al popular alumno del Instituto East River...
Cerré la página web.
Por la tarde, cuando llegué a mi clase de teatro, prácticamente había decidido que no podíamos estar juntas. Era imposible que lo nuestro saliera bien. Daniela estaba demasiado rota. Era demasiado extraña. ¿Cómo puedes aceptar algo semejante y seguir como si nada? Necesitaba un amiga, no una novia. Yo podía ayudarla. Podía ser un buen apoyo. Sin duda, lo necesitaba. Así que ocupé mi sitio habitual en la sala de paredes negras, delante de la puerta, cerca del escenario, y esperé a que llegara. Por suerte, no era demasiado tarde para cortarlo de raíz. Seguro que con empeño se puede reprimir un sentimiento, ¿no?
Daniela llegó tarde, como siempre, y la señora Beady no dijo nada, como siempre.
Todo seguía igual. Llevaba el pelo enmarañado. Tenía la piel cetrina. Vestía ropa de chico, la de su novio muerto, Sam. Y caminaba con una cojera nada atractiva. Pero, en cuanto nuestras miradas se encontraron, su expresión se suavizó.
Y entonces supe que quería intentarlo.
Era cierto que Daniela estaba rota, de luto, y una de nosotros, o tal vez las dos, podía acabar totalmente hundida. Sin embargo, hay algunas cosas por las que vale la pena luchar, ¿no?
.
ESTÁS LEYENDO
CHEMICAL HEARTS "ADAPTACION CACHÉ"
FanfictionEsta historia está basada en la novela "Our Chemical Hearts" de Kristal Sutherland, así que espero y les guste esta adaptación Caché. Narrada por Poche.