Don't Falling Again [ LT HS]

009

sentía la luz del sol entrar por la ventana y pegar contra mi cara, me removi entre las mantas y sentí un cuerpo a mi lado, era de danielle, la hermosa omega, con ojos cafés igual que su cabello, era realmente bonita, nos habíamos conocido en la universidad pero nada interesante, compartíamos clases y esas cosas, luego nos graduamos y no nos vimos más hasta que en mi cumpleaños número 21 mi padre la invitó y bueno ya sabrán lo que pasó, mi padre me obligó a comprometerme con ella para unir las empresas y yo solo fui un pobre crió  asustado que no se negó y terminó marcandola como su padre le ordenó, yo la amaba pero como amiga, pero ya me acostumbre a estar con ella, simplemente es como una rutina estar con ella, la omega es muy bonita lo se, también la quiero pero no creo que sea la indicada, solo lo hago para complacer a mi padre.

pase la yema de mis dedos por sus facciones, la omega se removió bajo mi tacto y abrió sus enormes ojos marrones.

-hola cariño-dijo danielle, le sonreí y luego me beso, el beso comenzó a subir y ella se coloco a horcajadas sobre mi, comenzó a meter su lengua en mi boca la tomé de los brazos y la separe.

-no, basta Danielle, me tengo que ir - me pare y fui hacia el baño para bañarme y luego irme al trabajo.

Me costaba aceptarlo pero poco a poco me dejaba de atraer Danielle.
Salí del baño y danielle ya no estaba, pase por el pasillo y vi la puerta de la habitación de harry abierta y lo vi, estaba dormido abrazando su vientre se veía tan lindo, lo extrañaba bastante hace meses que no teníamos una conversación verdadera pero seguí caminando hacia la cocina, esto lo hacía por el bien de ambos, no podíamos, yo no podía y el saldría muy lastimado, yo no puedo sentir cosas por el, por eso tome la decisión de alejarme, camine hacia mi auto y luego me subí, sin desayunar, fui hasta la empresa.

-Hola jefe-dijo mi asistente, Eleanor Calder, era bonita si, pero no me atraía, la salude y seguí caminando hacia mi oficina al abrir me encontré con mi padre Mark.

-hijo-dijo un alfa adulto, tenía un traje, muchos anillos en sus manos y una omega en su regazo.

-Mark- murmuró el menor-que pasa-

-oh sí yo también te extrañe hijo- dijo el alfa siguiendo con la mirada a su hijo que caminaba hacia su asiento frente al gran escritorio.

-ve al punto Tomlinson- dijo

-Estuve hablando con tu hermosa esposa y me dijo algo muy curioso- el alfa se puso y miró a él elfa que estaba delante de el - adoptarán a un cachorro? -

- Basta padre, me quieres obligar a hacer todo lo que quieras, querías que la marcará y ya la marque, dejame en paz - dijo el alfa parándose de su lugar golpeando sus manos contra el escritorio de madera haciendo sobresaltar a la omega de su lugar.

-No me hables así, yo puedo hacer lo que quiera contigo si te digo que te cases con alguien lo haces-remato el alfa, luego corrió a la omega y volvió a cerrar la puerta de la oficiana

-por qué estas tan obsesionado en arruinar mi vida, carajo, ya la marque como querías, tiene mi puta marca en su cuello, yo la amaba pero no de esa forma padre, pero tu estas obsesionado con conseguir más y más dinero que me arruinaste la vida-dijo antes de salir de la habitación, cerrando la puerta de un portazo, camino hacia la salida algunas lágrimas se escapaban por sus ojos, se subió a su auto y comenzó a conducir lo más rápido posible las lágrimas inundaban sus ojos, estacionó su auto frente a un a gran casa rodeada de jardines, corrió hacia la entrada y busco a su madre con la vista, la vio bajo un árbol, era la omega más linda, tenía el cabello castaño y ojos celestes, camino hacia ella y se desplomó en sus brazos, comenzó a llorar en el hombro de su madre, como si fuera un cachorro.