Capítulo 10 - Amor 1/3

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Amelia Blight

Una vibración resonó por la habitación lo cual hizo que me despertara, estaba por darme la vuelta cuando sentí mi brazo atorado por alguien, se me había olvidado que me quedé a dormir con Lucia y al parecer el resfriado se había ido, ahora estaba bien engachada a mi, abrazandome de la cintura con la piernas enredadas en las mías y hecha bolita con su cabeza en mi pecho, me dio ternura verla de esa manera pero salí de mi mundo cuando volvió la vibración, usé mi flexibilidad. O bueno, la que me queda. Y logré agarrar el télefono de la esquina, al darme cuenta de quien era respondí.

- ¿Qué pasó Em? - murmuré pero al parecer no captó mi sonido de voz y hablo lo más fuerte que pudo haciendome saltar del susto y para mala suerte despertar a Lucia - ¡Emira Blight! - se quedó callada sabiendo que estaba enojada.

Emira: Lo siento...- suspiré viendo a Lucia todavía alterada y a la vez desorientada.

- Ey... - me volteó a ver parpadeando varias veces - Ven... - extendí mi brazo y ella entendió el mensaje acercándose a mi, se acurrucó nuevamente en una bolita escondiendo su cara en mi cuello y abrazándome por la cintura, sentí mi cara caliente, pero al momento lo ignoré ahora dirigiendome a Emira - ¿Qué quieres? - mi voz sonaba venenosa y me sorprendí por mi tono de voz.

Emira: Bueno...ya no estas enojada ¿verdad? - tarareé en respuesta mientras abría penstagram sin hacer caso a lo que iba a decir - Está bien...madre esta procupada y quiere saber donde estas ya que no respondiste ninguna de sus llamadas o mensajes a noche - abrí mis ojos como platos hasta que recordé.

- Ah, si, eso...dile que estoy en la casa de una amiga... - sentí su respiración chocando contra con mi cuello, haciendo que me estremeciera - Dile...que talvez no vaya hasta...otro día... - lo último lo dije en un susurro inaudible y sin poder retenerme dejé un beso en la coronilla a lo que sonrió y me miró burlona, yo solo aparté la mirada apenada.

Emira: Esta bien... - pude escuchar varias risitas através del teléfono.

Edric: Hermanita, de casualidad esa amiga - dijo amiga con un tono más marcado - ¿será Lucia? - iba a responder pero al parecer ella no quizo cooperar y se giró hacia el teléfono.

- Sip, la mismísima Lucia que estan escuchando ahora mismo - se escucharon varias carcajadas y yo solo resoplé fulminandola con la mirada - ¿Qué? - se encogió de hombros mientras se levantaba quitando el calor que me daba - Bueno... - agarró mi celular de la mano y no me quejé, me senté quedando junto a ella para ver que iba a hacer - Bye chichos - antes de que respondieran colgó y me lo pasó - De nada, sé lo que se siente lidiar con dos hermanos desastrozos... - levantó un poco la voz mirándo hacia la puerta.

Se escucharon varios ruiditos tras la puerta aunque no pusse tanta atención ya que se me había puesto encima mío, abrazando mi cuello y con sus piernas a lado de las mías, inconscientemente la agarré de la cintura pegándola un poco a mi, no sé porque

- ¡No somos desastrozos! - la puerta se abrió de repente dejando ver a Hunter y una Amity sonrojada detrás de ella.

- ¿No te enseñaron a tocar? - señaló indignada sin separarse.

- Tenemos las mismas madres, debería preguntartelo a ti.

- Tal vez me enseñaron modales a la mala... - tragó saliva al parecer recordando algo - Tienes suerte que no te haya tocado la chancla... - lo último lo dijo en un murmullo que no pasó desapercibido por Hunter ni por mi.

- Esa es la peor - le dio una sacudida de cuerpo completo y después salió del cuarto.

- Bueno...¿necesitan algo la copia chiquita de Amelia y tú? - se levantó de encima mío y yo repetí sus movimientos poniendome atrás de ella cuando se detuvo frente a ellas, recargué mi mentón en su cabeza, la envolví con mis brazos por su cintura haciendo que soltara un chillido justo cuando la pegué a mí.

TODO POR UNA BROMA...(pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora