Y de repente el odio despertó en mi cuando nos obligaban a quedarnos tarde para seguir ayudando a los demás en el teatro dado que iba a ser parte del staff pues no iba a participar en dicha obra.
Agradecía que solo me pusieran ayudar con la decoración pasaba mucha parte del tiempo sentada haciendo las cosas manuales las cual todo no me salía muy bien pero hacia lo que mejor podía.
Y Lukman todo el tiempo con su cara de culo con las personas incluso los maestros los cuales lo pusieron también a ser parte de la decoración, pero más pesada, pero podía ver como siempre se la pasaba en un rincón haciendo nada.
Bostecé y cerré los ojos por un momento tenía más sueño que vida pues me dormí sumamente tarde por las tareas que encargaron y que no podía dejar para otro momento pues eran dos malditos ensayos y mañana una exposición, quedarme tarde aquí y luego irme de inmediato a trabajar para salir a las once de la noche era fastidiaste solo quería dormir una hora solo una hora, no pedía nada más que eso. Sin decir que estaba evitando lo que más pudiera a Lester ya que en estos momentos no podía salir a ningún lado con él ni nadie, aunque me lo encontré en algunas ocasiones nunca me vio lo cual estaba agradecida poder haberme escondido todas esas veces sonaba increíblemente malo, pero es lo que podía hacer en esos momentos.
Hoy nos dejaron salir antes, cuando iba caminando hacia el trabajo pude contestar los mensajes de mi papá que siempre parecía afligido que me fuera lejos, pero era mejor ponerme la máscara que todo está bien a que me obligara a volver, y que no haría.
—No es que quiera ser mal amiga, pero te ves horrible — me dijo Emma.
—Tengo mucho sueño.
—Te va a matar la escuela y el trabajo.
—Solo quiero dormir un rato, ni recuerdo que debo de hacer de tarea.
Me recargue en la barra para mirarla parecía un poco preocupada quizás por cómo me veía.
—Tal vez te cubra un rato para que duermas.
Pero negué por completo no podía dejar que esto me derrotara, la mire levantando mi puño en alto.
—Esto no me va a vencer.
—Pero las arrugas si llegaran antes — dijo la señora Rubí que leía el periódico a lo lejos.
Me pase las manos por la cara solo tenía que activarme de nuevo para recuperar energías, hacer mi tarea mientras no había clientes aun porque en la noche muchas veces se volvía una total locura.
—Pero que ve mis ojos — dijo Emma muy sonriente.
De seguro era un cliente guapo, porque pude ver como la otra mesera de nombre Rose se paró por completo pasando sus manos en el cabello acomodando todo.
—Parece que un muñeco se escapó de la juguetería — Dijo la señora Rubí a lo cual no pude empezarme a reír.
Me di la vuelta para tomarme a unos cuantos pasos a Lukman con su cara de fastidio que todos los días traía, pero esta vez me estaba dando una mirada extraña, hasta que se acercó a la barra.
—¿Qué haces aquí? — fue lo primero que dije.
—Tenemos una tarea que no nos hemos podido poner de acuerdo porque siempre andas corriendo.
La de literatura que también éramos compañeros, y olvide.
—Lo siento.
Frunció el ceño.
Puso un libro enfrente de mi para darme cuenta que era Drácula a lo cual puse una mueca, aunque nos dio a elegir cualquier libro gótico o de miedo tenía en mi mente otros.
ESTÁS LEYENDO
Miénteme, yo te creo
Roman d'amourMia Sanz esta dispuesta a empezar una nueva vida gracias a la beca que gano, sin imaginar que se reencontrara con su primer amor de la adolescencia Lester Degger, descubriendo que ambos cambiaron pero también conocerá a su odioso hermano menor Luk...