Hacía tiempo que no era tan feliz, que disfrutaba de lo que hacía, de las personas que me rodean, pero en el mínimo momento de tranquilidad que tenía me sentía rara, sentía que me faltaba algo, que me olvidaba de algo. Por desgracia descubrí lo que era, descubrí que me faltabas tú, que me faltaba el subir esas escaleras, entrar en tu casa y con una sonrisa compartirte mi felicidad, porque tu misma me decias que si yo era feliz tu lo eras mil veces más.
Ahora no puedo contarte que las clases ya me van bien, que estoy empezando a confiar en mí y quererme, que deje atrás a los amigos tóxicos y que los que se quedaron son los mejores, no te puedo decir que conocí a un chico que es el que me saca sonrisas todos los dias, y me seca las lágrimas y me abraza cuando más lo necesito, ni has podido disfrutar conmigo los momentos de máxima felicidad, como cumplir mis 18, verme sacarme el carnet, ver como Atenea volvía a tener unas preciosas cuatro crías, ver como conseguía logros haciendo lo que más me gusta.
Me encantaría que ahora al llegar a casa subir esas escaleras y contarte todo, porque no es lo mismo contártelo a ti, en persona, que a una foto tuya.
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Dolor
ŞiirSer una joven que no sabe como contar sus problemas así que los intenta escribir para poder desahogarse en esta sociedad de incomprendidos