🥂 EL BARTENDER 🚬 BROCKXBO 🔥

Pt. 12 "Demons"

Narrador:
Bo sintió un escalofrío al escucharlo, él igual se sentía atraído por Brock, lo sabía muy bien.
—No, Brock... No creo que sea pronto... Tú igual me estás gustando mucho... -le dijo Bo y se animó a besarlo otra vez.
Ambos sabían que se estaban besando de verdad, no fingían nada.
Bo quiso continuar teniendo sometido a Brock. De poco a poco lo dejaba desatado para irse ganando su confianza. Aunque, Brock ya no quería huir de ahí.
Bo guardó el celular de Brock, le dijo que lo había perdido, con el fin de que Brock no pudiera comunicarse con su familia. Sin embargo, Brock le creyó.

Ya habían pasado las dos horas que Bo le había dicho a sus hijos, Brock estaba por dormirse otra vez, así que Bo se aseguró que Brock duerma para poder regresar a su casa. Estaban los dos acostados en la cama, semidesnudos, Bo acariciaba los brazos de Brock, hasta que notó que se quedó dormido.
Bo se alejó cuidadosamente para poder vestirse, pero su celular sonó.
—¿Ahora qué...? -preguntó Bo al ver el nombre del contacto. De inmediato le respondió.
—Bo, ¡¿estás en tu casa con Leon y Nita?! -preguntó Piper.
—No, ya voy para allá. ¿Por qué? -dijo Bo.
—Hay muchos policías por tu calle y las de alrededor, están pasando casa por casa. Ve rápido porque tus hijos están solos. -dijo Piper.
Bo, sin decir algo más, solo le colgó y se apresuró a vestirse para ir rápido a su casa. Afortunadamente el día anterior había lavado la ropa que había guardado bajo su colchón en el día del secuestro, ya que esa ropa contenía sangre de cuando Brock se hirió.
Recordó la herida de Brock, volteó a verlo y notó que había cicatrizado muy rápido, aunque no ayudaba que él mismo lo agarrara bruscamente de la cintura.
Ató con cuidado las manos y pies de Brock y se retiró de la cabaña.

...

—Buenas tardes. -dijo Bo al abrir la puerta de su casa.
—Buenas tardes, señor. Ya sabrá a lo que vinimos, tenemos una orden judicial para poder entrar en su vivienda, le pedimos amablemente que usted y su familia se retiren por un momento. -dijo el policía que estaba frente a él.
Bo intentó guardar la calma, por lo que llamó a sus hijos para que esperen fuera de la casa.
—Revísenlos. -dijo otro policía.
Empezaron revisando a Bo pegándolo contra la pared. Revisaron cada bolsillo de su camisa y pantalón.
Agarraron su billetera, que estaba en un bolsillo delantero de su pantalón.
—¿De qué trabaja? -preguntó uno de los policías al ver la gran cantidad de dinero.
—Gerente. -dijo Bo.
Algo que no se había mencionado antes era que... Bo realmente sí había sido gerente de una gran empresa en otra ciudad. Pero ¿por qué se salió? Porque fue ahí en donde cometió el primer robo que lo llevó a seguir cometiendo más. Él se vio tentado cuando se encontró con el escondite del director de la empresa, en donde guardaba miles de dólares. Pensó que tal vez el director no se daría cuenta a simple vista que le iban a hacer falta mil dólares... O cinco mil... O diez mil...
Al final, Bo tomó 35 mil dólares ya que no pudo guardar más en su maleta.
Como el director estaba de viaje, no se enteró hasta que llegó, pero para ese entonces... Bo ya le había pagado una buena cantidad a un médico para que elaborara una receta falsa, en donde le diagnosticó una grave enfermedad a Bo. Así que, como para la empresa Bo ya no iba a ser "útil", lo despidieron.
Bo se rió en voz alta cuando se enteró que culparon a otros empleados por la desaparición del dinero del director.

—¿Dos celulares? -preguntó el policía.
Un celular era de Bo, pero el otro... Era el de Brock... Bo siguió mostrando calma.
—Uno es personal y otro es de trabajo. -dijo Bo con naturalidad.
El policía encendió ambos celulares, notó que en uno, el fondo de pantalla era de él y los dos niños que estaban afuera, y en el otro... Solo se veía una imagen de una galaxia en buena calidad.
Anteriormente se vería una imagen de Brock y Sandy, pero Bo sabía que los policías llegarían a irrumpir su hogar y que podrían encontrar el celular, por lo que antes de salir de la cabaña, cambió el fondo de pantalla, cambió la tarjeta SIM del celular y todas las fotos que tenía Brock en su galería las guardó en una carpeta oculta, por si llegaban a revisar el teléfono.
—Revisen a los niños. -dijo el policía. Eso alertó a Bo, quien de inmediato volteó y vio que un policía estaba cateando a su hijo, quien, al no encontrar nada, se le acercó a Nita.
—¡A mi hija no! -dijo Bo y se acercó a ella.
—Es parte de la orden. -dijo el policía.
—No voy a permitir que le pongas las manos a mi hija aunque sea por una orden. -dijo él agarrando a Nita.
—Señor, pero nuestro comandante... -dijo otro policía, pero fue interrumpido.
—¡Tráeme a tu comandante y se lo digo en la cara, no me importa! A mi hija ninguno de ustedes la va a tocar. Si necesitan revisar niños, entonces que lo haga una mujer. -dijo Bo.
Los policías no dijeron nada, a pesar de ser una autoridad, hicieron caso a aquél padre que tenían frente a él y fueron a la patrulla a llamar a una compañera, la cual revisó a Nita.
—Listo. -dijo la compañera, al no encontrar nada en Nita.
Los policías que habían entrado a la casa de Bo salieron después de eso.
—No encontramos nada que nos pudiera dar una pista sobre el paradero del señor Brock. -mencionó uno de ellos.
"La pista la tienen frente a ustedes, imbéciles", pensó Bo.
Los policías se retiraron, Leon y Nita tenían miedo por haber visto a su papá discutir con esos "señores uniformados", porque creyeron que lo iban a arrestar.