ＤＥＪＡ ＶＵ ♡ minjoong !

ＣＡＰＩＴＵＬＯ ＯＮＣＥ

–¿Está todo bien, Yeo?–

Esas palabras no salieron de su amigo pelinegro, sino de su primo. Eso hizo que se sintiera peor y que quisiera llorar.

–Si Yeo, estás muy callado. ¿Estás bien?– coincidió Wooyoung

No quería hablar de ello, mucho menos delante de Jongho. La paranoia del romance de su amigo le había llevado a los recuerdos de su primer amor. Su doloroso primer amor.

–Me gustaría hablar de eso luego tranquilamente en casa, ¿sí?– preguntó y asintió con la cabeza como respuesta

¿Qué por qué no quería hablar delante de Jongho? Porque él había sido su primer amor.
Gracias a Wooyoung le conoció. Casualmente se encontraba allí en su casa un día que visitaba a su amigo, y se llevaron muy bien. Ellos se hicieron amigos también. Salían los tres. Hasta que un día comenzaron a salir los dos solos. Yeosang se había enamorado de él, y en una de esas salidas el menor se le confesó. Eso le puso muy feliz.

Y pensó en todos los momentos juntos. En las veces que se encontraban por casualidad en la calle y pasaban la tarde juntos, en las veces que fue a su casa con la excusa de estudiar y acabó besando sus labios sin pausa, en las veces que daban paseos por el parque dados de la mano. Muy cliché, y eso le gustaba. También pensó en que dolía en sobremanera porque él seguía enamorado del pequeño castaño.

Este último le citó un día a su casa. El rubio fue muy inocente pensando que volverían a "estudiar" terminando abrazados viendo una película en su sofá. Jongho le dijo que ya no sentía lo mismo. Que se había enamorado de otra persona. Que deberían separarse. Eso sucedió hace un año y medio, y el mayor seguía enamorado de él.

Los recuerdos bonitos y felices, se volvieron tristes y difíciles de recordar. Sentía como las lágrimas en sus ojos se formaban y amenazaban con salir, allí delante de todos. No lo haría no, no por esa razón. Ya había llorado suficiente por el primo de su mejor amigo.

Tan concentrado estaba en no llorar que no se percató de la mirada preocupada que le dedicaban los dos chicos a su lado.

Pasaron unos minutos hasta que llegaron a casa, minutos que fueron infernales para el bajo que sentía que rompería en llanto en cualquier momento. Jongho subió su cuarto, dejando privacidad a su primo y a su amigo. Se sentaron en el sofá.

–Yeo, dime que pasa.– dijo acariciando su espalda

–Es que– no pudo terminar ya que su voz se rompió, estaba a punto de llorar

–¿Es por lo de Hongjoong? Es por eso, ¿verdad? Te dije que no te preocuparas.–

–En principio era eso– le interrumpió –Y eso solo me hizo recordar a mi primer amor. A mi primer fracaso.– el menor entendió y suspiró abrazando al ajeno

–Sé que es duro, pero algún día lo superarás. Tienes que intentar superarlo.–

–Y lo intento Woo, juro que lo intento. Intento hablar con otras personas, no pensar en eso mucho y mucho menos indagar en los buenos recuerdos. Pero sigo enamorado de él. Y duele.– acunó su cabeza en el cuello del pelinegro

–Ojalá pudiera hablar con Jongho para convencerle. Eres muy buen chico Yeo.– le acarició el pelo –Pero así podremos ayudar a Hongjoong. Tenemos que ayudarle a que no acabe en tragedia su relación, si la llega a tener, y tenemos que mostrarle nuestro apoyo. Yo siempre he estado ahí para ti.–

–Lo sé y eso me ayuda mucho, gracias por todo Woo.– dejó que sus lágrimas salieran, sabiendo que lloraría en el hombro de alguien. Le servía de consuelo

Jongho, que había estado escuchando todo a escondidas, sintió un dolor en el pecho, una presión indescriptible. ¿Yeosang seguía enamorado de él? Y además, por si no fuera poco, sufría por su culpa. Él lo había dejado, y no precisamente porque no le quisiera.

…ᘛ⁐̤ᕐᐷ