Harry Potter and The Phoenix Order
El Ministerio de Magia seguía negando estúpidamente el regreso del Señor Tenebroso, la palabra del mocoso de Potter podía ser puesta en duda, pero la marca ardiendo en mi brazo jamás. Si Fudge seguía tan ciego de poder, sería más fácil de lo que creía que Lord Voldemort se hiciera con el control del Ministerio pronto.
Por supuesto Dumbledore no era ni de cerca tan estúpido como Fudge y desde esas vacaciones había reunido nuevamente a los antiguos miembros de la Orden del Fénix y otros nuevos se habían unido, unos cuantos de ellos trabajadores del Ministerio, por lo que estábamos bien informados de lo que sucedía allí dentro.
Por suerte, la sabelotodo estuvo casi todas las vacaciones con los Weasley en Grimmauld Place y no necesitó protección, Potter eran otros cinco galeones, el chico debía ser observado día y noche, ahora le había dado por salir y sentarse tranquilamente en el parque, como si los mortífagos y el Señor Tenebroso no estuviesen locos por tenerlo entre sus garras.
Por otro lado fue hilarante escuchar desde las sombras a la pequeña princesa de Gryffindor Hermione Granger, quien ya no era tan pequeña de hecho, decirle al perro pulgoso de Black que "tenía de inteligencia lo que un elfo de lindo y sus encantos masculinos provocaban en ella la misma sensación del encantamiento traga_babosas" me estuve riendo de la expresión de Black el resto de las vacaciones.
El inicio del curso estuvo marcado por la inclusión en el cuerpo docente de un sapo vestido de rosa, esa mujer, si es que puede ser llamada mujer, me daba serias ganas de vomitar, era repulsiva hasta la forma en que hablaba y al parecer tenía cierto apego hacia mí y Filch. Por Merlín, tan solo el pensar que esa mujer me consideraba de su misma categoría me hacía querer ser un vomita arcoíris como Albus.
Sabía que Potter y sus aliados estaban tramando algo, pero como eso hacía enfadar al sapo, no le di importancia y me hice el de la vista gorda, hasta que la idiota de la amiga de Cho Chang había ido a la dirección y el sapo rosa me había obligado a darle Veritaserum a la chica. Ese día estuve más seguro que nunca que esa mujer estaba a favor de cualquier cosa que le diera poder sobre los demás, no sería sorprendente que fuese aliada del Señor Tenebroso.
Otro de mis grandes dolores de cabeza venía de la mano de las visiones de Potter y las clases de Oclumancia. Sí, al inconsciente de Dumbledore se le había ocurrido la brillante idea de arriesgar mi cabeza y cordura solo porque el viejo no quería pasar tiempo con el muchacho. Mala elección, Potter fracasó estrepitosamente en su aprendizaje y el muy imbécil violó mi privacidad, viendo algunas de las memorias del perfecto James Potter y sus secuaces abusando de mí.
Por supuesto, la inteligencia de Potter de ponerle a su Club de Defensa Contra las Artes Oscuras, Ejército de Dumbledore, en lugar de Ejército de Potter, llevaron a la escuela a caer bajo las garras del asqueroso sapo, y si alguna vez pensé que el Colegio había sido un desastre bajo el mandato de Albus, definitivamente lo retiraría, incluso consideré prestarle las mazmorras a los gemelos para que hicieran sus experimentos, incluso quise darles puntos extra, cualquier cosa con tal de que volvieran loco a ese ser despreciable llamado Dolores Umbridge.
Acababa de regresar de una reunión con el Señor Tenebroso especialmente desagradable cuando fui llamado a la oficina de Umbridge, antes de ir le mandé un patronus a Dumbledore y fui a atender al sapo.
-Ah Severus, qué alegría verte- exclamó la basura rosada con alegría llenando sus rasgos.
-Dígame en qué puedo ayudarla profesora- fingí una media sonrisa que se borró inmediatamente al ver a Potter, Weasley, Granger, Longbottom, Lovegood y la mini Weasley en manos de Draco y sus seguidores.
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Prophecy of Blood (Sevmione)
Hayran KurguSeverus Snape ha pasado los últimos cinco años salvando a Harry Potter y sus amigos. Ahora, en pleno sexto año del niño que vivió, un accidente no tan accidental en el aula de pociones deja a Draco Malfoy, Harry Potter, Ron Weasley y Pansy Parkinson...