Allen un omega fanático de las novelas de romance barato se encontró con el peor alfa, Kendall Kenneth el protagonista de the tyrannical alpha and lovely omega quien manipulo a su personaje secundario favorito, todo pudo acabar ahí de no ser porque...
Kendall camino junto al par de omegas que estaban caminando con la joven abrazaba al brazo de su hermano mayor.
Al alfa le bastaba con tan solo ver la sonrisa del omega mayor para sentir como su corazón daba un vuelto e le inevitable el no querer sonreír también. La dulce risa llego a sus oídos, a Kendall le gustaba como Allen siempre que reía trataba torpemente de cubrir su boca con su mano, también como a veces las mejillas del omega tomaban un color más rosa que lo hacía ver no solo lindo sino que combinaba lo delicado con lo encantador.
Los tres adolescentes iban caminando y hablando aunque de vez en cuando eran arrastrados por la menor a entrar a alguna boutique que hubiera llamado la atención de la omega como lindos vestidos y traje por lo que iba y venía de las tiendas.
Ambos hermanos miraban los lindos conjuntos siendo atraídos por los sutiles colores de estos.
Kendall apreciaba cada pequeño gesto del omega desde como el chico hacia ligeros pucheros cuando estaba somnoliento, la facilidad que había de hacer que sus mejillas enrojecieran, como sus ojos se volvían medias lunas cuando sonreía, cada pequeña cosa que hiciera el omega era algo digno de apreciar a los ojos de Kendall.
Iba a extrañar poder verlas . . .
Para cuando regresaron el cielo ya estaba pintado con tonos naranjas y amarillos y mostrando indicios de un azul.
El primero en bajar fue el alfa que ayudó a que la joven señorita bajara y seguido de él salió Allen, Kendall se mostró algo indeciso sobre si dejar que el omega bajara sólo pero antes de que si quiera tuviera la oportunidad de apartar su mano fue tomada gentilmente por el omega que con gracia bajo del carruaje.
Ayla se despidió de Kendall para ir dentro de la mansión dejando a solas a propósito al tonto alfa con su hermano.
El alfa ya había pensado desde hace días lo que iba a decir, sus sentimientos almacenados y también se había preparado para un posible rechazo.
Antes de que el joven omega pudiera despedirse fue interrumpido por el alfa que tan pronto sintió los ojos grises de Allen sobre el de inmediato se acobardo y todas las palabras que había estado pensando desde la noche anterior se esfumaron de su mente quedando en blanco.
— ¿Qué pasa?—Preguntó el omega ladeando un poco la cabeza ante el extraño comportamiento del alfa.
—Y-yo...—Parecía un disco rayado repitiendo esa misma palabra varias veces sin llegar a nada, causando la impaciencia de Allen pero no dijo nada y solo sé que ahí esperando a que el alfa se atreviera a hablar.
— ¿C-cómo me ves?—
— ¿Umh?—Exclamó Allen sin entender la pregunta a lo que el alfa tuvo que volver a reformularla.
—Me refiero a que soy para ti, más allá de ser un príncipe molesto —Allen soltó una leve risa cuando escucho eso, no esperaba que el mismo protagonista se dijera a sí mismo como alguien molesto pero eso no duro mucho porque sus manos fueron atrapados por las manos callosas del alfa —Quiero saber si me vez como un alfa —
"¿Qué clase de "Quiero que me veas como un hombre es esto?" Pensó con diversión el omega por lo que con la misma sonrisa y tono despreocupado dijo: —Claro que te veo como un alfa, de que otra forma te—
Antes de que el omega pudiera seguir hablando su rostro fue tomado y sintió como algo suave se estaba presionando contra sus labios.
Los labios de Kendall estaban sobre los de Allen en un beso sin experiencia en donde básicamente solo chocaba sus labios contra los del omega que estaba aturdido, debido a que ahora ya estaban con la misma altura al separarse podían verse a la cara.
El rostro de Allen estaba más allá de rojo al igual que el de Kendall.
—Allen me gustas —
"AAAAHHHH!!! PAREN EL MUNDO! ¡¿Protagonista tu cabeza está bien?! Se supone que soy un extra, ¡¿Por qué te gustaría?! ლ(ಠДಠლ)"
El omega que en su cabeza estaba más que alterado sobre el giro que había tenido la trama, por otro lado estaba un alfa con expresión que parecía que el cualquier instante comenzaría a llorar de la vergüenza.
Incómodo el Omega fue el primero en hablar, una risa nerviosa y que a kilómetros se notaba la incomodidad —Gracias pero no...—Allen nunca fue bueno para rechazar a las personas, ni en esta vida ni en la anterior y vaya que se notaba al tratar de buscar palabras para un apropiado rechazo pero eso no intereso cuando fue interrumpido por Kendall.
—No, está bien, de todas formas no pensé que te gustaría —Dije el alfa desviando sus ojos de Allen sin que este notará como sus ojos se habían vuelto cristalinos.
Ugh desde que había conocido a Allen se había vuelto muy llorón pensó con amargura, el omega no sabía que decir y prefirió guardar silencio antes de querer tratar de darle falsas esperanzas al príncipe.
Una mano cayó sobre el suave cabello de Kendall y lo acaricio en consuelo dándole una sonrisa de disculpas—Será mejor que te vayas antes de que sea más tarde—Pidió el omega.
Kendall solo pudo despedirse levemente de Allen y subirse al carruaje.
Miro como el omega se quedaba mirando como él se iba y antes de que pudiera seguir aguantando sus ojos picaron y pequeñas lágrimas comenzaron a salir al igual que débiles sollozos se escapaban desde su garganta.
Kendall Kenneth, 16 años, al fin sabía lo que era el rechazo.
_____________________ Fin del capítulo 6
Kendall después de ser rechazado:
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