¡Le Gusto Al Protagonista!

extra AU

Allen es menor a Kendall.

O una excusa para escribir coito. 

advertencia de boypussy, no pido que me entiendan, solo que no me juzguen.

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Tenía un pequeño problema...

Y era uno muy molesto, de nombre Allen.

—Ayla~

La expresión del joven alfa se agrio al escuchar el tono meloso.

La chica a su lado al contrario de él, sus ojos se iluminaron al ver a su lindo hermanito.

Ugh.

—¡Allen~! —Exclamó la omega con el mismo tono infantil que siempre usaba cuando estaba con el menor.

—¿Qué estaban haciendo? ¿Por qué no me despertaste? ¡Quería salir contigo a dar un paseo!—El chico demando un sin fin de cosas con un tierno puchero.

Ugh.

—Yo también quería estar contigo, pero su majestad llegó antes de que despertaras, quería que siguieras durmiendo un poco más, últimamente te quedas despierto hasta tarde por leer esos libros! —

Kendall solo pudo rodar los ojos cansado de este escenarios, mirando al par de hermanos juguetear e ignorando su presencia.

Bueno, al menos eso es lo que hacía el omega masculino, que después de hablar, solo lo voltear a ver y le daría una falsa sonrisa y diría "Perdón, no me habia dado cuenta de que estabas con mi hermana"

—Primero deberíamos de almorzar algo y más tarde podremos dar un paseo —Prometio Ayla mientras tomaba la mano del chico.

Kendall solo pudo seguirlos.

Mirando a ambos omegas cuchichear y comer entre ellos, el alfa no pudo evitar sentirse dejado de lado.

Incluso si la chica lo trataba de meter a la conversación, Allen rápidamente terminaría dicha conversación o cambiaría de tema.

Ayla solo pudo regalarle una leve sonrisa de disculpa

Moviendo suavemente su taza de té, miro el color amarillento casi como el ámbar y después se desvió al menor de los tres.

Allen, era el pequeño hermano de Ayla, lo conocía desde que era incluso más pequeño que ahora.

Mirando el pequeño rostro con mejillas suaves y algo gorditas que daban la sensación de querer pellizcar, nariz pequeña y labios rosados que siempre amenazaban con hacer un puchero.

Era una lastima que el par de brillantes ojos siempre lo mirarán con molestia.

¡Antes no era así!

Aún recuerda al pequeño Omega que corría en su dirección y luego se aferraba a su brazo, diciendo su nombre con una suave sonrisa.

—¿Qué es lo que me miras?—Escupió Allen irritado por la extraña mirada que le estaba dando Kendall.

—. . . Tienes algo entre tus dientes —Miente sin problemas el alfa.

No puede evitar sentir cierta satisfacción al ver cómo la cara del chico enrojecer por la vergüenza y rápidamente cubre su boca.

Este pequeño omega siempre lo hacía sacar su lado infantil...

Pero, ¿Cómo podría aguantar no querer molestar a Allen cuando lucía tan tierno avergonzado?

Al menos le servía como venganza por todas esas veces que el Omega se burlaba de él.

Incluso cuando solo quería estar a solas con su amiga, este chico se entrometió y como siempre terminaría peleando sobre algún tema tonto mientras Ayla trataba de calmar a ambas partes.