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Sucedió que Ashley salía de la cocina.
"¿Ya has terminado?"
"Sí, sí".
Coy asintió apresuradamente a la pregunta de Ashley. Estaba nervioso de que sus acciones pudieran parecer incómodas, pero Ashley dijo: "¿De verdad?" y siguió adelante.
¿Estaba bien?
Coy no creía en absoluto en sus dotes de actor, pero quizá no estuviera mal ver que Ashley seguía adelante sin más. No tenía más remedio que pensar que sí.
"¿Vas a dormir ahora mismo?" ¿O debería beber un poco más?"
"Quiero más".
Es ridículo que esté durmiendo. Ashley sonrió cuando contestó apresuradamente. Todavía tenía hinchazón en una mejilla, pero muchas marcas de las manos habían desaparecido. Para mañana, la hinchazón disminuirá y las marcas de las manos habrán desaparecido por completo.
"Puedes venir a la escuela el lunes".
Ashley sonrió ante las palabras de Coy.
"Dije que iba a ir".
Al ver la reacción que parecía natural, pensó que era mala. Coy preguntó, fingiendo no saber.
"¿Te quedarás así hasta entonces?"
Ashley lo miró.
"¿A quién le dije que estaría bien pase lo que pase?"
Las mejillas de Coy se pusieron rojas.
"..."
Ashley asintió como si lo hubieran golpeado y luego sonrió con satisfacción. Coy sintió que el corazón le latía con fuerza mientras se apresuraba a ir detrás de él, llevando un ritmo pausado.
* * *
*Suspirando*.
Salió un suspiro satisfactorio. Coy se sentó junto a Ashley en el jardín mirando el cielo nocturno. Junto a ellos había montones de refrescos y aperitivos.
"Creo que van a caer estrellas".
Dijo Coy, extendiendo la mano.
"Nunca había visto un cielo tan amplio".
"¿No lo viste la última vez?"
Coy se apresuró a corregir los odiosos comentarios de Ashley.
"Sólo puedo ver un cielo tan amplio en esta mansión".
El cable eléctrico que colgaba del poste telefónico no cruzaba el cielo, ni tampoco estaba tallado irregularmente en el edificio que se elevaba de vez en cuando. El amplio e interminable cielo parecía abrirle el corazón cada vez que lo veía.
"Es fácil ver las constelaciones".
Dijo Coy mientras tomaba una copa.
"¿Me echas de menos?"
Ante la pregunta de Ashley, Coy se volvió y le miró fijamente.
"¿Hay alguna otra forma de verlo así?"
Murmuró Ashley con voz insignificante.
"Tengo un telescopio".
"¿Qué? ¿Un telescopio? ¿Un telescopio astronómico?
Ashley, que se sorprendió por el tono de voz elevado, respondió con un compás de retraso.
"Bueno, ¿qué?"
