EL HEREDERO De W.P

Cap 22 Nuestros sueños

La monotonía de ver a Lørem en su auto esperando por mi, corría el peligro de que dejara de pasar si no podía aclarar mis sentimientos. Desde la última charla acerca de eso había pasado ya unas semanas.

Pero nuestro trato no había cambiado, seguía tocándome con su dedo índice sobre mi nariz, y yo tímidamente de vez en cuando solía escurrir mis dedos sobre sus cabellos negros ondulados, Lilian aunque no lo soportaba porque no lo conocía como yo al inicio, solía rondarnos de vez en cuando, todos los días hablábamos sobre si acercarme a Joseph o no.

Pero hoy era sábado, Lørem no vendría. Y tendría tiempo para hacer lo que tanto quería, corrí a mi laptop y ahí buscando aquel lugar que Lørem había dicho "El valle de la inseguridad" al principio solo habían imágenes, pero cuando añadí la palabra leyenda urbana —Lo encontré— chillé, y es que solo había un sitio web que hablaba sobre ese lugar, era casi anónimo para todo el mundo, Lørem había dado con el de una forma desagradable, pero sin darse cuenta lo había vuelto en un sitio placentero.

Me aliste para el aire y el calor al mismo tiempo, la lluvia serena pero pesada que había en el lugar, quería gritar el nombre de Joseph con la esperanza de que se fijara en mí antes de dar mi primer paso a conquistarlo, las probabilidades de que aquello sucediera era casi nulas, pero siempre me aferro a lo imposible.

Tome un taxi que me dejo a unos cuantos pasos lejanos del lugar desconocido al parecer para varias personas, cuando estuve cerca me percaté de lo solitario que era, pero quería seguir avanzando, quería gritar su nombre.

Pase las piedras con formas muy peculiares, luego por fin de caminar unos minutos más adelante llegue al llano seco donde el calor era intenso, pero la brisa que venía de vez en cuando de la frontera era como aire acondicionado de la manera natural. La última vez que había venido con Lørem no me pareció tan lejos de la carretera principal, el conseguir transporte de vuelta iba a hacer un problema, o bien podría resignarme y llamar a papá, y por supuesto esperar las quejas de mamá. 

Pero a pesar de mis miedos, me encontré de nuevo en el lugar Del Valle de la inseguridad, extendí mi mano para que las gotas de lluvia acariciara mi piel, iba a avanzar, pero escuché el sonido de un auto detenerse a un costado de mi.

Me apresuré a esconderme detrás de una roca frondosa confirma de ballena, lo suficientemente grande para ocultarme, no sabía qué tipo de personas podrían venir a un sitio tan apartado así que me mantuve ahí hasta cerciorarme de que podría hecha un vistazo sin que se dieran cuenta. Primero a penas y asome el rostro, mis ojos deslumbraron una silueta que yacía sobre el llano seco, de complexión delgada, estaba lejos de mi, no podía distinguir pero tenía un presentimiento.

Cuando deje de ocultarme y me puse erguida sobre mis pies. Lo ví, era él Lørem estaba recostado sobre el pasto mientras sostenía en sus manos un reproductor de música, parecía un modelo antiguo, pero con conexión inalámbrica.

No sabía si acercarme o no, tal vez había venido porque quería estar solo.

Siempre esta diciendo que soy ruidosa y que no hago más que buscar excusas para perseguirlo, si me acercara ahora no ayudaría mucho.

Pero ahí estoy yo, avanzando hacia él, mis piernas tiemblan porque no estoy a gusto con las decisiones que acabo de tomar.

Lørem está completamente recostado sobre su espalda, sus piernas largas se cruzan, y una mano sostiene el reproductor mientras que la otra trata de ocultar sus ojos negros de la Luz del sol, dobló mis rodillas y mi rostro cae sobre el de él, entre cierra sus ojos pero cuando se percata de mi presencia no puede evitar ocultar su asombro, por mi parte yo tampoco pude evitar el mío, no podía creerlo...