[ XVII ]

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Normalmente los dias en otoño son frios, tienes que abrigarte y por ende tienes que evitar salir mucho a la calle si es que el frio en tu lugar natal o donde estes es muy fuerte.

Y cuando llega el invierno esto es peor pues el frio aumenta cada vez mas al punto de que echas vapor por la boca cual dragon furioso, pero no simplemente el aire a tu alrededor es tan gelido que tu propio calor cede ante el.

Tal y como val estaba ahora.

Okey, la cosa aqui es preguntarse porque estaria temblando de frio, pero resulta que es obvio sabiendo que esta en rumania y que el invierno es muy fuerte en esta parte del mundo, tanto asi que nadie salia a la calle mientras la nieve estuviera ahi como un maldito estorbo, en la acera, en los techos y en todos lados.

Y en cuanto a este chico el tenia un sueter de lana y una pequeña campera de tela fina que dani le consiguio como un pequeño regalo, el agradecia esto, aun si no le ayudaba mucho sabia que era algo muy bueno que ella se preocupara por el.

Y ahora que se habla de la menor de las hermanas de dimitrescu, hay algo que si era sabido, y aunque val a veces pensaba que no podia ser, que era algo loco y por ende el lo estaba resulta ser que no, lo asimilaba a los pocos segundos.

Su yo de hace dias contra su yo de ahora siempre debatiendo cada que ella aparecia, con esa sonrisa radiante, esos ojos bellos llenos de pureza que solo una niña tendria pero que tambien tenian un toque coqueto y maravilloso.

Su hermoso cabello rojo peinado hacia un costado, como una cascada, siempre liso y suave, era una de las mejores sensaciones para sus manos cuando le pedia caricias.

Pero lo que quedo grabado en su mente a fuego ardiente fue aquel momento cuando estaban ambos en la habitacion de ella.

El consolandola, ella triste y preocupada por el, sus meñiques enlazados haciendo esa promesita que solo los infantes harian y ellos dos sumidos en una miel de pensamientos callados unieron sus labios.

Fue tan rapido y tan lento a la vez que aun val lo trataba de entender, beso a daniela, no era la primera vez, pero hubo algo en ese beso tan tierno y calmado que por un momento le hizo erizar la piel.

Aunque los labios de dani eran algo frios, era una vampiro obviamente, el pudo sentir aun asi la calidez en ellos como si daniela le estuviera gritando que queria hacer eso y que queria llegar a mas con el, le abrio su corazon y sus emociones a el de tal forma como para llegar a esto?.

El podia afirmar que en efecto lo hizo cuando el dia anterior cuando le trajo aquella campera ligera ella le dio un beso rapido, pero incluso un beso de esos apurados facilmente se pueden dar en la mejilla.

Fue a pocos centimetros del labio, no, milimetros, casi como si su objetivo fuesen esos labios rosados tan vivos del muchacho que la cautivo a ella.

Era claro que pasaba.

Aun si tenia 20 y paso 18 años alejado de muchas cosas no hacia falta ser un genio en el romance para saberlo.

Pero de nuevo, su yo del pasado irrumpia furioso como perro de mal caracter ladrando que era imposible y una locura.

Quizas si...

CLARO QUE NO!..

De nuevo y de nuevo y de nuevo.

Parecia un bucle.

Un bucle que se pauso un poco cuando escucho pasos hacia su celda, ya venia sabiendo que debia ser, seguramente la comida.

Pronto vio el vestido negro, el velo, la baja estatura, una sonrisa inconscientemente se formo en el, sabia quien era -"es bueno verte despues de dias.."- la confianza con la que hablo hizo que la mujer se detuviera ahi mismo, el sabia que ella lo estaba mirando con esos ojos acuarela que parecia que podias ver el mar a traves de ellos.

𝒏𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒐 | Resident Evil: VillageDonde viven las historias. Descúbrelo ahora