Capítulo 11

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Jamás odié tanto el sol como hoy, ¿que le costaba esperar un poco más?

Mi cabeza dolía y mis ojos picaban, lo siguiente en golpearme fue un horroroso revoltijo en mi estómago, era una especie de dolor mezclado con náuseas, horrible.

Mi boca estaba seca y el olor que emanaba de la cocina en lugar de llamarme, me hacía querer huir.

Me senté en la cama deseando no haberlo hecho tan rápido, todo daba vueltas.

¿Qué pasó ayer?

Me percaté del vaso con agua que estaba a mi lado, y al suyo una pastilla, luego de tomarlos me dirigía hacia la cocina, no por comida como acostumbro, sino por respuestas.

-Tu t'es enfin réveillé mon amour, tu as mal à la tête non?- dijo apenas me divisó.

-Nada de francés mientras muero- este me tomó y sentó con agilidad sobre la encimera, luego colocó sus brazos a cada lado de mi cuerpo.

-¿Ves porque no quería que bebieras alcohol?- bufé, ¡¿como si hubiera sido mi culpa?!

-¿Que pasó anoche Tae?- mis lagunas no dejaban ver nada luego de este haberme pillado infraganti.

-No recuerdas- dijo más para sí que para mí, su rostro dejaba ver algo de decepción pero luego se giró para continuar con la comida.

-Taehyung- pedí, tenía miedo de haberle contado algo sobre mis sueños, o algunos secretos que prefiero guardarme para mi.

-No pasó nada más que tu tratando de caer de bruces contra el suelo, luego te dormiste y aquí estás- ahora revolvía cosas en el refrigerador.

Menos mal.

-Ohh, me das algo para la resaca, no quiero ir a mi cita en estas condiciones.

-Aún irás- ¿porque no lo haría? -¿Tomaste la pastilla que dejé para ti?- afirmé -Bien, comerás lo que te dé, dormirás más o menos media hora luego de haberte dado un baño completo y ya está.- asentí.

Luego de haber comido me adentré a la ducha, me despojé de la ropa que me vestía y las gotas de lluvia artificial comenzaron a arroparme entera, sentí alivio.

Me adentré entre las sábanas de Taehyung, no quería dormir en mi cuarto y este se había acostado luego de haber preparado el desayuno, inmediatamente toqué la cama sus brazos me atrajeron hacia él y cerré los ojos encontrándome en mi hogar.

Si tan solo todo fuera más simple.

Si por el hecho de amar con cada fibra de tu ser a alguien puedas tener la certeza de ser correspondido.

...

-Estás muy linda- me dijo este cuando salí ya lista de mi cuarto, llevaba unos pantalones cortos y una blusa de su misma altura, esta dejaba mi cuello y hombros al descubierto, él había elegido todo, hasta las sandalias que llevaba.

-Gracias, ¿vas a salir?- llevaba una camisa a medio colocar mientras colocaba sus zapatos.

-Debo ir a la universidad por unas horas- en ese momento un mensaje llegó a mi teléfono, Jungkook estaba abajo. Me despedí y emprendí camino, luego de guardar mi teléfono en mi bolso.

-Estás muy bonita- dijo luego de algunos segundos donde se dedicó a apreciarme, yo había hecho lo mismo.

Vestía completamente de negro, pantalón y camiseta, además de sus botas, su pelo iba hacia atrás y sostenía un casco en sus manos, entonces mi vista fue hasta la puerta de entrada del edificio, había una monstruosa y enorme moto frente a este.

-Podemos ir en taxi si deseas, si las motos te asustan me refiero- negué.

-Siempre quise subirme a una- miró mi rostro notando  la sonrisa que había en este, luego comenzamos a caminar. -¿Donde iremos?

-Habrá un concierto al aire libre, estilo picnic, venderán comida y disfrutaremos de buena música, ¿te gusta la idea?- asentí, cuando estuvimos frente a la moto este me colocó el casco y luego el suyo, se subió a esta y me indicó cómo subir.

La parte trasera de la moto era bastante alta así que tambalee un momento, luego choqué por accidente casco con casco con mi acompañante, reímos.

Llevó mis manos a su cintura -Agarrate fuerte- dijo esto y realicé la acción, estaba eufórica y expectante.

El recorrido fue tan emocionante como desee, lo cálido de su cuerpo en contraste a la fría brisa por la velocidad a la que íbamos, sumándole a las rizas que se me escapaban por tan aventurera acción.

Sin duda me había gustado.

Cuando llegamos este aparcó, me ayudó con el casco y luego tomó mi mano para ir hacia la música, nos sentamos en una manta que se encontraba algo alejado del escenario, pero que aún así permitía  ver y escuchar todo.

Comimos, reímos, cantamos, incluso bailó un poco, decir que tenía talento era quedarse corto.

Ahora nos encontrábamos tumbados boca arriba sobre la manta mirando el cielo, los artistas se habían ido y solo quedaban unas cuantas personas del equipo de sonido, y algunas parejas o grupos que aún no se habían retirado, como nosotros.

-Quiero preguntarte algo, pero si te moletas no tienes porque contestar- giré mi rostro hacia él esperando su pregunta, divisé su perfil, sin duda era apuesto.

Me vi en el, me vi en unos años teniendo que dejarlo porque su rostro maduró y el mío no, me vi sufriendo por haberme enamorado de tan hermosa sonrisa, me vi haciéndole daño.

-¿Quien fue por ti al bar el viernes?- llevé mi vista nuevamente al cielo notando lo rápido que se había formado una nube gris sobre nosotros, las gotas de agua no hicieron esperarse.

Nos pusimos de pie y corrimos tras una caseta, esperamos en silencio por un largo rato el cual me ayudó a pensar.

¿Quien era Taehyung?

¿Mi familia, mi hermano mayor, mi hermano menor, mi tío, mi padre, mi abuelo?, no era nada de eso, llevaba años engañándome a mi misma.

Reprochándome por sentir esto por el.

¿En que momento el amor de hermanos que sentía por él llegó a hacerme desearlo?

Lo tenía claro desde hace más de una década, lo amaba, y no de la forma en que debería.

-Fue muy linda tarde- agradecí cuando estuvimos frente a mi edificio. Este había quitado su casco y pude apreciar mejor su rostro.

-También lo creo- hubo un momento de silencio en el que mi vista se posó en él directamente, no solo mirándolo, sino viéndolo, su labios eran hermosos, se veían suaves y la sonrisa que se escondía tras estos era aún mejor.

Su mano me atrajo desde mi cintura hacia su cuerpo y posó sus belfos sobre los míos, suaves y delicados como pensé, ricos como los imaginé.

Cuando estos se desprendieron de los míos, no hice más que emprender camino dentro del edificio con mis mejillas a punto de reventar, había tenido mi primer beso.

(Lo que Taehyung le dice es "al fin despertaste mi amor, te duele la cabeza ¿no?☺️)

Le decimos adiós a las narraciones de nuestra protagonista, desde el siguiente capítulo en adelante conoceremos la perspectiva de nuestro hermoso suggar.

En la imagen la moto de nuestro sexy bailarín.

..

En Las SombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora