El tren había llegado a la estación, los padres de Hermione y Ron habían llegado por ellos; no estaba muy segura de quien llevaría a Harry a casa de sus detestables tíos, así que me ofrecí para llevarlo, Nana había llegado, parecía muy feliz; se abalanzo sobre mi abrazándome y pode ver como Harry aguantaba la risa.
- Nana, espera, por favor, tenemos que llevar a Harry a su casa, no dejare que se vaya el solo- Hablé con el tono gentil y calmado que siempre usaba, Nana se apartó de mi y giró su rostro hacia Harry.
- ¡Oh por Merlín!, eres Harry Potter!- Nana se acerco a Harry y apretó sus mejillas ligeramente mientras sonreía con emoción.
- Nana, lo vas a hostigar- Me acerque a ambos y Nana sonrío bastante alegre; tomo las manos de ambos y comenzamos a caminar todos fuera de la estación, Nana ya había subido nuestras maletas al auto.
- No te preocupes, es la mujer alegre que describiste- Expresó Harry, Nana abrió las puertas del auto y el castaño con lentes subió en la parte de atrás dejándome el asiento libre mientras sonreíamos.
- Bien Harry, antes de llevarte a tu hogar; pasaremos por algo de comer, muero de hambre, les parece bien?- Nana cerro las puertas y subió en el asiento del conductor para encender el auto.
- Por mi no hay problema Nana, Harry, te molesta?- Gire mi rostro hacia el contrario quien parecía entusiasmado y feliz.
- Para nada, esta bien por mi parte- Respondió Harry, Nana asintió y arranco el auto comenzando a conducir de manera tranquila pero a buena velocidad.
Me recosté un poco en el hombro de Harry y cerré mis ojos, pude sentir como él recostaba su cabeza sobre la mía mientras tomaba mi mano, así como al mismo tiempo podía sentir la mirada de Nana sobre nosotros a través del retrovisor del auto, tras todo lo que había pasado en el ciclo escolar, me sorprendía que Nana no me hubiese llenado de preguntas desde el momento en que me vio, el camino fue bastante tranquilo y un poco alargado, pero por fin habíamos llegado al restaurante, un restaurante de muggles, o personas comunes, para no sonar tan prejuiciosa; Nana abrió las puertas del auto de nuevo y pude sentir como Harry me movía ligeramente susurrándome para no levantarme de un susto.
- _____!, ya llegamos, despierta- Susurraba en tono gentil y bajo el chico en quien estaba recargada.
- Lo lamento- Hable una vez que abrí los ojos y baje del auto un poco adormilada; Nana tomo su varita e hizo un pequeño cambio en mi para que nadie notase que era la princesa _____ Blyon.
Caminamos dentro del lugar, Harry y yo tomados de las manos y Nana detrás de nosotros, una mecerá bastante gentil nos atendió en ese momento, nos otorgaron una mesa y fuimos a tomar asiento, comenzamos a leer el menú y Nana comenzó a hablar.
- Harry no te preocupes por la cuenta, yo pagaré todo, así que pide lo que tu quieras- Mis ojos se giraron hacia ella de manera ligera, no iba a permitirme eso.
- Yo me encargare de eso, no tienen que preocuparse ninguno por la cuenta; yo pagaré y no aceptare un no por respuesta- Nana y Harry voltearon al mismo tiempo, cuando deje de hablar Nana asintió riendo y Harry solo me sonrío.
Una vez terminamos de leer el menú, cada quien pidió un platillo diferente acompañado de bebidas; comenzamos a comer, era un momento bastante feliz y cómodo para mi, me sentía emocionada, alegre y entusiasmada, todo era algo mágico, hablando en el sentido muggle.
- Y bien, ahora que los tengo a ambos aquí y aprovechando que ambos están aquí, quiero que me digan que paso exactamente en la habitación del tercer piso y el por que se metieron en tantos problemas- Nana alzo su rostro ampliando sus regordetas y rosadas mejillas en una sonrisa mientras son observaba a Harry y a mi.
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The Moon. [draco malfoy y tu]
Fantasy-Me odiabas?- pregunto el chico de cabello gris con la mirada aun al frente. -Tal vez...- un silencio recorrió el lugar de golpe ante la respuesta de la chica a su lado. -Y por qué cambiaste de parecer?- La respuesta no era el claro, "del odio al am...