The Moon. [draco malfoy y tu]

#10

Abrí lentamente mis ojos, podía sentir un peso extra en mi cama; alguien me acompañaba; pude encontrarme con un chico de cabellos grises y su "pandilla", Malfoy estaba ahí conmigo; que rayos estaba pasando?.

- No puedo creer que tu padre te haya hecho traerle flores a una sucia mestiza que llego aquí como una persona importante- Hablo Pansy Parkinson quien estaba de pie al lado de Draco; ella estaba cruzada de brazos y con una mirada de irritación y odio al mismo tiempo.

- Mi padre y su padre se llevan bien; mi padre quiere mejorar ese lazo de amistad para sacar provecho; por eso estoy aquí; no por que ella me importe- Respondió Draco con sinceridad; me dolieron sus palabras; pero no entendía por que; tal vez por que en ese momento parecía un objeto para ellos.

- Tener amigos poderosos es bueno para nosotros, Pansy- Goyle tomo la palabra justo después de Draco; eran despiadados a la hora de hablar; eran bastante egoístas y estúpidos, mi corazón comenzaba a doler como si me dieran punzadas con agujas calientes y filosas.

- Ya vámonos, me aburre ver a una princesa inútil desmayada en su cama- Habló Pansy de nuevo mientras me tiraba un poco de agua encima, no reaccione a nada para que no supieran que lograba oírlos.- A ver si así por fin despierta la princesita!-

- Pansy no debiste hacer eso!, ella esta dormida; si Dumbledore se entera que la molestamos nos castigara a todos y nos quitara puntos para Slytherin - Exclamó Draco bastante molesto mientras se ponía de pie; Pansy lo ignoro con furia y camino hacia la puerta seguida de Goyle y Crabbe, Draco solo se giró para mirarme un poco, no se atrevió a secar el agua que Pansy había tirado; simplemente camino a la salida y se fue.

Una vez que me cerciore de que ya no estaban cerca; me levante de la cama y me senté sobre ella mirando mi atuendo mojado; mis ojos comenzaron a cristalizarse; odiaba que la gente como el grupo de Malfoy se sintieran más que otros; tenía días sin recibir una carta de nana o de mi padre; me preocupaba esa situación; no quería pensar que probablemente estaban enojados por cualquier cosa o que algo les había pasado.

Me sentía un poco mejor y con más fuerzas así que me puse de píe sosteniéndome de la cama; parecía que mis piernas aun no eran funcionales del todo; puesto que me hicieron caer directamente contra el suelo; ahora le sumaba a la lista, un morete que yo misma me había hecho, no paso mucho tiempo cuando Harry, Ron y Hermione entraron a la enfermería y me encontraron en el suelo; igual a una alfombra, mi mentón estaba pegado al suelo.

- ¡¡_____!! Que te paso?- Preguntó Ron mientras corría hacia mi y me ayudaba a ponerme de pie con ayuda de Harry; Hermione estaba preocupada, podía notarlo claramente en su mirada.

- Creí que mis piernas resistirían pero parece que no es así- Respondí mientras me apoyaba en los hombros de los chicos para después con su ayuda, sentarme en la cama nuevamente.

- En este estado; no dejaremos que nos acompañes _____, es peligroso para ti!- Agregó la castaña de cabello rizado mientras me miraba de brazos cruzados; dando dichas palabras como una orden y no como una opción.

- Hermione tiene razón _____, podrías salir más malherida- Dijo Harry mientras me miraba; simplemente negué con la cabeza y los mire con calma.

- Voy a ir con ustedes, estaré bien; no podrán hacer eso solos chicos, por favor; además, aunque se nieguen, iré con ustedes- Mis tres amigos solo se miraron entre si y soltaron un suspiro sabía que estaban preocupados, pero deseaba ayudar.

Eso me indicaba que estaban casi de acuerdo, me costaría convencerlos; sabía que la platica se repetiría de nuevo una o dos veces en el día; yo no podía salir de la enfermería hasta que me sintiera mejor y la enfermera lo permitiera, tuve que pasar la mañana en esa habitación; mis amigos estaban conmigo; comenzábamos a idear un plan para poder pasar las posibles trampas que se nos presentaran.

- _____, he leído que las hadas tienen diversas habilidades mágicas; tu has desarrollado algunas de ellas?- Me pregunto Hermione mientras se rascaba la mejilla estando sentada junto a Ron en la camilla frente a la mía.

- No lo creo... Mi padre se a negado a decirme esas habilidades, pero estoy segura de que las poseo así como mi madre- Respondí al comentario de la descendiente Granger mientras Harry sujetaba mi mano con una sonrisa dibujada en sus labios.

- Le pediré ayuda a mi madre con eso; mis padres me dijeron que conocen a tu papá _____ y a una mujer llamada Elena, que también es cercana a ti y además es una telepata, verdad?- Agrego Ronald a la platica mientras me miraba sentado al lado de Hermione, asentí con la cabeza y el me sonrío.

- Es mi Nana; como una tía para mi o como una madre; ella me cuido desde niña y si; creo que lo es, pero no estoy muy segura si sabe controlarlo por su cuenta o lee la mente rara vez- Respondí mientras miraba a los chicos con una pequeña sonrisa, a mi memoria llegaban recuerdos con melancolía, lady Bianca siempre fue la mujer más mala que conocí desde siempre; sus miradas de odio eran fuertes.

Parecía que lady Bianca me culpaba de lo que mi padre había hecho, me hacía sentir que era mi culpa haber nacido; aunque realmente no era así; crecí en una mentira en la que yo misma me menos preciaba por culpa de una mujer arrogante, egoísta y abusiva; sabía que Harry, Hermione y Ron preguntarían por aquellas heridas que tenía al principio del año, solo si es que Hermione les había contado; tarde o temprano debía decirles que pasaba pero no era el momento adecuado para hacerlo; prefería esperar un poco más así no correría mucho riesgo a que se enfadaran con lady Bianca y tomaran una mala imagen de mi padre.

Un par de minutos después, entraron dos de los mejores chicos que conocía, además de Harry y Ron claro; eran dos pelirrojos gemelos; Fred y George Weasley; ambos llevaban una caja de regalos llena de dulces y golosinas.

- Sabemos que nos extrañaste; tu rostro te delata- Habló Fred con un tono engreído y a su vez divertido mientras se acercaba a nosotros.

- Desde cuando te llevas bien con mis hermanos?- Preguntó Ron completamente confundido e intrigado.

- Cuando tu Harry y Hermione se iban y _____ no quería ir con ustedes; nosotros le hacíamos compañía; es una excelente jugadora de Quiddich- Respondió George sentándose en la cama justo en el espacio libre tras de mi.

 - Es verdad; deberían ver como monta una escoba, vuela a una velocidad increíble y tiene mucho equilibrio; tal vez pueda entrar al equipo de Quiddich, para la casa de Gryffindor si hablamos con Wood para que le haga un espacio- Dijo Fred acercándose a mi para sacudir mi cabello un poco.

Estaba realmente sonrojada por la pena; me sentía halagada pero era mucha emoción para contener; Harry y Ron se miraron uno al otro fijamente aun confundidos; Hermione no parecía tomar mucha importancia en ese momento, seguro pensaba en lo que llevaríamos a cabo esta noche.  

- Entonces _____, te agradan mis hermanos?, Porque?- Siguió cuestionando Ron mientras en su rostro se dibujaba una expresión graciosa de confusión.

- Somos guapos- Agregó George quien fue interrumpido por Fred al instante, iban a hacer que soltara una risa si continuaban.

- Y tenemos carisma- Sumó a la charla Fred Weasley con una sonrisa victoriosa, los mire y no pude resistirme.

Solté una pequeña risa; no era de hablar mucho pero sin duda alguna me divertía estar cerca de los gemelos Weasley; desde el principio del año me recibieron con mucho cariño y me hacían reír las veces en que me acompañaban a la biblioteca o andar por los patios de Hogwarts, ambos eran bastante graciosos y me hacían sentir igual de segura que Ronald Y Harry.

- Tenemos que irnos, esperamos que mejores pequeña Blyon- Dijo Fred caminando hacía la puerta de la enfermería.

- Los dulces son un obsequio, no los comas todos de golpe o te dolerá el estomago pequeña albina!- George dejo la caja con los regalos y golosinas en mis manos y después me guiño el ojo con una sonrisa amigable.

Ron me miro y sonreí ligeramente tomando una pequeña caja de chocolate para dársela; sabía que las golosinas se le habían antojado; a Hermione le di una pequeña caja de dulces de sabores y a Harry le di otro chocolate; todo era divertido y me sentía bastante cómoda y tranquila.

La enfermera entro a la habitación, me inspecciono y al darse cuenta de que ya estaba en mejor condición me dejo salir; caminaba a la par de mis tres amigos mientras sostenía la caja en mis manos; noté que Hermione seguía pensando así que me detuve y por inercia ellos se detuvieron igual un par de pasos al frente al darse cuenta que no los seguía. 

- Que pasa, _____?- Pregunto Harry mientras me miraba con aquellos ojos azulados claros llenos de calma, calidez y cariño.

- Hermione esta muy pensativa; quiere decir que no me permitirá acompañarlos a detener a Snape- Mencione y note como Hermione soltó un suspiro pesado; mi respuesta era correcta, había acertado.

- Estas herida; no podemos arriesgarnos a que te hagan daño de nuevo y te pase algo peor- Hablo la castaña mirándome; Ron y Harry lo entendieron y se pusieron de su lado; pero yo no iba a ceder tan fácil.

- Que tal y esta vez tardas más tiempo en despertar gracias a una herida?- Comentó el pelirrojo Weasley mientras su rostro tenía una expresión de preocupación de nuevo.

- Voy a ir con ustedes quieran o no, si nos hacen daño podremos protegernos mutuamente- Aclare la garganta y mis amigos se miraron entre si; había ganado esta "batalla" puesto que las miradas que me dieron eran de un rotundo si.

Caminamos a pasos rápidos a la sala común; para prepararnos y salir en la noche; una vez que todos durmieran, debíamos detener a el profesor Snape pasará lo que pasara; aunque en el fondo algo me decía que el no tenía mucho que ver pero Harry y los demás si tenían la certeza de que el era culpable; hicimos las actividades comunes del día esperando que la noche llegara para poder llevar a cabo nuestro plan, todo iba muy bien; las horas parecían pasar rápido y nadie parecía sospechar nada; hasta que por fin llego el anochecer; los cuatro nos preparamos para salir pasada la hora de dormir.