The Moon. [draco malfoy y tu]

#9

Había llegado a la academia; ya estaba de nuevo en mi habitación; Hermione, Ron y Harry estaban en el comedor; estudiando; pronto comenzarían los exámenes finales; y no quería fallar y hacer nulo el esfuerzo que lleve durante todo el año, me quede en mi habitación leyendo; iba a bajar en canto tuviera los libros necesarios para estudiar, una vez que tenía lo necesario baje las escaleras y camine hacía el comedor; pero no me encontré a los chicos por ningún lado; pero encontré a Neville Longbottom tirado en el suelo; parecía que un hechizo había salido mal; o que había sido hechizado; todos reían, así que me acerque a el dejando mis libros sobre la mesa y lo ayude a ponerse de pie.

- Quien te hizo esto Neville?- Pregunté mientras lo dejaba sentarse en las bancas de los comedores, ladee mi cabeza esperando a que respondiera.

- Draco Malfoy...- Murmuró muy ligeramente mientras miraba hacia la puerta del gran salón; solté un suspiro; parecía que la familia Malfoy era más negligente de lo que pensé, me había molestado un poco, pero mi expresión estaba neutra, fría.

Me puse de pie frente a Neville y tome mi varita diciendo el conjuro en voz alta; el contra hechizo había funcionado; Neville ya estaba mejor y pudo intentar ponerse de pie.

- Muchas gracias _____, lamento haber causado tantas molestias- Menciono el chico mientras me miraba algo apenado; para ser tan despistado y poco amenazante; era bastante tierno.

- No necesitas agradecer; dime, sabes donde están Ron, Hermione y Harry?- Pregunté tomando mis libros de nuevo, giré a ver a Neville quien ya estaba de pie sobándose el cuello.

- Creo que fueron a la biblioteca; los escuche hablar sobre información acerca e una de las cajas de ranas de chocolate- Me respondió mientras a mis espaldas escuchaba las risas de Draco Malfoy y sus segunderos; solté un suspiro y palmeé la cabeza de Neville.

Con mis libros en la mano; camine fuera del comedor; podía sentir la mirada de Draco encima de mi; me molestaba demasiado que fuese tan patán con el resto de los estudiantes, caminé a la biblioteca; mis tres amigos estaban sentados en una de las mesas leyendo un libro grande y viejo; me acerque a ellos y tomé asiento al lado de Hermione; quien leía, hablaban sobre una piedra que podía volver inmortal a quien bebiera del elipsis que se creaba con esta. 

- Inmortal?- Preguntó Ron interrumpiendo a Hermione; la castaña alzo la mirada y separo sus labios para responder.

- Que jamás mueres- Dijo ella provocando que Ron alzara la voz contra respondiendo.

- Lo se Hermione!- Contestó el pelirrojo, provocando que Harry soltara un "Shhhh" para que Ron bajara la voz.

- La única que existe en la actualidad pertenece al señor Nicolás Flamel, el gran alquimista, quien acaba de celebrar 665 años de vida- Dejó de leer y alzo la cara para seguir hablando.- Eso es lo que cuida Floffly en el tercer piso, es lo que tienen allá arriba; la piedra del hechicero-

Regresamos a clase; Hermione me hablo de todo lo que paso mientras no estuve presente; estuvimos ideando un plan para hablar con Hagrid por la noche; una vez que todos estuvieran dormidos; Harry, Hermione y Ron irían a buscar a Hagrid; yo debía ir al tercer piso a investigar la rutina del vigilante y velador, el señor Flich.

Esperamos de manera paciente durante algunas cuantas horas; el tiempo pasaba lento; y nosotros repasábamos el plan una y otra vez para averiguar lo que podría pasar,  llego por fin la hora en que pondríamos todo nuestro plan en marcha; Ron, Hermione, Harry y yo salimos de las habitaciones; los cuatro bajamos por las escaleras con mucho silencio; mis tres amigos salieron corriendo hacia casa de Hagrid; en tanto a mi; me dispuse a vigilar al señor Flish.

Estaba velando por los pasillos como era costumbre; su gata sería más un problema, parecía que había percibido mi aroma; Harry me otorgo su capa para poder pasar desapercibida; así que la use volviéndome invisible a los ojos de Flish.

- Paso algo preciosa?, hay alguien aquí?- Hablo Flish con la voz rasposa que siempre usaba; intentaba encontrarme con la mirada pero todo fue en vano.

Una vez que este se fue; corrí al tercer piso a inspeccionar el área; parecía que lo único que estorbaría en ese momento sería el perro de tres cabezas "Floffly", salí del tercer piso ya con una idea de que podríamos hacer; los chicos seguían afuera; cuando baje del tercer piso logre observar una silueta salir del castillo; unos cabellos blancos se dirigían hacia donde estaban los demás, sabía de quien se trataba; Malfoy metería en problemas a los chicos; salí corriendo de nuevo hacia donde estaban ellos aun cubriendo mi cuerpo con la capa; Malfoy miraba a través de la ventana; yo era un poco más bajita en estatura de lo que el era; así que no podía mirar con atención lo que pasaba; minutos después pude observar a Draco correr; los chicos estaban en problemas; mis tres amigos salieron corriendo tras de Malfoy; el señor Flish los había capturado ya, y tal parecía que los iba a llevar con la profesora Mc Gonagall, cuando me asegure de que no hubiese nadie cerca; entre en la choza de Hagrid; este se espanto un poco y me miro preocupado.

- _____!, que haces aquí?, te meterás en problemas- Habló mientras cerraba las cortinas de la choza para que nadie nos descubriera otra vez-

- Nadie me siguió a mi, me asegure de eso; Hagrid que paso? Que dijeron los chicos?- Pregunté con algo de preocupación; pero un pequeño sonido me distrajo de mis pensamientos; había un dragón andando a pequeños pasos hacía mi; enternecida lo acaricie y este pareció ronronear.

- Parece que le agradas- Menciono Hagrid y después me miro- Tu, Harry, Ron y Hermione deben tener mucho cuidado _____, no saben con lo que se están metiendo y es mejor que no escarben un pozo sin fondo, podrían salir heridos.- 

- ...- Guarde silencio por unos segundos, Hagrid tenía razón pero no podía abandonar a mis amigos en esto; no si ellos corrían peligro- No dejare a mis amigos, si algo malo les pasa no me lo podré perdonar!-

Hagrid me miro en silencio y soltó un suspiro; el señor Flish regreso a la cabaña; yo me cubrí para que no pudiera verme; tal parecía que Hagrid debería ayudar con el castigo de los chicos; pero menciono a cuatro personas; oh no, me habría descubierto?.

- _____, será mejor que vengas conmigo; no es seguro que te quedes aquí o que regreses sola a el castillo- Habló el semi-gigante mientras abría la puerta de la choza.

Flish se acerco escoltando a Ron, Hermione; Harry y... Draco? acaso a el bocón también lo habían amonestado?, estaba en silencio mientras me cubría; mis amigos sabían que estaba ahí, pero solo ellos y Hagrid lo sabía; Flish se fue; tal parecía que el castigo sería en el bosque prohibido.

Todos íbamos caminando siendo guiados por Hagrid; llevaba una linterna consigo y a su vez llevaba una ballesta; Draco parecía aterrado; así como Ronald, Frenamos en seco; Hagrid había encontrado un charco de un liquido semi espeso y plateado.

- Hagrid, que es eso?- Pregunto Harry bastante desorientado y confundido observando el charco.

- Lo que busco... Ven esto?, es sangre de unicornio, encontré uno muerto hace unas semanas; ahora, algo hirió gravemente a este- Guardo silencio y miro a Harry, ahora todos estaban aterrados; incluyéndome a mi.- Así que nuestro deber es buscar a la criatura, Ron, Hermione vengan conmigo!- Exclamó mirándolos, Ronald solo soltó un "ajá" con pánico. 

-Y Harry, tu iras con Malfoy- Malfoy estaba aterrado y disgustado, Hagrid giro hacia donde yo estaba; el podía sentirme; tome su mirada como un "quiero que los acompañes", así que eso haría.

-Ajá y quiero a Fangh!- Reprocho cual gallina mientras miraba a Hagrid.

- Bien, solo les diré que es un cobarde- Fangh, el perro de Hagrid solo gruño ligeramente con miedo; nos separamos, yo seguía a los chicos a una distancia razonable para que no notasen mi presencia; podía oír a Draco reprochar diciendo que acusaría a todos con su padre; vaya hijo de papi que había salido el semi albino.

- Si no te conociera Draco diría que tienes miedo.- Comento Harry, Draco negó estar asustado, un ruido llamo nuestra atención y caminamos hacía el; Harry parecía muy decidido, a los pocos minutos, Fangh nos guío a un lugar en el bosque, al llegar Fangh comenzó a gruñir como advertencia; frente a nosotros había algo; alimentándose de un unicornio, Harry pareció adolorido en ese momento; Malfoy y Fangh salieron corriendo despavoridos; la criatura comenzaba a caminar hacia Harry; yo no podía quedarme sin hacer nada; me quite la capa de enzima y me puse frente a Harry sacando una daga de mi ropa; la lance a la criatura haciéndole una herida; pero parecía estar dispuesta a atacarnos.

Seguía frente a Harry, mi corazón iba a salirse de mi pecho; estaba aterrada; abracé a Harry sin quitarme de enzima de él, el castaño me rodeo con sus brazos para abrazarme y una sombra cabrío un poco la luz, alguien había llegado a la ayuda, un centauro nos había salvado; Harry me ayudo a ponerme de pie y aun tomaba mi mano, nos acercamos a donde se encontraba el centauro y a su lado yacía el cuerpo del unicornio.

- Harry Potter, ____... Blyon, salgan de aquí, mucha criaturas los conocen, el bosque no es seguro en estos momentos, en especial para ustedes- Harry estaba impactado y yo aun seguía asustada.

- Que era esa criatura de la que me salvaste?- Pregunto Harry al centauro, estaba menos asustado, pero aun se veía realmente pálido.

- Una criatura monstruosa, matar un unicornio es un crimen atroz, beber su sangre te mantendrá vivo aun que estés al borde de la muerte; pero a un precio altísimo; se trata de algo tan puro que desde el momento que la sangre toca tus labios tendrás media vida, una maldición.- El centauro daba vueltas, yo estaba apunto de desmayarme; mi cuerpo estaba más que débil y mis ojos comenzaban a cerrarse, todo a mi alrededor se escuchaba poco.

No paso mucho tiempo cuando Hagrid; Ron, Hermione y Malfoy llegaron donde estábamos nosotros; Hagrid saludo al centauro; su nombre ya había sido revelado "Firenze", yo no tenía fuerzas; Harry me tomaba la mano y parecía saber que no me encontraba bien; Malfoy me miraba sorprendido; parecía que no se había dado cuenta de que yo estaba aquí; Firenze se fue no resistí mucho y caí desmayada; de repente todo se volvió oscuro; mis ojos no podían abrirse pero sentía como era llevada a la enfermería; la voz de la profesora Mc Gonagall se hizo presente.

- Su padre había mencionado que tenía sonambulismo, pero no creí que fuera a escala tan grave- Menciono la profesora; tal parecía que todos creían que era un ataque de sonambulismo lo que me paso.

- Fue mi culpa, no noté que nos estaba siguiendo en ningún momento, profesora- Hagrid intento excusarse; las puertas de la enfermería se abrieron; y unos pasos se acercaron a nosotros quedando al lado de mi camilla.

- No fue tu culpa, Hagrid; tal parece que la señorita Blyon tiene un sexto sentido; y de no ser por ella; el señor Potter habría salido lastimado o peor- La voz de la persona que hablaba era del profesor Dumbledore, parecía bastante tranquilo pese a todo lo que paso.

- Fue valiente aun en su subconsciente, pero también fue muy riesgoso!- Respondió Mc Gonagall, el profesor Dumbledore solo se dedico a soltar un "Shhh" muy corto, Hagrid estaba acariciando mi cabello en ese momento.

- Sera mejor que dejemos descansar a la señorita Blyon en este momento- Agregó el director de la academia mientras salía de la enfermería seguido por Hagrid y la profesora Mc Gonagall; aun tenía pocas fuerzas así que me quede profundamente dormida hasta la mañana siguiente.