Mi princesa (Louis Tomlinson y tu)

Len ¿Irías conmigo a Paris?

Narra Louis

Me encontraba en mi habitación duchándome, cuando termine lo único que alcance a ponerme fue el pantalón, ya que escuche ruidos raros provenientes del otro lado de la puerta del baño. Salí sigilosamente, heche una pequeña mirada y no se veía nada extraño, debajo de la cama se escucho un grito pequeño, rápido me agache y mire a la intrusa, nada mas ni nada menos que Trina.

Louis: ¿Que haces aquí? -Le pregunte confundió por la situación- Contesta

Trina: Estoy buscando mi colorete rojo -Dijo en susurro

Louis: ¿Porque motivo estaría aquí? -Pregunte obvio

Trina: Cállate -Dicho esto salió de debajo de mi cama y pude observar su vestuario. Traía puesto una falda negra demasiado corta y una blusa del mismo color de tirantes corta, se le veía prácticamente todo.

Louis: ¿Que haces vestida así? -Pregunte haciéndole una mueca, ella se acercó a un espejo

Trina: Saldré a una fiesta -Sonrío divertida- Ven conmigo -Dijo seductora mente

Louis: No no no -Negué rápidamente- De seguro te iras a emborrachar y eso lo tienes prohibido

Trina: Louis por favor -Bufo - Solo será una fiesta -Le saco la tapa al colorete y comenzó a pintarse los labios, yo rápidamente me acerque y se lo arranque de las manos haciendo que ella se desviara de su boca y se manchara toda- ¡Mira como me dejaste! -Dijo molesta como niña pequeña, bruscamente con su mano trato de quitarse la mancha haciendo que sus labios ahora quedaran rojo despintados- Devuélveme mi colorete- Ordenó, yo negué- Louis te juro que si no me lo devuelves, no te gustara lo que haré -Dijo amenazante

Louis: Trata de quitármelo -Comencé a correr por toda la habitación, ella saco una corbata negra y una azul de uno de mis cajones y comenzó a perseguirme- ¿Que se supone que harás con eso? -Dije brincando en mi cama con el colorete en la mano.

Trina: Louis si no me lo devuelves te ira muy mal -Dijo roja del enojo- Hazlo ahora -Dijo colocando su mano mientras esperaba a recibir lo que quería, yo me senté frente a ella.

Louis: No Lo Haré -Dije pausando las palabras

Trina: Tu te lo buscaste -Sonrío picara, yo la mire con el ceño fruncido- Me odiaras por esto -Al decir esto se abalanzó sobre mi cubriendo mis ojos con la corbata negra.

Louis: ¿Trina que haces? -Pregunte volteando mi cabeza para todos lados

Trina: Tranquilo, solo será un pequeño castigo -Susurro en mi oído seductora mente

Louis: Trina no hagas nada indebido -Dije mientras sentía como amarraba mis muñecas una con la otra.

Trina me empujo cayendo acostado en la cama, sentí que se subía encima mío y comenzaba a embarrar una cosa rara en mis labios y en su alrededor, imagine que era el colorete por su olor a avellanas, así olía el cuarto de Lima siempre.

Louis: ¡Trina basta! -Dije moviendo de un lado a otro mi cabeza tratando de que ya no me embarrara la cosa esa- ¡Trina esto es asqueroso! -Dije apretando mis labios

Trina: Eso te mereces por mancharme -Sentí como su brazo rozaba con mis labios limpiando estos- Lo malo es que este colorete es demasiado difícil de quitar -Dijo fingiendo tristeza y luego hecho pequeñas carcajadas.
Como pude me zafe de la corbata azul que unía mis muñecas y luego baje hasta mi cuello la corbata negra que traía en mis ojos, me mire en un espejo, mis labios estaban igual o peor de rojos despintados que los de ella, la mire furioso, esta me miro retadora, quebró su labial y un pequeño cacho lo embarro en sus manos, haciendo que estas quedaran rojas de pintura, luego me aventó lo que sobrara de este, definitivamente esta chica quería guerra, yo hice lo mismo con otro cacho, ella se volvió a abalanzar sobre mi haciendo que calle Ramos al suelo, comenzó a esparcir el colorete de sus manos en mi pecho desnudo y yo comencé a embarrarlo en su blusa.
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