Mi princesa (Louis Tomlinson y tu)

Boda de Trina

Narras tu.

Ya han pasado dos semanas desde la pedida de mano.

Y si, fue perfecta ante mis ojos.

Absolutamente todo el mundo se enteró de mi compromiso de matrimonio. No tardaron en llegar solicitudes de entrevistas y algunos regalos por parte de mi familia más cercana.

Y hoy, hoy estoy en Timland, donde los padres de Len son los gobernantes de esta pequeña pero acogedora isla.

Trina: ¿Creen que me veo bien? -Preguntó viéndose una y otra vez en el espejo de una de las bonitas habitaciones. Se veía excelente.

Takia: Te vez bien, deja de molestar. -rodó los ojos.

Sra. Gollu: Takia -miró con desaprobación a su hija mayor- Te vez preciosa, mi amor- le sonrió a su otra hija.

Trina: Gracias mamá -Suspiró aliviada- En unas horas seré la esposa del gran amor de mi vida -sus ojos comenzaron a llenarse de lagrimas.

Takia: No llores tonta -corrió rápido hacia ella y comenzó a hacerle aire con sus manos- Arruinarás el maquillaje y no fue nada barato-.

___: ¿Tú no querías llorar cuando te casaste Takia?

Takia: ¡Claro que no! -Exclamó- Estaba tan ocupada disfrutando del momento que lo peor que pudiera hacer era perder tiempo poniéndome a llorar por el maravilloso futuro que me esperaba a lado de mi ahora marido.

___: Si tienes razón -sonreí- el día de tu boda debe de ser el más especial.

Takia: Pronto sabrás que así será -me guiñó un ojo.
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El templo religioso estaba repleto de personas amigos de ambas familias, personas importantes de todo el mundo estaban por presenciar el nuevo matrimonio real.

Los chicos de la orquesta comenzaron a tocar dando por iniciada la celebración.

Len estaba impaciente esperando a su futura esposa.

Cuando Trina comenzó a caminar hacia el altar todos la mirábamos felices, nunca nadie creía que la pequeña princesa rebelde de Rolliun algún día lograría comprometerse y mucho menos con un joven tan distinguido y sereno como el futuro gobernante de Timland.

George: El tío Len ya está llorando -anunció el pequeño haciendo que lo volteara a ver, y efectivamente, él lloraba al ver a la mujer de su vida a unos pasos de ser su esposa-.

Luke: Llora de felicidad, campeón.

Al llegar al altar, el padre de Trina le dijo algunas palabras a Len, concluyendo con un beso en la frente de su hija y un abrazo para su ahora yerno.

Y así comenzó la celebración religiosa, todo parecía tan perfecto, tan especial.

Y pensar que hace apenas unos meses yo estaba tan celosa de Trina por verla tan cercana a Louis.

Pero estaba totalmente equivocada, y no entiendo cómo es que jamás me di cuenta cuando era todo tan obvio.

En el internado Trina únicamente respetaba a Len, mientras que con todos los demás se llevaba muy "pesado" por así decirlo.
Trina jamás salía a ninguna parte con ningún chico que no fuera con Len.
Y él era tan diferente con ella, siempre trataba de consentirla, cambiaba algunas de sus actividades para compartir otras con Trina.

Y yo fui tan ciega, tan metida en mis propios asuntos que jamás logre prestarles atención todos estos años en ese aspecto.

Louis: ¿En qué piensas? -susurró-.

___: Pensaba en ellos dos -los mire- estoy tan feliz de verlos juntos.

Louis: También estoy muy feliz por ellos -entrelazó nuestros dedos- tenemos mucho que agradecerles a ambos.

Padre: Len, puedes besar a la novia.

Y seguido de eso millones de aplausos se hicieron escuchar, la orquesta comenzó a tocar y Len concluyó con un tierno y delicado beso a mi querida mejor amiga.

George, Josh y Tor corrieron rápido con las pequeñas canastas lanzando pétalos de rosas rojas.
Al salir del templo soltaron cientos de globos blancos y negros, el pueblo estaba feliz por ver a su sucesor contraer matrimonio con una de las hijas de una de las familias más poderosas de este ambiente.

Luego la fiesta se celebró en el palacio, la decoración era divina.

Len: ¡___, Louis vengan a tomarse una foto con nosotros!

Yo me coloqué a lado de Len y Louis a lado de Trina.

___: Muchas felicidades, chicos. -los abrace como si llevara años sin verlos- los amo tanto.

Trina: y nosotros a ti -comenzó a llorar- no me importa lo que diga Takia sobre llorar el día de mi boda, estoy feliz y nada me importa.

___: -solté una pequeña risa- sigan tomándose fotos, disfruten de su gran celebración -tomé la mano de Louis y caminamos hacia donde se encontraba papá con mis tíos los padres de Nina.

Papá: hija me gustaría hablar contigo -me miró sonriente- ¿me acompañas?

___: Claro -mire a Louis- en un segundo regreso -él asistió depositando un beso en mis labios.-

Caminamos hacia el jardín del lugar, toda la gente estaba en el salón así que podríamos platicar más cómodamente.

Padre: Tenía años sin venir a Timland -tomó asiento en una de las bancas que se encontraba justo debajo de un gran árbol- Tu mamá y yo estábamos recién casados cuando venimos por última vez.

___: Supongo que es difícil para ti estar aquí ahora -lo mire- extrañas a mamá ¿verdad?

Papá: Por siempre la voy a extrañar, tú madre es una de las tres mujeres más importantes en toda mi existencia.

___: ¿tres mujeres? -mis ojos se abrieron indicando alerta.-

Papá: Claro, tú y mi madre son esas otras dos mujeres más importantes en mi vida. -sonrió acariciando mi mejilla- Hoy cuando Trina y su padre entraban por la iglesia me imagine el momento en que tú y yo estemos caminando hasta el altar para dejarte ir a lado de Louis. Será tan especial para ustedes dos, que estoy seguro que tú mamá estaría diciéndote lo mismo en estos momentos.

___: Te amo tanto papá -lo abrace- y estoy segura de que mamá esta muy orgullosa de ti por ser el hombre fuerte que eres ahora, por ser un excelente abuelo, el mejor consejero, un gran rey y sobre todo el mejor papá del mundo.

Papá: Te amo, cariño.
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Y qué decir de la fiesta, fue tan Trina en todos los sentidos.

La comida estaba deliciosa, la música era tan diferente a la que estábamos acostumbrados a escuchar, todo el mundo se divertía como nunca antes había visto en una fiesta real, mucho menos en algo tan serio como una boda.

Y eso fue lo que hizo que todo el mundo notara el amor tan especial entre Len y Trina.