The end...

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SE ME SIENTAN PORQUE ESTA MIERDA TIENE 2888 PALABRAS...

8 meses después...

Mei se encontraba feliz ese día, con su juguete en manos, moviendo este de arriba a abajo mientras soltaba risitas al escuchar el sonido que hacía. Tener a una bebe que toca y se lleva todo a la boca era realmente preocupante y a la vez tierno, por ejemplo... una vez se llevó un paquetito de condón a sus labios finos, otra vez se llevó un zapato a la boca. Llegaron a la conclusión de que necesitaban un juguete para ella, si, otro más, y así llegamos hasta aquí.

—MamAa —la pequeña rubia estiro sus manitos hacia su mamá apenas la vio —ugmh! MaMA

Emma le sonrió dejando de lado lo que estuviera haciendo; la levanto con cuidado del corralito en donde estaba, la coloco entre sus brazos, sostuvo su espalda con ya bastante experiencia, después de pasar meses con su hija ya había desarrollado un instinto maternal, aunque... ya tenía un instinto maternal que desarrollo cuidando a sus hermanos, preocupándose por ellos, alimentándoles, y ayudándolos en lo que ella pudiera.

La rubia se recostó un minuto dejando al bebe entre sus piernas en lo que ella se recogía el cabello, la pequeña niña buscaba apresuradamente el pecho de su madre, movía sus manos apresuradamente mientras babeaba buscando alimento. La joven madre levantó su blusa y bajo el sostén dejando libre a mei para que pudiera comer, inmediatamente se abalanzó desesperada por comer algo, Emma jadeo de dolor al sentir como su hija succionaba su pezón.

—M-mei... cariño duele...—suspiro acomodando al bebe— nadie te va a alejar de mama...

La pequeña bebe succionaba con fuerza a la vez, qué movía sus manos hacia ambos lados, fue cerrando los ojos poco a poco, dejando de succionar una vez callo dormida. Emma soltó una risita, se levantó junto con su hija, la recostó a su lado poniendo unas almohadas para que no se llegue a caer.

— Mei, deja de crecer...— la rubia tomo la mano de su hija besándola con cuidado mientras se pegaba a su pequeño cuerpo, dejando algo de espacio para un osito que siempre dormía con mei—

...

draken llego dejando sus cosas en la mesa del comedor, se dirigió hacia su habitación, siendo recibido con la bella imagen de su novia y su hija, no pudo evitar que se le saliera una risita, camino lentamente en su dirección con una sonrisa, se recostó en la cama abrazando a su pareja, beso su mejilla y luego la de su hija cerrando los ojos para poder dormir.

Mei, 1 año...

Mei usaba un vestido rosa pálido con detalles de flores blancas y rosa pastel, unos zapatos blancos que hacían juego con el vestido. Sus pestañas rubias estaban mojadas de tanto llorar y sus manitas raspadas por caer, pues, mei aprendió a gatear hace algunos meses, por lo que sus manitos se golpeaban a menudo.

— paPi..— la pequeña lloraba mientras su padre curaba una pequeña herida de su mano— duelw mmhg...

draken sostenía la manito de su hija, por otro lado, izana curaba sus heridas con un pequeño algodón. La niña se aferraba con la mano libre a su padre. El peliblanco trataba de ser lo más cuidadoso posible, pero, después de todo, era una niña y le dolía con tan solo rosar la herida.

— ya.. Ya mocosa, te enseñaremos a caminar —izana hablo, noto la confusión en el rostro de su sobrina— caminar, ya te sabes parar, no será difícil...

Estas palabras solamente aumentaron la duda de mei, se llevó el dedo a la boca y miro a su tío extrañada.

— cA..mi.. wares!

— eso, caminar... ¿dijiste eso, verdad? —izana la miro confundido. La tomo de las piernas de draken y la bajo. La mantuvo de pie sin soltarla para que no sé callera.—

Un Bebé..? (emma x draken)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora