Among Us

Aquí

Abrió suavemente los ojos. No podía pensar en otra cosa más que en el dolor de cabeza que sentía. Le tomó un minuto entero para notarlo, notar que no podía moverse. El pánico le invadió un momento, pero siempre pensaba antes de actuar. Miró detrás suya, pudo ver que ni siquiera se habían dignado en ponerle una cuerda en buen estado; Como si la silla que rechinaba no fuera suficiente. Lo bueno: La habitación no estaba oscura, lo que le permitió ver a esas tres personas en el centro del cuarto, discutiendo.

-Sí, pero no podemos tenerlo aquí para siempre- Comentó la única chica ahí- Tenemos que decirle al jefe para que nos diga qué hacemos con él

-El jefe está muy ocupado, dudo que le importe- - Respondió el chico de antes- No sabemos qué tanto ha visto o por qué entró aquí-

-¿Creen que sea un espía? ¿Creen que ya nos hayan descubierto?- Dijo otro chico con miedo.

-Por favor, Ryan, de ser así habrían mandado un helicóptero entero, recuerda nuestra mala fama-

-¿Tú qué crees, Angie?-

-Creo que ya se despertó-

Los tres miraron a Henry, y el encogió los hombros.

-Eh... ¿Hola?

El sujeto que lo golpeó se acercó a él.

-¿Se te perdió algo?-

-Creo... ¿Que no?-

-Entonces dime qué diablos haces aquí-

-No, invoco la quinta-

Los tres tipos se miraron. La chica se acercó a él.

-¿Quién te mandó?-

-Bueno... Nadie-

-... Es un espía-

-Nonono, en serio, nadie-

-Entonces, ¿Qué querías hacer con tus grabaciones? - Preguntó el tipo

-¿Cómo entraron a mi teléfono? ¿Son acaso un grupo de superhakers? Chaos IPhone club? ¿Milguorm? ¿O acaso los incógnitus?-

-Tu contraseña es contraseña-

-Oup-

-¿Y bien?-

-Vale, lo siento. No quería infiltrarme a su base subterránea mega secreta, digo, sí quería, pero no, es decir, no queríasóloqueríaquelabasequequeríanquenoeraque...-

-¡De acuerdo, basta!-

-¿Puedo irme?-

-Danos una buena razón para dejarte-

-De acuerdo, yo... ¿Qué hace Matt Groening aquí?-

Los tres voltearon a donde Henry miró.

-Hey, ahí no hay... ¡Ey!- Al mirar, Henry había dejado solamente la cuerda de antes.

-¡Mierda, mierda, mierda!- Decía, mientras corría por esos pasillos, evitando chocarse con alguien. Rápidamente se dio vuelta, y entró sin dudarlo al baño de hombres. Ahí, evitando tropezarse con un condón en el suelo, entró a uno de los cubículos. Sacó su teléfono. –Diablos, tengo que decirle a la policía... Espera... ¿Y si esto es parte del gobierno? Me matarían sin dudarlo. Dios... ¡Simu! Nah, no sabe kun fú, es un fracaso de asiático... Emmm...-

Ethan tomó su teléfono.

-¿Hola?-

-¡Ethan! Me alegra oírte, ¿Qué tal van las cosas?-

-Te escuchas agitado, ¿Todo bien?-

Henry estaba corriendo, mirando detrás de él a los tres tipos de antes.

-Sí, sí, todo bien, ¡Salvo que necesito que vengas por mí lo antes posible!-

Un hombre, viendo a Henry, supo por sentido común que no debería estar ahí, por lo que se abalanzó a él. Henry cruzó sus piernas con la de él y lo hizo tropezar para poder seguir huyendo.

-¿Dónde estás?-

-Sí, emmm, estoy...-

-¿Bien?...-

-E-es complicado. Estoy debajo... de una colina, supongo?-

Henry observó detrás de él, ahora era una pequeña multitud la que lo estaba siguiendo, y las personas de delante trataban de atraparlo.

-Espera... ¿Qué?-

-Dios, ¿Podrías rastrear mi llamada o algo, yo...-

-¿Dónde dijiste que estás?-

-¡Por amor a Dios!, dije que estoy...-

Henry dobló una esquina y chocó, chocó con otro hombre. Ethan cayó al suelo, y Henry terminó encima de él. Ambos se vieron a los ojos. Henry, con el teléfono aún en el oído, le respondió.

-... Aquí-