Las Despedidas

22 0 0
                                    

Henry se encontraba en el mercado a sólo dos días de iniciar la misión. Darcy lo acompañaba como era de costumbre. Tras atender unas personas Henry habló.

-Ey Darcy... Es posible que no nos veamos durante unos días-

-Ah, ¿Sí?- Darcy usaba su teléfono- De acuerdo, ¿Puedo preguntar por qué?-

-Uuuuuna entrevista, tendré una entrevista en... Arizona, sí-

-Wow, ¿En serio?-

-Sí, sí, no me la puedo perder-

-De acuerdo, ¿Y cuantos días estarás afuera?-

Henry en realidad ni siquiera sabía este dato.

-Muchos, muchos, puede que muchos, y también puede que no responda llamadas-

-Bueno, suerte-


Al estaba junto a su abuela en casa. Toda su familia conocía sobre el lugar, pero ninguno estaba listo para la noticia que él les diría.

-Mijo, por favor, ¿Te irás así nomás?-

-Es para lo que me he preparado todos estos años, abuelita-

-Pero sí regresarás pronto, ¿No?- Le preguntó su primo.

-Puede que no muy pronto, pero regresaré lo antes posible-


Wendy estaba manejando manejando, yendo a la casa de sus padres. En el camino ella ya estaba pensando en la excusa que diría sobre salir del país unos meses, tenía todo calculado para que ellos no la molestaran. De todas formas tampoco tenía la mejor relación con ellos, le dolería más dejar a su perrito que a sus padres.


La que peor la tuvo fue Sarah. Ella se encontraba frente a esa casa. Tomó aire y tocó la puerta. Antes de irse sí o sí tenía que verla a ella, su hija. Había pasado buen tiempo sin visitarla, y es que su marido le había advertido sobre volver a la casa; ella lo había cumplido todos esos años, pero esta vez debía hacer una excepción.


-¿Qué tú vas a qué?- Preguntó Simon sentado en el sofá.

-Eso, que me voy al espacio-

-Es una locura, hermano. ¿Qué harás si te faltas pasti...-

Simon se calló cuando Tom le mostró esa bolsa enorme llenas de pastillas.

-¿De dónde sacaste eso?-

-No es importante. El punto es que no volveré en mucho tiempo-

-¿Cuánto, cuantos días te irás?-

-No lo sé, ¿Ok? Quizá hasta unos meses-

Simon lo pensó un momento, no le agradaba la idea, pero le daría vergüenza decirle la verdad, por lo que sólo suspiró y le dijo

-Pues más te vale regresar con vida, perra-


Ethan no la tuvo muy difícil, sólo se despidió de algunos amigos y poco más. Él ya no tenía familiares cercanos, todos se fueron durante el ataque de hace años. Sólo estaba en su dormitorio viendo televisión, mandando mensaje a sus conocidos.


Ryan sí que la tuvo más difícil.

-No, no te puedes ir- Le dijo su hermana que seguía recuperándose.

-Lo siento, pero tengo que ir-

-¿Y qué pasará conmigo?

-Emma, ya no eres una niña pequeña, yo confío en que estarás bien sola. Te prometo que será un tiempo nomás, volveré antes de que te des cuenta-

Emma miró al suelo y asintió. Ryan le dio un abrazo.


 Louis al igual que Ethan no le quedaban muchos familiares cercanos, y al igual que Wendy, tampoco era muy cercano a ellos, por los que una llamada bastó para despedirse.


Angie sí que tuvo que despedirse de más amigos, aunque tampoco le tomó mucho tiempo. 


Alex sólo fue otro sin importancia.


Así fue, hasta que llegó el día del despegue. A todos se les había citado a las cuatro de la mañana, lo que fue una tortura para la mayoría, salvo Ryan, Louis, Ethan, y Sarah, que ya estaban acostumbrados a ello. Henry bajó de su piso, y encontró a Wendy con saliendo de su puerta.

-Así que es hoy- Dijo él. Wendy le sonrió.

-No sé cómo deberíamos sentirnos-

-Entonces hay que descubrirlo-

Los dos bajaron y salieron del edificio.

-Entonces, ¿Tomarás el autobús?- Le preguntó ella.

-No, no creo que los autobuses estén activos a las dos de la mañana. Quizá tome un taxi-

-¿Los taxis son veinti cuatro horas?-

-No lo sé, ¿Lo son?-

-Sabes, creo que es más fácil si te llevo yo-

-Oh, cómo lo agradezco-

Y así los dos fueron en camino por la calle oscura en la madrugada.

-Oye- Inició Wendy.

-¿Sí?-

-¿Cómo descubriste el sitio?-

-¿Qué cómo qué?-

-¿Cómo lo encontraste? Se supone que era el mejor escondite en décadas-

-Oh... Ya sabes, tengo mis métodos- Henry sudó un poco.

Los dos llegaron a la entrada. 

-Oh, déjame hacerlo a mí- Dijo Henry, sacando su brazalete y usándolo para entrar; aun le encantaba hacerlo. En el estacionamiento se encontraban los demás, salvo Sarah. Todos se reunieron para ir juntos a la sala principal.

-No puedo creer que esto por fin esté pasando- Dijo Ryan

-Lo sé, parece un sueño- Le contestó Al.

Henry con cada paso se veía más y más temeroso, lo que era normal, pues es el que menos experiencia tenía de allí. Ethan se puso al lado de él.

-Viejo, todo estará bien-

-¿Estás seguro?- 

-No, desearía estar seguro-

-Eres el peor motivando a la gente-

Ethan y parte del equipo se rio. Llegaron a la puerta de entrada.

-A todo esto, ¿Dónde está Sarah?- Preguntó Wendy.

-No debe tardar en venir- Le contestó Ethan. 

Ryan tomó aire, dio un paso al frente y abrió la puerta.

Among UsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora