Proyecto Rebirth 2: La Cruzada de Los Niños || Romanogers

14. Especular

Disclaimer: Los Vengadores no me pertenecen, son de Disney y de Marvel, solo la historia y los personajes que no reconozcan, me pertenecen. 

NOTA: Negritas en ruso. 

Para ladyevans_romanogers 

Al tiempo que Niko y Allysson discutían las razones de Julianne para buscar al Capitán América, los Vengadores se encontraban con Sasha. La pequeña niña estaba en la cama de su habitación, con su familia junto. Habían decidido que lo mejor era tenerla en ese lugar, porque confiaban que sería mejor para ella despertar en un ambiente conocido.

—¿Seguro que no podemos hacer nada más?—preguntó Visión, viendo a la niña.

Wanda se cubría el rostro con ambas manos, sintiendo las lágrimas correr en sus mejillas; no podía creer que todo aquello estuviese pasando. Eran una familia tranquila, hasta que esa mujer había llegado a joderlos, ¿qué demonios quería con su hija? Las preguntas no dejaban de arremolinarse en su mente hasta que escuchó un pequeño ruido proveniente de la cama. Alzó la vista, pero los gemelos se habían acercado primero.

—¿Sasha?—la voz de Billy tenía un tinte de desesperación que no podía evitarlo, intentaba mantenerse fuerte pero ver a su hermana consumirse de esa manera lo destrozaba—Sasha, hermanita, despierta, por favor...

—Déjala estar, Billy—pidió Tommy—Ella va a abrir los ojos por sí misma, yo estoy seguro de eso.

Pero era en ese momento parecía inútil tener esperanza, la niña no despertaba. Aunque Bruce y la doctor Cho habían hecho análisis, nada parecía mal con ella. Steve le puso una mano en el hombro a Wanda, tratando de consolarla.

—Encontraremos a quien hizo esto y recibirá su castigo—prometió el hombre.

La Bruja Escarlata no dijo nada; ella buscaría por sí misma a esa mujer. No conocía mucho de hechicería o de otros tipos de magia, pero estudiaría lo que fuera necesario para que nadie se metiera en la mente de su hija de nuevo.

—Claro que lo haremos—dijo Natasha—Esto no puede pasar.

—¿Qué más podemos hacer?—cuestionó Tony—Esa hechicera no burló la seguridad, la usó para entrar. Ahora misma el único recurso para ayudarnos es la hija de Thor, esa niña sabe bastante del tema, pero no la hemos tratado precisamente bien...

—¿Y Thor?—preguntó Steve—¿No hemos sabido nada de él?

Steve negó con la cabeza, cada vez más preocupado.

—No sé que seguirá, pero creo que Tony tenía razón al decir que los chicos están más en riesgo juntos que separados—dijo con tristeza—Cecilie y Morgan no subirán los estragos de lo que ha ocurrido hoy.

—¿Qué propones hacer, tío?—preguntó Tommy—Yo no quiero separarme de mi hermana y dudo que Niko quiera irse.

El soldado suspiró, apesumbrado; aún no podía entender del todo la situación en la que se encontraba con su hijo, aunque sabía que ya estaba en la edad de permitir que lo enviaran lejos como cuando era pequeño y sus padres debían irse a misiones.

—Hablaré con Nikolay—concedió Steve—Pero la mejor forma de trabajar para nosotros será si ustedes están lejos de la línea de fuego.

—¿Y qué pasará con mi hermana?—quiso saber Billy—Mientras no despierte.

—No dejaremos que le pase nada...—prometió Natasha.

Mientras la Viuda Negra hablaba, se escuchó un suave tintineo de campanas; seguido del parpadeo de las luces en la habitación, señalando a Sasha. Todos abrieron mucho los ojos cuando vieron a Sasha levantarse suavemente de la cama, rodeada de su magia color morado.