::Frozen Heart ❄ KookV::

C-35

—Bien, no puedo seguir posponiendo más eso —Suspiro viendo el sobre sobre la mesa, tomando el sobre lo abrió y sacar aquel papel, desdoblándolo, noto aquella conocida letra escita con pluma azul.

JungKook... Hijo, hay tantas cosas que quisiera decirte, y no creo que el tiempo me alcance para escribir todos mis pensamientos... Quiero hacerlo rápido... antes de perder la conciencia otra vez. Desde que desperté en el bosque, perdido y desorientado, mi cordura viene y se va por días sin que lo pueda controlar así que. Quisiera que me perdones por mantenerme alejado de ti... No quiero hacerte daño.

Suspirando, JungKook rasco su nuca "Entonces no recuerda lo que paso" Pensó mordiendo su labio... Tampoco quería a que se enterara de eso. Haciendo un pequeño puchero volvió a ver la página.

Aun me pesa en la mente la manera en la que nos separamos. Pero, aunque estábamos mal en ese momento. Quisiera decirte como me siento por ti, y quiero hacerlo, aunque ya sea demasiado tarde, pero no quiero seguir arrepintiéndome por guardar tanto tiempo lo que llevo dentro de mi corazón, por culpa de mi carente habilidad para expresar mis sentimientos

Aunque no lo hacía con tanta frecuencia como debería... Quiero decirte que te amo.

Que te quiero demasiado, y siento mucho amor por ti.

Que vivo orgulloso de ti desde la primera vez que te tuve en mis brazos.

No te cambiaria por nadie en el mundo, y aun si pudiera pedir un deseo, seria poder volver a ser tu padre de nuevo.

Hoy solo quiero darte las gracias por todo lo que me disté y me hiciste aprender, sé que tuve mis carencias y que no fui el mejor padre que deberías haber tenido.

Gracias por haber nacido, y permitirme verte crecer, y aunque pasan los años y dejaste de ser aquel niñito que siempre corría tras de mi... Para mí lo sigues siendo.

Te extraño. Te extraño que duele.

Quiero verte reír... o haciendo un berrinche, no me importa. Solo quiero sentirte cerca al menos.

Pero es mejor así. Sin que pueda hacerte daño, jamás me lo perdonaría... Lo único que quiero es que puedas vivir bien, aunque ya no pueda acompañarte el resto del camino, tengo la seguridad que lo harás bien.

Notando sus lágrimas caer sobre el papel, JungKook se rompió al fin, comenzando a llorar, sintiendo un fuerte dolor en el pecho —¿Por qué eres tan cruel? —Se quejo tapando su rostro, llorando desconsolado —Diciendo todo esto sin darme la oportunidad de responder. 

Dejándose llorar libremente, JungKook toco su pecho, llorando como no lo había hecho desde que era un niño. Y aunque lo minutos pasaron, apenas pudo controlarse, hipando por el llanto, y con un fuerte dolor de cabeza.

Secándose las lágrimas, suspiro antes de tomar las cosas de su padre e ir hacia la puerta, saliendo vio a TaeHyung sentadito en el suelo frente a la puerta con su espalda apoyada contra la pared. Por el agotamiento de su cuerpo, el omega se había quedado dormido, temblando ligeramente.

Contemplándolo suspiro, por su culpa estaba ahí esperando en lugar de su cómoda cama —Tae, despierta —Dijo JungKook al agacharse a su lado, abriendo los ojos, el omega parpadeo un par de beses antes de enfocarse en el rostro del alfa, notando sus ojos hinchados y enrojecidos al igual que su nariz.

—¿Te sientes bien? —Pregunta acunándole las mejillas y JungKook apoyara más su cabeza en sus manos.

—No... Esto triste —Murmuro y el omega lo acercara dándole un abrazo.

—Si quieres puedes llorar más.

—Después, primero debo llevare a un lugar calentito —Dijo dejando sus cosas en el regazo del omega y levantarlo, sorprendiendo al castaño que sujeto las cosas para que no cayeran.

—JungKook, tus brazos aun duelen.

—Solo es un dolor superficial, tú puedes entrar en hipotermia si no te cuidas, volveremos, si te llevo así será más rápido.

—No necesitas sobre esforzarte tanto —Negó TaeHyung.

—Solo déjame cuidarte —Murmuro caminando —No puedo hace nada más para ayudarte —Haciendo un pequeño puchero TaeHyung lo observo, alzando su mano le acuno la mejilla haciendo que volteara un poco y besarlo en los labios.

—Gracias, cariño —Sonrió con timidez y las mejillas de JungKook se sonrojarán por completo.

—¿Como me llamaste? —Pregunta sonriendo de oreja a oreja. Pensó que eso lo alegría un poco, pero no que lo emocionaría tanto.

—Sigue caminando hay personas viendo —Se quejo el omega avergonzado evitando su mirada, sonrojado hasta las orejas. Comenzando a caminar rápido JungKook se apresuró a tratar de salir del edificio —Oye, tranquilo —Rio TaeHyung.

—No. Quiero que lo vuelvas a decir —Sonrió, aquel sentimiento de tristeza seguía atorado en su pecho, pero quería disfrutar ese pequeño momento de alegría.