4. Yo te protejo.

1K 116 4
                                    

Después de la visita de Shinichiro Sano, donde el chico le había dado una respuesta negativa ante su petición.

El chico de ojos onix simplemente sonrió amable, mientras le aseguraba que el formaría parte de su pandilla si o si.

-¡Porque rayos lo rechazaste!- se regaño a si mismo mientras pegaba a la pared su frente -¡Era tu oportunidad!

Se dio un leve golpe dejando un notable color rojo en su frente que fácilmente logro ocultar con su alborotado cabello.

-¿Mas idiota no puedes ser?- murmuró tranquilo saliendo del lugar -Shini estaba frente a mi, ¿Y que fue lo que hice? Rechazarlo nuevamente.

Mientras el chico caminaba, lamentándose y regañandose, no noto que el pelinegro lo estaba siguiendo varios metros atras, no lo suficientemente lejos como para perderlo de vista pero tampoco estaba lo suficientemente cerca de el como para escuchar lo que decia.

-¿Seria prudente buscarlo?- murmuró el peliblanco concentrando en no chocar contra nada ni nadie.

***

-¡Ey Shin!- habló el chico peliazul que casualmente estaba en el mismo lugar que el mencionado.

-¡Takeomi!- habló nervioso observandolo rápidamente para volver su mirada al frente, no queria perder al peliblanco.

-¿Que estas haciendo?

-Estoy siguiendo a Wakasa- señaló al frente donde efectivamente se podía ver como el menor caminaba lentamente concentrado en el mismo.

-¿Por que carajos lo estas siguiendo?- preguntó confundido el peliazul, que aun así siguió tranquilamente a su amigo que habia empezado a caminar.

-Si descubro que le gusta tal vez pueda utilizarlo para que se una a Black Dragon- aseguró el de ojos negros viendo orgulloso a su amigo, como si lo que hubiera dicho fuera la cosa mas genial del mundo.

-¿Rechazó unirse?- murmuró el de la cicatriz mientras empezaba a sacar un cigarrillo tranquilamente -Parecia estar interesado cuando se lo propuse.

-¿Crees que no le haya agradado?, Después de todo lo confundí con una chica- el mas alto casi se ahoga con su propia saliva al escuchar lo dicho por el chico.

El mejor que nadie sabía como se ponía el peliblanco cuando le hacían mención a ser una chica, volteó preocupado a ver a su amigo, analizandolo de pies a cabeza, el cual se mantenia intacto, no tenia un rasguño para su sorpresa.

Ambos se detuvieron al ver cómo un grupo de adolescentes con tubos habían rodeado a su objetivo, las intenciones estaban mas claras que el agua.

-¿Que hacemos Takeomi?- preguntó rápidamente observando al chico.

-¿Como que que hacemos?- preguntó desinteresadamente el otro -Se trata del gran leopardo blanco, estara bien.

-¡Takeomi!- gritó indigano el pelinegro, empezando a debatirse si era buena idea ir a ayudarlo aun que eso significará ser descubierto en su intentó de detective.

-¡Agh, odio esto!- si mas que agregar salió corriendo hacía el grupo de chicos con claras intenciones de ayudar al peliblanco.

-¡Shin, vuelve!- grito Takeomi en cuánto vio correr a su amigo, el cual lo ignoró, al final, sabía lo terrible que era su amigo peleando por lo que forzosamente tuvo que ir hacía ellos.

Quedate Una Vez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora