Shuji es el dueño de una empresa, es un alfa completamente apuesto, todas se mojan al ver a tremendo alfa, lastima, ese hombre con cara de ser un mujeriego esta casado y bueno, en realidad no es un mujeriego.
Este tremendo alfa esta casado con Hanag...
Nota: No mamen no sabia en que capitulo iba porque tengo como ocho borradores mas que se me colaron entre los capítulos, trabajal para colocarlos bien.
Perdón por no haber actualizado antes, tuve bloqueos, lo bueno es que ya salí de vacaciones! (hace una semana, pero ñe, detalles).
Sin mas que decir, comencemos!.
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Por el espeso campo caminaba un joven Omega, mirando con sumo cariño todo el lugar.
Tenia diez años, su belleza era sutil, solo resaltando su dulce inocencia.
- Takae! -grito el pequeño niño corriendo hasta el mayor- Takae!.
-- Ya te escuche -susurro el Omega riendo por la hiperactividad del menor-
-- Que haces Takae?, otra vez deambulando por ahí? -murmuro el pequeño mientras era tomado en brazos del Omega-.
-- No ando deambulando -murmuro el Omega-
-- Claro que si!, la tía dijo que te gusta deambular por ahí en lugar de ayudarla a hacer la limpieza del hogar! -murmuro-
- No escuches a mi mamá... Espera, desde cuando le llamas tía? -le miro extrañado-
- Bueno... Como tu mamá y mi mamá son buenas amigas, tu mamá dijo que le llamara tía. -susurro-
- ¿Esta bien?... -extrañado siguió su camino -
- Te puedo seguir Takae? -pregunto el pequeño-
- Que eso no llevas haciendo desde hace rato? -le miro obvio-
- O, si cierto. -con confianza tomo al mano del mayor y siguieron caminando-
El mayor solo bufo divertido, recordando como antes eran simples niños huérfanos y ahora tenían padres propios, como tenían que pelear para poder comer.
- Takae... Yo...
Y el pequeño de ocho años le miro, sus ojos azules y cabello azabache le robo el aliento al Omega mayor.
-- Si Haruki?. -respondió sonriente el mayor-
-- Tus ojos son hermosos -respondió sonriendo-
- Los tuyos también -recalco-
- Pero los tuyos demuestran la naturaleza, lo hermosa que es...-
-- Pero los tuyos demuestran lo hermoso que es el mar, el agua y el cielo mismo -susurro el Omega-
-- Me gustaría estar contigo por siempre! -sonrió el azabache-
-- Y yo también Haruki! -afirmo el omega de cabello rubio-
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