I Found You (Steve Harrington/Eddie Munson)

Capítulo 11

La mañana del sábado los hermanos Henderson ayudaron a su madre a llevar su equipaje al taxi que la llevaría al aeropuerto, se ausentará por unos días para visitar a una de sus primas que se encontraba enferma.

Las fechas donde su madre salía de la ciudad solían ser divertidas, Reese y Dustin aprovechaban para despertar más tarde, salir con sus amigos y ver televisión sin restricciones. Sin embargo esta vez fue diferente, Reese creyó que quizá ahora que Dustin estaba creciendo necesitaba más espacio y lo entendió.

Contaba las horas para salir a su cita de amigos con Steve, sonrió al recordar lo nervioso que lució cuando se lo pidió.

-Ay mierda... - se quejó la chica, había olvidado alimentar a Mews, el gato que su madre adoptó. Era raro que no haya aparecido en toda la mañana a pedir comida - Mews, perdón por la demora, ya está tu comida.

Mews no era muy sociable, pero cuando escuchaba la palabra comida aparecía, ¿Habría salido de casa? Ese gato perezoso solo sabe dormir, imposible, pensó.

Sin saber dónde más buscar subió las escaleras en busca de su hermano, quien para sorpresa de Reese se encontraba fuera, estaba pálido y su respiración parecía acelerada.

-¿Dustin? ¿Has visto a Mews? - preguntó la mayor- No ha aparecido en toda la mañana, ni siquiera cuando la llamé para comer.

-Reese, tenemos un código rojo - dijo Dustin asustado - te contaré todo, pero debes prometer que no vas a enojarte.

-Ambos sabemos que no puedo prometer eso - respondió Reese cruzando sus brazos- ¿Qué tan grave es?

Dustin estaba preparado para que su hermana gritara y perdiera el control, pero tuvo una reacción completamente distinta. Se quedó en silencio unos instantes, analizando la situación.

-Entonces, en resumen trajiste a casa a un animal que resultó ser una especie del upside down, crece rápidamente y se acaba de comer a nuestro gato - dijo Reese frotando sus sienes.

-Siento que lo estás generalizando mucho, pero sí, básicamente es eso.

-Y podrías explicarme, si no fuera mucha molestia ¿por qué demonios lo hiciste? - se quejó la mayor.

-No lo entenderías- se justificó Dustin - Además, no es momento para pelear ahora Reese, tenemos problemas más importantes ahora.

-Es cierto, esa cosa...

-Dart -corrigió Dustin.

-Como sea, Dart, ¿sigue en tu habitación? - el menor de cabello rizado asintió- Mierda, creo que voy a vomitar... entonces el cuerpo de Mews... Por Dios.

-No vayas a vomitar -le advirtió Dustin - Tenemos que sacar a Dart de ahí.

-Por mientras podemos llevarlo al sótano, y lo encerramos hasta que logremos localizar a los demás, y pensemos en un plan para deshacernos de esa cosa - dijo la mayor.

Los hermanos buscaron toda la carne que encontraron en su nevera para formar un camino desde la puerta de la habitación de Dustin hasta el sótano. Se cubrieron con cascos y guantes esperando protegerse en caso Dart decidiera atacar.

El plan estaba funcionando, y el monstruo se dirigía hacia el sótano, Dustin y Reese se escondieron para poder encerrarlo en el momento preciso, pero Dart volteó en dirección a Dustin, realizó un grito extraño y antes de que pudiese moverse, Reese cogió el palo de hockey que sostenía Dustin y corrió hasta Dart para golpearlo y empujarlo hacia el sótano, aprovecharon para encerrarlo hasta que pudiesen reunirse con los demás.

-Nadie contesta al código rojo - se quejó Dustin intentando comunicarse con Mike, Will y Lucas.

Y como si las palabras de Dustin fuesen un detonante, lo recordó.